En homenaje a mi detective
favorito cuando era un niño: Peter Sellers.
De los buenos ratos que tengo
frente al televisor, que me hacen sentir como un niño, no puedo sino mencionar
la gozada que ha sido para mí, hoy, el múltiple Selu Nieto. Una mezcla de
costumbrismo a lo Manolo Morán /Guardia Urbano con el despiste y refinamiento
flemático del gran desastroso Peter Sellers/ Clouseau.
Secuencia nada exagerada. En algunos municipios españoles de hoy, por falta de presupuesto, los guardias van en autobús y pronto andando o en carro con burros en plan ya lujoso. El alcalde se llevó los dineros.
Siempre recuerdo un día de
Nochebuena, era yo un niño, y mientras preparaban la cena en mi casa, me fui
sólo al Victoria Eugenia de mi Ciudad para ver a Peter en “El regreso de la
Pantera Rosa”. No sé si fue por la fecha, por el encanto que despiertan en mí
las navidades desde siempre, por la peli, por lo desastroso del Inspector, que
me enamoré para siempre del personaje.
¡Enhorabuena!. Don Selu Nieto.
Ya tenemos otro personaje al que darle un traje en la galería de tus
interpretaciones caricaturizadas. Yo no pude ver en su tiempo la primera
interpretación del Inspector Jacques Clouseau, “La pantera rosa”, o ese otro
film valiosísimo de “El otro caso del Inspector Clouseau”. Con los años, soy un
fan de Peter Sellers, aunque me gusta mucho más la versión original de sus
filmes, por la enorme versatilidad en voces que interpretaba e imitaba y aunque
mi amigo Rogelio Hernández lo hacía muy bien, no se podía comparar, el doblaje
con el original.
Peter en bello recuerdo hoy.
El más copiado de la historia del cine. Antología del humor seco y caótico. Un
desastre con patas, enredado en despropósitos generados por él mismo que
complicaba todo hasta la desesperación dentro de un sencillo humor pero muy
efectivo, el de un desgarramantas que es capaz de hacerse tirar por un
precipicio a la humanidad sin enterarse de que se ha quedado sólo en la tierra.
Añade Selu, aparte de los gags
visuales, un toque de melancolía intelectual que asombra por su incoherencia y
despiste generalizado. Selu es el más torpe inspector enchufado de policía al
que le puede asignar un caso en PV. Y son elegantes los dos y calamitosos, catastróficos
pero desenvueltos en sus incoherencias.
Acelerador de partículas mi
apreciado Selu, como Peter, hace alquimia hasta alcanzar la fusión nuclear y
entonces ataca con todas sus inconsecuencias pero con energía suficiente y en
todas las direcciones menos en la adecuada.
Selu Nieto es un pequeño genio
que anda por PV. Un talentoso del humor de un inefable andaluz que dota, a
todas sus caracterizaciones, de diálogos surrealistas que dan que pensar sobre
la salud mental de su personaje “Hipólito”, pero que son de una frescura y de un
homenaje al cine y a sus tipos trastornados y embrollados, de primera magnitud.
Un actorazo que hace enloquecer ante sus dislates y meteduras de pezuña, cómico y
dramático al que no hay que buscarle lógica, sólo quererle y apoyarle porque es
el mejor actor de PV. Es Jerry Lewis para las nuevas generaciones. Que hace de
todo y además reír. Hoy, el duelo entre “Don Jaime” e “Hipólito”, han sido los
mejores minutos del capítulo. Esta escena era tan divertida y surrealista que
daba vergüenza ajena(en el buen y mejor sentido), por la nula capacidad
investigadora del desastroso “poli” que han improvisado en PV. Hasta Jaime se reía. Selu tiene mucha
gracia, sangre y tripas, además de a la moza más requetebonica y de ojos
perdigoneros, Balnca Parés, como para garantizarnos una sanísima diversión y un ejercicio de búsqueda de personajes y autor.
