SONO TUTTI JECKYLL E HIDE

Ogni giorno il capitolo Il Segreto

Italia merita tutto il rispetto di me e dedico questi articoli Il Segreto

In Memoria e ricordi di un tempo perduto che non tornerà 

Con grande tristezza hanno finito così male

Va este artículo de hoy por los "Figurantes de Puente Viejo". Han salido de su deambulante  trajín por entre la Plaza de PV,  hartos de estar siempre en un segundo plano; se han deshecho de sus protagonistas, abandonándolos en los camerinos; nos revelan sus identidades y nos han felicitado la Navidad. Precioso detalle de unos actores que son como espíritus fotográficos de unos convecinos pobres que se tropiezan día día con los "grandes" del Puente Viejo, esos otros actores y actrices de títulos principales que se llevan los agasajos mientras que, estos otros, son también hombres y mujeres que trabajan en la seri

Los "figurantes" siempre han mostrado una serena belleza en medio de las pendencias y trasiego de este entrañable pueblo de gentes infelices y mágicas. Ellos guardan para adentro toda una avalancha de sentimientos, transitan como fantasmas, son mudo@s la mayoría y hacen mímica que abaten sobre los espectadores. Son los genuinos y auténticos pobladores de "Puente Viejo".

Yo que en mis programas de radio he sacado siempre a las gentes sencillas de la vida, que en doblaje comencé poniendo la voz  en pequeños takes a un sepulturero, versionando a un negro con cadenas o al botones de un hotel que le lleva el periódico a una rubia, quiero felicitarles las navidades y decirles que, al menos para mí, tienen mucha importancia y que les envío desde San Sebastián mis mejores deseos.!FELIZ NAVIDAD PARA TODOS ELLOS!.

Desde luego que lleva algo muy profundo que le echa para atrás a "Conrado". Ese individuo lúgubre por temporadas y que, cuando le llega por Nöel la nostalgia del abatimiento, le da al anís, tiene un cura al lado y comienza a transformar su rostro en alguien no deseado. Excelente interpretación de Rubén Serrano. Mutación casi genética de su faz, se descomponía en dos .Y cuando sopla en viento por entre la "Quebrada de los Lobos" le pone nombre a su vida: maldita. Hoy con Mario Martín, se llevan la tarde por delante y dura hasta mañana. Momentos de reconcentración que me ha recordado al inicio de la trasformación del "hombre lobo", casi en la transmutación de un hombre rarito en un otro ser con antecedentes criminales, poseído en la noche de luna por algo irrefrenable y que le convierten en un perverso estepario que hace daño, puede incluso llegar a ser un criminal y una bestia que encarna el mal puro. 

"Don Anselmo" ha visto a Satanás en él, un ángel caído que necesita de al menos siete exorcismos para que recobre su alma original antes de  que vomitara  por los flancos por los que han entrado los demonios, apoderándose de su voluntad, arrojándole a las tinieblas de la noche de Walpurgis. El resuello de ese hombre atormentado y salvaje que camina con él, un argumento gótico que nos traslada a tiempos pretéritos de un cine ya casi desaparecido.

La presencia del sacerdote ha sido significada y significativa. Un Mario Martín mejor que nunca. Una confesión ante la autoridad moral sobre la cohabitación del mal y del bien en un ser humano. Y como la fascinación por lo oculto y misterioso atrapa, como a "Aurora" le ha vampirizado,  que lo ve un ser enormemente seductor por la ocultación de la gran verdad en él mismo. Es una tumba que huele mal, peor que muchas. Gran personaje que me está gustando muchísimo. De los que más en PV. Un Mario Martín magistral que también hoy se preguntaba si el adulterio, amar al ser querido es pecado porque está casado. Si el pecado se encuentra en no amar a la esposa. Buena lógica humanista que, de haberla seguido, mejor le hubieran ido las cosas a la Iglesia católica.

