EL OLOR DEL FANTASMA.

ACTORES:

ÁNGEL DE MIGUEL, SELU NIETO, JAIME LORENTE, YARA PUEBLA, IVÁN MONTES, GIULIA CHARM Y MARIBEL RIPOLL.

Genial versión de "El fantasma de la ópera", recreando unos de los momentos más hermosos y trágicos de la novela de Gastón Leroux. Cuando el fantasma hundido en la depresión, nostálgico, solitario y enamorado hasta la osamenta de Christine, le escucha cantar desde la cripta, el "Fausto" de Gounod. Ha sido inenarrable. Nos ha traído todo el aroma romántico y trágico de Leroux, el misterio del mundo real que sigue el fantasma a través de la bella voz de su enamorada. La atmósfera de tensión y conmoción en el foso donde un fantasma pena, oculto, entre penumbras románticas. Casi lloro escuchando ese piano y metros por debajo, un fantasma, reconoce a la mujer que ama por encima de todo y no puede acudir para estar con ella. ¡Precioso! Este remake muy digno del autor también de "El misterio del cuarto amarillo" que tan bien interpretó hace años en la televisión el gran actor Rafael Navarro (la voz de Charlton Heston en el estado, en "Ben-Hur").

Ángel de Miguel ha estado sublime en este remake de aquel filme de la "Universal". De esta trágica y muy triste historia de un hombre a vivir en las catacumbas del tiempo, sufriendo lo indecible porque no la puede tener siendo inocente de lo que se le acusa. A destacar cómo escucha el sonido del piano que llega desde una casa en la que él ya no puede entrar salvo clandestinamente y tan sólo manifestarse como une ectoplasma. Destacando de igual modo, esa opción estética expresionista y esa humanidad del personaje que se sincera con "Matías" y que desea saber que es lo que le ha llevado a ese punto y lo que tiene que ver "Elías", por cierto un personaje asentado, que encuentra su sitio ya, al que el guión le da cobertura lógica y torticera para sus inquinas y planes. "Elías" es como un periodista de los de siempre, de los que manipulan para alcanzar sus objetivos y como buen político también, todo lo arrima a la conclusión de sus planes.

Toda la secuencia del piano y el foso, la sesión de música, así como ese momento enigmático donde "Camila" huele al fantasma, lo presagia y no es una sugestión, es magnífico. Toda la textura y el suspense, se convierten en valores atrayentes. A ello le pondría yo un chirriante tecnicolor, de aquellos que cuando los proyectores eran de carbón y la imagen resultaba con un color precioso, muy atrayente por la naturalidad que daba la luz blanca que atravesaba la óptica, todo ello entre tonos pastel entre suntuosidades de decorados kistch. Así imagino yo este momento.

Ha sido cuasi perfecto el atractivo serial esta tarde en "Los Manantiales". Los actores rozan un nivel alto y muy preparado; el guión, a diferencia de la chabacana que es casi todo ESDPV ya, adulto e inteligente que recrea el mundo de misterio y terror de Leroux, sin artificios y muy verosímil. Además es un retrato fidedigno en clave de serial de las miserias de una sociedad y de allegados donde ya no existen valores y todo, como en "Elías", es trepar socialmente sin moralidad alguna. Es de igual modo una defensa de la mujer, ser espiritual que no condena y sigue esperando a su amor.

Muy conseguido ese juego psicológico del olorcete a fantasma, de gran carga de profundidad, y con un tratamiento del espacio y elementos envidiables, que rezuma a hombre y evadido, que huele a amor lejano, que sabe  a alma en pena que atraviesa lo muros hasta fundirse con un amor imposible.

Y detrás de todo ese extraño y frívolo "Elías", manipulador, que va sumergiendo a los personajes en convencimientos negativos, en inesperadas cábalas sin mayor sentido que sus instigaciones, con malicia hitchcockiana, intentando corromper a`personajes tiernos y dulces a los que su instinto no les da a entender lo mismo sobre "Hernando". "Elías" que como decía encuentra un sentido ya, busca en el arte de la palabrería, una herramienta para subir y conseguir todo lo de "Hernando".

Secuencias a destacar: toda la confesión y sentimientos que, naciendo de la duda, se están creando entre "Hernando y "Matías". La mirada de "Elías" complacida con los dos enamorados cuando los manda a trabajar y que muestran por primera vez un lado humano en el personaje. La secuencia de la entrada en el despacho, merecidamente a destacar por que impregna sulfuro y suspense a esa estancia, casi notamos que "Hernando" está  allí con una Yara Puebla en este momento exquisita y que nos muestra casi en su jadeo la atmósfera misteriosa de algo que inquieta porque, en es lugar, ha estado el fantasma antes; la actriz, Yara, ha estado mejor que nunca en este momento.

A destacar de sobremanera ese Selu Nieto que hace un recopilatorio de su vida en "El Colmado" ante su primo y que me ha recordado a James  Stewart cuando en "El hombre que mató a Liberty Valance", de John Ford, ante la prensa, se pone tierno y evoca los viejos tiempos de aquel oeste cuando conoció a su amigo que ahora entierra. Los gestos, los ademanes, la impronta de Selu me trajo este momento de un grandioso filme lleno de nostalgia y realidad de lo que es la vida. La vida es lo que hoy contó Selu en su comercio.

La llamada de los clientes que dejan de comprar, la visita de "Camila" a "El Colmado" con interés igualmente. Mención al "Intendente" que como en la España actual, nombran y quitan alcaldes jos jefes de los partidos. Gran capítulo el de "Los Manantiales"