LOS INCREIBLES Y SERÁFICOS DESPERTADORES DE SUEÑOS

El escrito de hoy contiene algunos comentarios no adecuados a menores.

Hoy, vamos con despertadores de sueños y serafines pintureros. Entre ellos, Sigüenza, en su retorno a PV. Un intérprete/personaje que se nota procede de los Boy Scouts por su ecológica afición a acampar por entre verdes praderas mientras fotografía la belleza incólume del paraje y de lo que interceda en medio. De él hablaremos.

Aquella maldita manía que había en España por doblar la voz a actrices españolas y con buena voz como la galleguiña y magnífica Nerea Barros, hoy pidiendo auxilio a “Martín” frente a las fechorías pedófilas del "Celso" de las peores y más perversas manipulaciones. Le sucedió lo mismo que a Emilio Gutiérrez Caba, que teniendo una voz bien empastada, en sus inicios, en “La caza” o en “Nueve cartas a Berta”, le doblaba el donostiarra José Manuel Gorospe. Con Nerea, teniendo una voz de templo gótico, ocurrió lo mismo. En sus inicios, en “Bellas durmientes” de Eloy Lozano, fue esa voz de adolescente que es la jovencísima entonces Cristina Yuste. Siempre he pensado que aquello fue un gran error: Nerea tiene una voz entre sacerdotisa pagana y de Tía Tula, como pocas, y de su buen hacer quedan varios filmes, como en aquel “Rafael” que interpretaba el “rol” de “Aurora”, del personalísimo Xavier Bermúdez. Su breve interpretación de hoy nos expone la maravilla de esta actriz multifacética, sufriendo como madre porque la “Lucrecia Borgia”, alias “Don Celso”, se ha llevado a sus hijos a sobar la merienda en una extraña congregación de niños raptados para mayor regalía de las finanzas del curita redivido. Tristes monedas de intercambio sexual en manos de un lujurioso cura fracasado, terrible de filiis patris orphanorum. Gélido, amenazante y cínico “Celso”, preludio de curas pederastas y su afición por el abstracto sadismo de la dominación de los niños más tiernos y su refocile postrero.

 

Otro de los despertadores de sueños, el psiquiatra alcoyano Juli Canto/ “Montenegro”, que trae en el baúl  remedios capitalinos, sacando provecho de los límites extensos que posee para sanar a quien sabe que no se queja y que tiene la razón que le da la boca cerrada a pesar de haber perdido la noción, que está ya desquiciada por irremediable.

Por no hablar de la bellísima “Quintina”/ mi muy apreciada Blanca Parés, de su manifiesta bondad, despertando sueños de ternura con “Candela”, en ese abrazo de la pastelería. Una lectura del mejor cine de mujeres, de su psicología, de su amparo, de su cobertura apoyada entre ellas. Una llamada a traspasar las fronteras de la pena honda para vivir con la memoria recordada de los bellos tiempos pasados con “Tristán”, dentro de otra superación metida entre las cejas. Me ha encantado esta secuencia entre Aida y Blanca. En una esencia melodramática perfectamente medida que no se avergüenza de arrancarte las lágrimas, algo totalmente chapliniano. Estoy seguro que Charlie, de conocerle, hubiera contratado a Blanca, es un reducto de melancolía ambulante de primer orden. Es un personaje identificado con la época, otro de los aciertos de Blanca. Se mueve, gesticula,  casi te mamporrea como aquellas chicas del mudo. Podía haber sido, por su cara, físico, estatura,  por toda su beldad ruborizada, por todo lo cerebral y melancólico, divertida, lista y sensible, la adecuada protagonista del mejor filme del siglo pasado “Los tiempos modernos”.

 El timo del secador y la belleza ondulada del cabello de "Dolores" de vientre cuando se ha enterado que, la picaresca, le ha tomado por mema y con recochineo por lo alcahueta que es, y  le han vendido un electrodoméstico plenamente ecológico. Como aquel concejal de un ayuntameinto al que solía entrevistar yo y que, antes de pertenecer a la logia de Su Partido, había vendido peines en un hospital a más de un enfermo terminal. Lo argumentaba,eso sí. Era bueno vendiendo peinetas a los que debían estar preparados para las visitas, muchas, porque el tiempo se les acababa. No me extraña que, España, esté en quiebra con tal representación. Una radiografía cachonda del paleto hispano y de su avaricia por aparentar lo que sólo lo da el alma y no la postura, el dinero, la posición o los bigudís.

