ACTORES:
RAMÓN IBARRA, ARIADNA GAYA Y RUBÉN SERRANO
Un gran momento de derrota y entierro de dos personajes. El pobre "Conrado" que está ya bajo tierra, peor no le podía haber agraciado y peor tratado el guión esta tarde y el otro, "Raimundo" que ha sido sometido a escarnio, también en el capítulo, en esa plaza del pueblo donde las normas dictatoriales de la alcaldía corrupta no dejan pararse o reunirse a los vecinos, un "Ulloa" que ha resultado humillado en ese retrato psicológico que le hace "Carmelo"( un eficaz Raul Peña), momento este último del teatro de Pirandello donde se rasga ya esa personalidad del viejo rockero en el final de su tiempo de engaños a sí mismo y de derrota asumida por el desamor de una mujer. Es la penosa historia de otro y de uno que dan lástima, marcados a fuego por la pésima relación sentimental que han tenido los dos.
Momento de gran literatura, excelentemente retomada en la interpretación de los tres actores, donde se han mostrado las contradicciones del ser humano. Momentos que asoman de realidad entre ficciones y relaciones tortuosas vividas (los dos interpretes las han tenido, una de ellas confesada inéditamente por "Aurora" esta tarde). Es el mundo de Kafka y Borges, ofuscado el ser humano entre lo absurdo de nuestras apariencias que no reconocen las anormalidades y nos engañamos y el discurrir tétrico de la existencia en realidad. Mentira, soledad, engaños, es lo que se denuncia esta tarde, entre personajes que ya no tienen ni entidad ni credibilidad y cuyos pasados era pantomima. Ese momento en el que "Raimundo" quiere retomar la normalidad confesada a su hija, es francamente bueno desde el rigor literario, reconstruir la vida desde cero: el difunto renace. No es el caso ya perdido de "Conrado" al que "Aurora" hoy le ha dinamitado en lo mejor que tuvieron, las convulsiones de su amor; de hecho, "Emilia", contradiciendo a "Aurora" habla de los mejores amores, aquellos que han costado materializar. Pero es que a "Conrado" lo están dejando en los huesos calcinados, mostrando el lado tragicómico más insultante que podamos imaginar (su propia novia le pone a parir), despojado ya hasta de cataplines. Al viejo hipocritón de "Raimundo" le salvan de la quema y le hacen evolucionar, dignificando su personaje. A "Conrado", devuelven sus cenizas en el inframundo de la tierra.
Hoy Álvaro me ha gustado, se contiene a veces en lo peor que tiene, una cierta prepotencia al interpretar, hoy ha dado un cálido hado naturalista a sospecha y discurso. Ha hecho de unos complejos sentimientos en "Aurora", algo sencillo de entender, leído a través de su mirada, algo comprendido y precioso.
EL DERECHO A LA VIDA
GRAN MOMENTO CON MARÍA BOUZAS, FARIBA SHEIKHAN Y AÍDA FLIX
Una defensa de la vida. Una azotaina para buscar esa interactuación del niño y abrirle así la válvula para ese soplo de vida que necesitaba. Momento pro-vida y de televisión culta, desgarrado y muy emocionante. Basada en un cliché oligarca de apropiación de hasta de los hijos de los demás por parte del amo, de humillante racismo, es la pobreza en una sociedad agraria feudalista de modo de producción esclavista.
Todo me ha encantado, la ambientación, los sentimientos, la desesperación y el desgarro de "Inés", la "Doña" buscando una salida que aunque tiene torviscos propósitos, da vida; el aire de sonámbulo de "Amalia" y sobre todo la relación entre las tres protagonistas. No hay un atisbo de superficialidad ni de dramatismo insultante e hiriente. Es un bello y macabro momento que es el comienzo del padecer de un inocente que ha tenido la mala sombra de nacer en España, cerca de la "Montenegro". Es sencillamente perfecto.
Fariba me gusta cada día más. ya lo hacía cuando estuve con ella en Madrid y le dije que me parecía una actriz con mucho futuro. Al margen que es una chica enormemente educada, comunicativa y atenta, sencilla y que sabe apreciarte y por eso le correspondemos con nuestro cariño. Una mezcla de llanto, tristeza, que parece se descuartiza, que lo da todo en su despedazado papel, belleza y pasión, defensa y supervivencia como en pocos momentos que ha habido en ESDPV.
La vida de una parturienta y madre, fantásticamente interpretada por una actriz de grandes recursos mágicos, obligada a hipotecar a su hijo que se lo quieren robar, su propia carne y dignidad maternal, que nos aporta una inmensa sensación de dolor, sufrimiento y misterio porque nada hay más inquietante y peligroso que atacar a una madre. Ojos en blanco, sollozos asmáticos, huesos a punto de dislocarse, pasión y drama, extremos de emoción dentro de una amoralidad en el ambiente, sin reparos, secuencia que se que muchos se sentirán ajenos a ella y a Fariba pero que es de altura, va más allá de los ombligos amorosos, del chisme sobre la cornamenta, publico que prescinde del interés por lo que no sea "Conrado"o los hijos de "Mariana", sin empatía por todo lo demás que lo hay y muy bueno. Creo que a una mujer no le puede dejar de gustar esta secuencia, quedarse indiferente y que no le remueva la conciencia.
PD: Mañana en antena una secuencia en la "Casona" que vi rodar.
Hola José Ignacio. Llevo cierto tiempo leyendo tus crónicas sobre ESDPV y sinceramente me gustaría decir que es un placer leerte. No siempre coincido con tu punto de vista sobre las actuaciones de los personajes, pero es comprensible, si no hubiese diversidad de opiniones este mundo sería una escala de grises y no la gran paleta de colores que es. Ya me voy por la ramas ... Lo que quería decir es que aprecio tus crónicas, no sólo por cómo plasmas tus opiniones, sino también por su contenido.
ResponderEliminarEl cruce de palabras entre Raimundo y Carmelo ha plasmado la evidencia. La frase "Da verdadera lástima ver a un hombre de su talla a los pies de esa mujer" es para enmarcarla. Creo que Raimundo se ha perdido en sus recuerdos cubiertos de nostalgia y su actitud no lo va a llevar por senderos pacíficos, pues Francisca Montenegro, hasta el momento, sólo ha sido capaz de producir ponzoña.
Fariba ha llegado a convencerme, pese a que cuando se incorporó no me terminaba de encajar. Me da mucha tristeza la trama del robo de su hijo, es una situación dolorosa y profunda.
En cuanto los sentimientos de Aurora, me gusta muchísimo la actuación de Ariadna, me transmite ese sentimiento que nos queda en el corazón cuando el amor por la persona a la que queríamos se ha evaporado, pero hay tanto agradecimiento que no podemos sino sentir el peso de la angustia. O al menos, esa es mi interpretación.
Disculpa que haya soltado esta parrafada. Gracias de nuevo por tus crónicas.
Muchas gracias! De ellas salió ese libro enormemente vendido y me gustaría salieran otros. ESDPV es muy agradecido pero, además, es un serial de referencias indudables, escrito con basu amplia cultural y maravillosanmente interpretado, hay momentos que nos han puesto a todos los pelos en punta. ¡Fíjate! si tuviera que elegir uno me quedaría con aquel cuando Pepa aprendía a leer. Nunca he pretendido nada sino entretener y mostrar mis sentimientos en cada crónica sobre cómo veo la vida y el cine. Por cierto Ariadna es la mejor actriz con María Bouzas del serial, para mó. Muchas gracias!
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