5 AÑOS CUMPLE UN PUENTE VIEJO QUE YA NO EXISTE HOY

Hoy, como regalo de aniversario, era esperado, un capítulo sin más, que no hace sino estirar la nada y mecernos en la siesta y lo que ya faltaba, se han cargado esa maravillosa sintonía que durante cinco años nos llamaba cada tarde. Ella, con Megan de andariega por la arcadia del tiempo, significaba como ninguna melodía el inmenso espíritu de Megan y la identidad de Álex; el tránsito  por las vicisitudes de un tiempo histórico muy interesante; la senda de todos los demás y el alma de la melancolía de un serial que fue magnífico en verdad. Esa bella sintonía tan pegadiza y de calidad, nexo costumbrista de unión que identificaba un serial y unas existencias generacionales narradas durante años. Era la armonía y el entendimiento de lo que veíamos todos y nos unía. La han fusilado, ahora al estilo de "Amar es para siempre" (aunque podían copiar sus bodas como la de hoy y de un capítulo grandioso, el de esta tarde), ya desubicándonos cada tarde definitivamente por el serial. Hemos perdido la onda. La sintonía en cualquier programa es concordancia, algo en lo que todos estábamos de acuerdo y nos dirigía el pensamiento hacia ello. Por cierto una canción que no dice nada, átona y de pasada rápida. Y es que ESDPV no es ya ESDPV por mucho que lo conmemoren. Renovarse y morir. Así pues nada nos ata ya con aquel serial; un capítulo triste. Pero que queda claro que "Puente Viejo" ya no existe.

Comentaba el pasado día María Bouzas que el reto era seguir ahí y que los guionistas siempre nos sorprenden. Cierto es. Pero no hay de olvidar que las sorpresas pueden ser positivas, rompedoras o de sepulturero y aniquiladoras; como en la actualidad, con un guión falto de garra, soso, sin brío, de diálogo de besugo, hecho a la medida de la ocurrencia diaria y al socaire de meter personajes sin ton o son o interés; inventarse situaciones sobre espacios inexistentes en el "Puente Viejo" anterior (el tema de la gran finca de la "Casa de aguas" entre muchos o meter dos curas sin más que por algo será); hacer un vodevil cutre sobre aquella fascinación que inspiraban los buenos días de ESDPV. La sorpresa es un chasco y cada vez son más los que piden le den un final bello y hermoso para no llorar de estupefacción al contemplar a ratos, cada día, la insipidez y la nadería actuales. Y cada día los diálogos son más alcahuetes, sinsorgos, sin fundamento, paletos y que asombran por la consternación que supone ver en que ha derivado, cinco años después, un serial que definitivamente no es ya "Puente Viejo". Lo han enrevesado tanto y enredado cuanto que ya es  otro producto, con o sin "Francisca". Aparte que los guionistas actuales no saben del pasado, se nota. Un día se equivocaron, algunos modestamente lo dijimos y Peidró nos respondió que gracias también a la críticas con acidez se hace audiencia y ¡Viva el share! que es lo que debe importar. Y fue cuando nos llamaron carcas, rencorosos, que odiabamos (muy actual por cierto eso del delito de odio), trasnochados, incluso se metían con mi apellido, pues así ha ido la cosa.

Entre personajes nuevos inexpresivos e insustanciales, con unas tramas ya vistas pero peor contadas, que aburren, resulta todo desaborío; donde había un guión culto y una entrega de personajes, hoy es todo de un quiero y no puedo absoluto, donde se compendiaba la cultura y el costumbrismo de una época, hoy es un despliegue de murmuración, amaneramientos, cotilleos sin gracia, enredos de pacotilla, donde se han cargado el amor en su más portentosa expresión que arrastra a los espectadores cada tarde hasta el delirio y los llevas adonde quieras. Todo es higiénico en los amores sobrantes y entre tanto despliegue de pudor entre cupidos cursis con unos actores que ni sienten ni padecen el amor en la pantalla. Amores sin pareja.