Si nace macho cabrío es menos peligroso que tal como resulta este fardel maloliente, lleno de impotencia y puteado en los cataplines, ya hasta por el servicio, porque resulta exasperante. Delirante, cabrón, laberíntico y sádico "Fernanpito" que provoca la confusión y la tribulación en una niña que se ha ganado el cielo por casarse con este asqueroso.

Otro que trae sueño atrasado y que sigue sin convencerme, Sigüenza, es otro despertador de sueños tardíos pero muy válidos y sinceros para que, la mejor actriz del serial: Carlota Baró/ “Mariana Castañeda”, nos tenga muy pendientes de su interpretación porque se aproxima un  romance "Puenteviejino". Tengo que felicitar, otra vez más, a Carlota. Disculpen mi pelmada, pero no lo puedo evitar; lo siento. Es que no hay más que verle cómo refleja en su rostro y ojos que funden metal, los más diversos estados pasionales, que tengo que hacerlo. Lo que me extraña es cómo, aún, no han parado más de un rodaje para intercalar a Carlota en ese film. 

Hoy ha estado coqueta, encantadoramente enamorada a través de una ventana. Nos ha demostrado algo muy querido para las personas que detestamos a los engreídos que no por contemplar a una ensoñación  a través de un cristal, no por ello, no deja de traslucirse la fuerza de la realidad ni impone desilusión. Es una visión avanzada y muy diferente del amor, que la practica este pedazo de artista. No zascandileará detrás de un rarito Sigüenza; sabrá salir del sopor del sueño a la realidad. Ella, siempre, aunque no lo parezca, aunque tenga poca cultura(que dice), es el más honrado personaje, tocado por un guión que habla del amor más loco que hubo en PV, de su independencia e infaustas limitaciones y del tortuoso camino hacia la liberación. Y si cae en sus brazos es que el Serafín pinturero este, lo vale en moneda americana. Todo contado con los luceros que brillan debajo de la frente de Carlota y con los trazos de un rostro absolutamente mediterráneo que tiene la suerte de lucir. Hoy, mi apreciada y muy querida Carlota, servidora, puedes dormir satisfecha: Misión cumplida. Para eso estamos los amigos, para que no tengas que hacer brebajes silvestres o tomas píldoras carísimas para dormir. Un artículo. !A la cama!. "Mariana", coqueta y rudimentaria en torno al Sigüenza este de los daguerrotipos, algo distante y sorprendente en sus siempre divertidísimos registros, austera formalmente, provoca la arrimia y pide grandes intensidades al guión para ella. Aprovecha que tengo buen día y me encuentro a mí mismo galanteador con “mu” buena pluma de tinta dorada. Se va notando la liberación sexual y la retirada de cofia  tras la catatonia de "Francisca". Lo peor será cuando llegue de nuevo la gran capitana.

El gran "Anibal"/Jorge Pobes, otro de los despertadores pintureros de sueños macabros, que menuda trola les ha contado a todos. Bien planeado con urgencia, destreza y absolutamente nada improvisadamente.

La víctima inocente y engañada: Charlotte Vega/"Rita".

Impone ver a"Tristán" cuando ya no es sino una lápida, un fantasma de amor y un grandioso e imborrable recuerdo. La moviola. Otros sueños truncados. Asustan y conmueven hasta el refajo estos momentos del ayer congelados en otra dimensión a la real. Los que ya no están en el plasma de la televisión. Una atmósfera subyugante, un punto fuerte esta tarde. Los que se marcharon siguen hibernados en algun archivo de la televisión. !Inmenso Alex!.

Por no hablar de ese seráfico arcangel "Olmo"/Iago García, de preciosa voz y buen tino para dar al "expulsar" del facebook a alguno que conozco, otro "trolero" generador de sueños de condolencia, de alma guapa ahora que va por seducir(eso parece) como amante infernal en una postura tan falsa que simpatiza con el diablo directamente sin pasar por la secretaria.

Dedicado a Boré Bouika que es muy amabla para conmigo y a mi amigo "Popotxo" de Donosti, de la "Orquesta Mondragón", este año en el Cartel del Festival de Cine de Terror.Y siempre recordando asu amatxo Eugenia que tanto nos quería a los de la radio.