Me ha recordado a Spencer Tracy y a Paul Naschy(Jacinto Molina), un amigo al que apreciaba mucho, con el que siempre solía hablar y entrevistar cuando venía al Festival de Terror de San Sebastián y que siempre defendí  frente a las críticas que le hicieron de sus filmes, calificándolos como horribles. Inmenso ese "Conrado", aterrado por haber roto su promesa, cuando se le refleja su imagen pasada de mala entraña, creando un personaje aterrador, que no puede jamás desprenderse del mal, espantado de asumir la responsabilidad por el destino que puede dar a una inocente chica muy enamorada de él. !Qué gozada de personaje!. Esto no me lo esperaba yo. Y una buena chica que le ayudará a salir de sus espacios oscuros, a traspasar una puerta oculta que le hacen ser y sentirse una bestia abominable. Es la atracción por lo medio salvaje como algo gratamente tentador y la ayuda para vencer esas anomalías traumáticas.

Tengo que decir que las trama de "Aurora" y "Conrado" esta dejando muy para atrás a las  otras. Después de lo de hoy, seguro que más. Cuenta con un magnífico guión, una esforzada interpretación donde ella, Ariadna, lleva el amor como antídoto contra el monstruo y él, Rubén, tranporta al engendro que lleva dentro. Muestra, además, un aparato comercial de primera. Sus foros son auténticos templos de democracia pasional, donde los que escribimos somos reconocidos y agradecidos. Se debate en libertad, no te insultan y los primeros que creen en la trama son los propios administradores. A diferencia de esos otros "muros" desconsiderados que casi parece que estás molestando cuando escribes o si participas, como que te están haciendo un favor y ni te agradecen o pocas  veces y de compromiso y te miran por encima del hombro. Que se creen más que nadie, sean administradores, actores o actrices. Incluso te expulsan, como me ha pasado a mí porque no les gusta mi persona. Un actor me dijo que no me ponía jamás un "me gusta" a estos escritos, aunque los leía,  porque era del "Ancien Régime". Pero para que le rindan pleitesía a él, sin duda, sera del "Nouveau Régime. "Pues... no están los tiempos para tales sobradas.

Esta actriz y persona que tengo muy en estima es brillantísima en sus introspecciones dentro del alma sombreada de los demás; parece la conoce porque, con calma chicha, la perfora con Rayox X. En su "confitería", esta tarde, se ha dado el desdoblamiento de personalidad de "Conrado", más cauto que en la "Casa de Comidas". Es otra realidad paralela, menos visible pero de evidente caída existencial, en "Conrado". Ha experimentado "Candela" lo que aún le queda por diseccionar. El mar de fondo del mundo interior  de un personaje obsesionado, dominado por el miedo a sacar a ese su otro Hyde  ante tanto trastorno de carácter. Aída, una gran chica a la que deberían pedir perdón todas aquellas arpías que la ridiculizaban como un clon de la pintura mural "restaurada" en plan chapuza de la Iglesia de Borja, como esperpento compañera del gran "Tristán". Son las mismas que han destrozado la imagen de Megan Montaner por aquello de ser sus fans incondicionales y absolutistas. Tiene Aída de la Cruz una grandeza, una precisión psicológica, un tal laborioso trenzado superestudiado de sus interpretaciones, tal sensibilidad y arrojo que es para experimentarla, pasándose horas analizándola. Tiene el rostro de Bette Davis, su altura, es apasionada y clara, decidida y directa al corazón.

Él también ayudará a "Aurora" porque cuando dos se enamoran ya sólo se defienden entre sí. La intimidad que arropa al amor es una fuerza invencible, dos pueden como doscientos mil. No va a ser un amor de encaje en un universo ultra masculino, de movimientos machistas sino de lírica y de belleza femenina, entre los dos, ella, es la protagonista y él, el enfermo.

Es brebaje mágico todo esto, es metabolismo que acaba comiéndoselo a uno, es la historia de un desdoblamiento de personalidad que acaba fagocitánse al propio ser noble que llevamos y mostrando al monstruo que todos llevamos, que deberá probar dele elixir que le de a beber "Aurora". Me ha recordado en algunos planos a "El hombre y el monstruo" de Robert Mamoulian, en ese horror psicológico y sordidez epatante que me ha dado la nebladura y la "pedrada" de este acojonante personaje, en la secuencia con "Don Anselmo".

Todos los seres humanos transitamos por dos puertas, como "Conrado". !Lástima!. Pero tras ellas, a los mortales, no nos esperan ni Ariadna ni  la maravillosa "Aurora".