Los personajes que quedan  son una caricatura de relleno para mantener el título de una serie muerta. Los nuevos, están por estar estando, a la sopa boba la mayoría de ellos, a excepción de María Bouzas; de Selu que ha perdido con el petardo de "Onésimo"; de Maribel. Los demás... hasta que la serie aguante. Los actores han sufrido la humillación de desnaturalizarse tanto en sus personajes, que se han hecho parodia de sus originales y de agua y chisme. Como dos ejemplos: Torrebejano (cada día vocaliza peor, hay que ponerle surround), producto de la desidia existente y de la falta de ilusión y escasez de materia prima argumental, ha bajado notablemente en interpretación; Carlota ha sido exterminada hasta la extenuación; Sandra o Aída son unas enredaderas y cizañeras totales sin alguna clase dramática, entendido en sus personajes. ¿Que queda de aquella Sandra que filosofaba junto a su padre sobre la realidad de la España que le toco vivir? 

Hoy que han dado la luz en ESDPV se les han fundido todas las bombillas y apagado los referentes y oscurecido en su totalidad aquella gran calidad del serial. Se han fundido los plomos y la nostalgia de la moviola ha sido peor.

Lo que le ha hecho mucho daño a ESDPV ha sido la politización del mismo. Yo he leído constantes mensajes subliminales de acercamiento a las políticas de la ultraizquierda que quiere gobernar el país, desde curiosamente que se presentaban para el Ayuntamiento de Madrid. Actores, fans apoyando en sus muros a"Podemos" o a Ada Colau, guionistas, todos con su apoyo a  los simpáticos comunistas, la navidad comunista y sus bailes rusos en el Belén al unísono con la iconoclasta de Carmena, los Reyes Magos obviados; en estos días un impresentable "Raimundo" (un existencialista de lujo y escéptico) justificando el terrorismo de los anarquistas como gente que había sufrido mucho. Parece un personaje para que Celia Mayer contrate para los próximos carnavales.  ¡Vergonzoso! Como aquella campaña de la "cuchara" que yo observé coincidía con el hambre que Carmena tergiversaba sobre los niños hambrientos de Madrid, y al unísono, los actores, se ponían a hacer propaganda de algo que era una mentira ya que no existía , como ese abandono sobre los niños, y Carmena continuaba con la política de comedores de Botella. ¿Qué coño pintaban los actores en esta manipulación?

Mario Martín me achacó injustamente que yo había dicho, sin mencionarlo siquiera, que había dicho que "los actores de PV votaban a Carmena por ser la madre de la todopoderosa Eva Leira". Incierto total. Ahora sí que ello lo comentan algunos medios de prensa. Que andan ustedes colgados de Carmena por ser la madre de Eva, para buscarse el pan. Yo creo que Eva Leira es una profesional y no hace caso de ese baboseo actoril en absoluto, de actores sin alguna gana de salir  a delante que no sea hacer la rosca al poder. Yo nunca lo dije, quede claro. Pero sí que lo que olía a "Podemos" de apoyo descarado en algunos actores en la RED, era malo para ellos y el serial. Lo de "Raimundo" con su justificación de la violencia anarquista, sus manifestaciones en la calle tras estos crímenes, dicho hoy de la banda de la ETA, sería un delito porque justifica el matar a gente. Por esos andurriales anda PV hoy.

¿Será verdad o no lo que aseguran periodistas hoy, que los actores pensando en ser elegidos, se explayan en halagos a Carmena, como en los "Goya". Yo conocí un tiempo no muy lejano en el que estos actores babeaban a  Zapatero y a Carmen Calvo a la que lamían las gracias y sus chorradas sobre la gratuidad de los libros de texto, el dinero público y demás patochadas en el Festival donostiarra. Ahora son de "Podemos" y de lo que se tercie. Muy mal camino emprendió ESDPV. Hoy cuando "Raimundo" hablaba de políticos corruptos, se le olvidaba de las izquierdas corruptas y terroristas de su tiempo. Ya nos entendemos.
Decía "Dolores" en esa plaza de PV donde se celebraba la llegada de la luz, que se han ido muchos; cierto es. Y de dentro y fuera. Y han echado a muchos también, buena gente, fieles, se les alejó con prepotencia, a la que han condenado al ostracismo porque no ha creído que ese era el mejor camino para perpetuar la grandeza de un serial.
De todos modos de esto que llaman ahora ESDPV hay algo que no me cuadra, tanto actor sin más, sin fundamento, bajo pretexto, sin soporte justificatorio o razón que queda luego en entredicho.
He escogido fotográficamente del serial, su ayer, con aquellos momentos que en nada justifican como celebración, salvo el lacrimógeno del encendido de luces, cinco años de un serial que fue muy bonito mientras duró.