domingo, 27 de septiembre de 2015

EL FRACASO DE REBORDINOS: EL FESTIVAL DEL JAMÓN



El equipo de "Sparrow" llegó desde el primer día para quedarse. Comían jamón y se reían mucho en la fiesta de inauguración del Museo, aunque su filme se proyectaba el domingo 20 y se han quedado, viéndoseles en todos los saraos y mamandurrias. Los tuve al lado. ¿Sabían que iban a ganar?
Hasta la prensa más subvencionada, aunque con matices ilusionantes, ha criticado el bajo nivel de los filmes presentados este año en un lánguida Edición del Festival. Incluso: el jamón, las tarjetas doradas, las subvenciones, las habitaciones pagadas, las invitaciones a todas las fiestorras y carpas (de las que expulsan a la mayoría de los periodistas con tarjeta verde) no le han servido al clasista y sectario Rebordinos para que, estos insolidarios periodistas tan bien tratados, palmeen su Festival que nos cuesta más de 7 millones de euros. No ha convencido y se da como balance este pobrísimo resultado. Lo veníamos advirtiendo en cada programa nuestro del Festival, incluso he tenido que bregar con compañeros que me han dejado tirado por denunciar la mediocridad del Festival y protestar por sus injusticias. No ha tenido algún interés o proyección. Esos periodistas a los que invitan diariamente en los bajos del Kursaal, cerrando las puertas a otros que no pueden tener ese encuentro entre gentes del cine del día en el Festival, no se lo han agradecido rotundamente. Las críticas son malas, muy desfavorables para este señor que no vale para dirigir este gran evento y que, jamás, ha comprendido de la proyección del cine en el Festival más allá de los cuatro aldeanos que le palmean y de donostiarras vividores que sólo se miran en su ombligo encantados de comer jamón todos juntos y de haberse conocido en su superficialidad. Los que han ganado la Concha de Oro, el primer en la fiesta del Mueso comían jamón a rabiar y se reían mucho. Venían para quedarse desde el primer día y estoy convencido sabían que iban a ganar. 

He leído por ahí que el Festival siendo comparativamente menor en comparación con anteriores ediciones, cabe esperar al año próximo (¡mientras haya "pasta" para despilfarrar, vaya argumento!) y resalta el número de filmes (lógico los haya en un Festival), el público (que se traga lo que sea y que abandona los cines de la Ciudad que acaban cerrándolos) y la "Tabacalera" que aún no ha sido apuesta de nada y que la veo muy verde por su inacabado y definiciones de proyectos. Esto no destaca nada. El festival es la Sección Oficial y es lo que proyecta al exterior; por cierto cada vez más saturado de cine español sin alguna proyección. Y para un buen filme como "Truman" o "El rey de la Habana", una manipuladora y nacionalista nórdica, Presidenta del evento, da el Premio a una insulsez por puro enchufismo, después de atiborrarse de viandas y de buenos vinos en la comilonas que, día a día, se da el glotón jurado de la Oficial. ¡Es una vergüenza! No aporta nada la ganadora, la islandesa "Sparrows", segundo largometraje de Rúnar Rúnarsson, especialista en hacer bonito lo sencillo, sin más. Un filme que tiene un enorme defecto cual es sacrificar lo sutil y sensible para colocar artificiosos momentos melodramáticos, tal cual es mentar un pasado para aclarar un futuro sin mayor trascendencia y con falta de naturalidad. Premio nacionalista de Escandinavia de la jurado Paprika Steen. En esto se ve la corrupción del jurado, que se premia a sí mismo despreciando filmes muy superiores. Damos de comer a estos vividores para que barran para su casa. Les importamos un carajo.
De hecho, aunque se ocultó en la pelotil prensa donostiarra, falló un miembro del jurado (hasta en los restaurantes lo saben) porque no coincidía con las imposiciones de esta persona.




El Festival naufraga. Jamás ha tenido imaginación con Rebordinos como cuentan sus palmeros, sólo ha sido una continuación de los anteriores, en copia y malo sin alguna profesionalidad. Rebordinos, al margen de ser un sectario con cierta prensa, a parte  de no traer estrellas al Festival, pese  a lo que algunos lame-chepas de la prensa quieren convencer de lo que no hemos visto, no tiene ni idea de dar una proyección internacional al este Festival; sólo sabe de pedir dinero y quejarse y cobrar a fin de mes.
Los que estamos considerados como unos "nadie" por parte de este mal director, conocemos la repercusión de un Festival, que si hubiera premiado a filmes de calidad como "Truman", "El rey de la Habana" o "Pattie", a los que han dado premios lastimeros de consolación por decir algo y que hubieran repercutido tanto. Rebordinos que mira para sí muy egoístamente sabe que este Festival con la pasta por delante, la cobertura de esa casta que acude a las fiestas, puede seguir así indefinidamente y sin más repercusión. Lo pagamos todos para disfrute de unos listos.
El filme "Sparrows" igual se ve en algún país el año que viene. Recordar a este Rebordinos que "La isla mínima" o "Magical girl" (que el martes próximo la ponen en Hendaye mi pueblo) que las están visionando en Francia durante estos meses, con gran éxito, repercuten en la calidad internacional de un Festival que este año ha sido palurdo, sectario, vomitivo por el desprecio que tiene Rebordinos por cierta prensa y sin alguna repercusión. Rebordinos es un palmero del poder que se hace el progre y defendido por una claque que, al referirse a la corrupción, la alejan de este personaje que es el responsable de toda la corruptela de este Festival tan injusto. Yo no le concedo más tiempo. ¡Qué facil es dar oportunidades con el dinero de los demás! Yo me siento orgulloso de mi Ciudad y filmes premiados, que los veo en Francia con honores, lo de este año es de juzgado de guardia.



Premios de consolación humillantes a Ricardo Darín y Jávier Cámara, premios de consolación a "Pattie" (muy bien construida y con gran guión) y una mención a un mal filme: "El apóstata", y un galardón a esta inmensa actriz cubana: Yordanka Ariosa por su potente interpretación en "El rey de la Habana". Este filme es de lo mejor que he visto yo en años. Hubieran dado estos buenos filmes un vuelco en el prestigio de nuestro Zinemaldia y no que se haya usado por la promoción particular de una señora orgullosa de su cine de tan poco interés internacional.
Triste balance de este Festival al que no le doy más plazos con esta directiva tan déspota e injusta, Muchos compañeros no se atreven a decir esto; es así. Son dañinos y tóxicos para el prestigio del Festival. Anticomerciales, unos incompetentes absolutos como han demostrado este año.
Además que hemos sentido algunos el oído inquisitorial del Hotel María Cristina o de la Carpa de esa marca de cerveza donde se nos pone todas las dificultades para poder debatir en libertad algo sobre los que. mientras comían jamón y pinchos tentempié no tenían la valentía de decir. El resultado final es la secuela o consecuencia del día a día.




Denunciar el apartheid por periodistas que se lo trabajan muy duramente y que están despreciados por Rebordinos y su equipo que nunca se verán más en una de estas.



No hay comentarios:

Publicar un comentario