¡Felicidades a todos los actores!. Soberbios hoy. Carlota y Adelfa se
han puesto ese, ese que dicen, el mejor traje de todos: el del abrazo y
comprensión y apoyo de la madre a esa maravillosa hija que “Rosario” tiene:
“Mariana Castañeda”. Un amor que ha prendido ya en la sirvienta, que teme por
su posible sufrir pero que está encauzando, una asimilación que va a explotar de un momento a otro. Un amor
melancólico como de otoño sin saber si vuelve la persona a la que amas con
locura, que desconoces y especulas sobre el qué pensará y con quien estará, cuando la ves reflejada hasta en los sonidos del viento, con un “Nicolás” que la adora hasta el fondo y pena su “guarrada”, pero
se está tejiendo entre ellos un conjuro fascinante.
!Libre!. Para amar y ser amado. Bastante dificultad añadida es ya bregar con el cojitronco de marido de su amor "María". Es una sana perversión de la fidelidad nunca sumida que me encanta. Un buen momento interpretaivo de Jordi en esta primera secuencia. Una pareja ya casi en estado de gracia, salvo por el pecadillo del adulterio legal. Suelo criticar a Jordi, pero es natural, soy sincero y digo lo que me parece en justicia destacable o no. Y a Jordi, cuando se le atempera la energía y desfallece el guión rondando la ñoñez, se queda en menos, a veces casi resulta forzado y anti estético. Hoy, ha encontrado en este momento de euforia un punto equilibrado y le felicito.
Siempre me ha gustado mucho Ariadna a pesar de los vaivenes del guión pero que , como muy positivo a destacar, le han hecho experimentar diversos campos. Ama a "Conrado" y es su primer amor, el primer beso que además los epitelios, como el algodón y los periodistas, no engañan. Este momento ha sido un culmen en su trabajo hasta ahora. Me ha recordado a la mirada de Ingrid Bergman en "Juana De Arco". Mirada extasiada de doncella. De heroina de su PV del alma. Digna hija de la mujer más fascinante de la literatura televisiva: "Pepa". Un primerísimo plano psicológico de hondura y atracción, de amor. Sólamente podrían rodar ese plano, dentro del artisteo español, ella, Carlota, Aída de la Cruz, la donostiarra Marta Etura y Adriana Ugarte. Adriana, una chica con la que compartí un programa de radio en el Festival y dejó huella en mí. La mirada del espejo del alma y del espejo de santidad. Una maravilla de Ariadna. Rostros que nos lleva al interior de la pasión que desata en ella el vaquero de "Grupo salvaje". Esto es el cine. El que conmueve, el plano corto, descuadrado a veces, es Ariadna, es Carlota, es Aída, es Blanquita, decorados mínimos, una oda a los sentimientos mediante el choque de la imagen, una emoción imborrable, un recuerdo en el sentir. Y decir que me encanta su voz llorosa y que irrita a algunos, es similar y mucho a la de aquella actriz del doblaje, ya fallecida hace años, que era una chica de pelo corto y muy avanzada en su tiempo, Helia Romero. Muy habitual en los filmes de los Marx, en los doblajes de Barcelona.
A Mario Zorrilla te lo puedes imaginar en diversas posturas, posiciones y disposiciones, pero jamás así con cara de tan pánfilo y sorprendido. Que parece que el sobrado de PV ha nacido ayer. Otro registro más, sorprendente y muy válido. En tiempos de la"Doña" en facultades mentales relativamente saneadas, ello, hubiera sublevado a las plateas más enamoradas de "Mauricio". !Mira!. Que tiene admiradoras este hombre y desde que sacamos su intimidad amatoria y bucal, más encandiladas. Ha aniquilado un modo casi plano de caer como una bomba de seguridad a explotar a su hora, para actuar en beneficio de la maravilla del asombro, como en los mejores filmes de aventuras.
Preciosa pose de Sandra Cervera.Sentimiento, rabia, con soltura y naturalidad, sin recargar dramáticamente, una actriz elegante y resultona.
Dedicado a Ariadna Gaya y a Inma Gamarra y apoyándoles siempre porque sería injusto y una barbaridad no hacerlo. Y en MEMÓRIA de Rogelio Hernández, la Voz de Peter Sellers y un buen amigo.
Bendita locura de Hipólito, más locos como él, necesitamos en nuestras vidas.
ResponderEliminar