EL DIABÓLICO "GARRIGUES"

Capítulo culebrón culebrón y soporífero. De estos que te echas una agradecida cabezadita al principio, por la mitad y casi al final de nuevo. No obstante, sí que me ha gustado el ambiente tenebre que se crea en esa angustia de los presentes en la "Casa de Comidas" ante la llegada de "Garrigues". Estaba muy conseguido. Una muy lograda puesta en escena donde destaca Carlos de Austria y toda la adaptación de los actores al unísono sobre lo fúnebre que se vuelve el local y el pánico que transmite el perverso personaje, con una puesta en escena que denota un gusto desgraciadamente ya perdido en ESDPV. Es un placer contemplar como se coloca a los actores en el lugar más adecuado interactuando a la perfección entre ese juego mental donde la desconfianza, el temor, el pánico  alas represalias, están presentes en todo instante.

Grandes dosis de suspense al estilo de Agatha Christie y esa intriga en nuestro cerebro en descubrir el misterio de las intenciones del maligno. Dosis de cine negro, calculados los tempos donde todo puede ocurrir, donde cada acto, sospecha, mirada, tienen una relevancia que impresiona. Cuando el actual ESDPV se deja de telenovelas baratas, de sandeces y se vuelve a las fuentes, estos resultados nos evocan lo que se ha ido perdiendo en la serie y que no estaba muy lejos de la realización del cine mudo. Cuando las miradas, las pasiones entre aquella linea pasional y oscura de la serie, con un buen guión servido que no faltaba (no como ahora que es de chichinabo), intrigas, amores apocalípticos, con aquellas excelentes puestas en escena ( y no las de ahora para cumplir con la audiencia) a veces tan calustrofóbica (sobre todo en la etapa Megan) donde los personajes eran amados hasta el delirio y con la sola imagen y casi sin palabras quedaban retratados.

Por ello alabo esta secuencia porque me recuerda cuando fui tan feliz descubriendo una serie imponente, casi única, una perla que me sugería tantas referencias cinematográficas y televisivas. Los que conocieron la televisión española de los 60, sus teatros, autores, interpretes, si han visto esta secuencia, se habrán tropezado con algo que, viéndose en blanco y negro, recogía una atracción y una emoción y que han resultado intemporales, geniales y creando atmósferas de intriga y amor extraordinariamente conseguidas. Esa es la línea de salvación de la serie pero con estos guiones donde algunos escriben para ellos y no para la gente, no tiene remedio.

La atmósfera oscura y opresiva que crea "Garrigues" es irreemplazable. Usando desde elementos biopic del vampirismo del cine actual, desde Sommers hasta Darabont y Carpenter, del expresionismo alemán y del cine negro y bastante del truculento cine francés de los 40, de Clouzot y Julien Divivier. Es un personaje muy rico en matices y magnetismo para el mal.

Y me gusta mucho de "Garrigues" la frescura y naturalidad de las insinuaciones y amenazas que lanza. Crea una atmósfera terrorífica que suma elementos de horror, traiciones, engaños, corruptelas, dominación, sometimiento físico,autoritarismo, arbitrariedad, crueldad sádica y despotismo. ¡Veremos cómo transcurre!

Dedicado a Ana Manrique, una señora muy querida en Hendaye que se pasó la vida arreglando zapatos en su cordonnerie, Se ha jubilado y nos dejó una nota en su escaparate despidiéndose de modo tierno y sublime. Se va a cuidar su jardín que bien se lo merece y deja al pueblo huérfano de este oficio. Su familia, ella y su futuro esposo huyeron de España por la frontera de Irún cuando la Guerra y se establecieron en Hendaya, que les acogió en su exilio y aquí crearon su familia. Viuda hoy es una señora muy amable y cariñosa y ahora no se quien me va  a arreglar los zapatos!!!