EL AMOR QUE NUNCA MUERE / LAS GRANDES HISTORIAS DE AMOR EN LA TELEVISIÓN DEL 2017

UNA PREGUNTA QUE OS LANZO

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Fue de infarto contemplar a "Nuria" en el cierre del capítulo. tragándose toda su amargura, su soledad a partir de ahora que pierde a su amor y el desagarro de saber que le ha hecho un mal enorme a "Jaime" que se ha ido con unas terminales palabras casi de difunto: "No supe darme cuenta y ahora estoy loco por ti". Ha sido desolador este final. Le ha mentido; se ha llevado la peor parte "Nuria" porque es duro no confesar la verdad pero, yo personalmente, pienso que debía haber aclarado con él la situación de hermanos; por no hablar de "Rosalía" que es un personaje muy ambiguo y alejado como su actriz. No sé que es peor: que "Jaime" conozca la verdad o que se quede derrotado, porque ha salido del despacho en la cruel creencia de que "Nuria" se equivocó y no le ha amado. Este es un tema para debate. ¿Que haríamos en una situación así? Yo confesaría la verdad.

Muy difícil que muera el amor en ella; él se recuperará en parte aunque el golpe recibido ha sido muy duro. Secuencia revestida de serial pero de una hondura humana y existencial brutal. Me surgen sentimientos rotos en los dos, trasladándolos a la misma vida fuera de la ficción. Lo peor en ocasiones no es  no conocer la verdad sino que una mentira la enmascare  y que parezca real. Porque "Jaime" se lo ha creído. Podrá ser el menor mal posible pero un día sabrá la verdad. Yo creo que es discutible. Y en todo lo que ha ocurrido esta tarde, cobra más importante lo que se sugiere pero se oculta (que "Nuria" está hasta la médula enamorada de "Jaime") que lo que se muestra y es apariencia letal para los dos. Disculpad que insista en la última imagen porque lo dice todo y mucho más. Es el amor maldito sobre ella derrumbandole la existencia.

Un casi decirle "fingí que estuve enamorada de ti", ha sido tremendo. Pero a pesar de todo ha sido un momento muy romántico, aunque el amor se haya borrado aparentemente de los sentimientos de "Nuria"; a pesar de toda la tragedia, ha habido romanticismo y muy a pesar de la experiencia dolorosa, existe amor hasta el infinito. "Jaime", que pasa como un perdedor en la serie, es tal vez el mayor ganador de todos porque triunfa con su esfuerzo e intuición, con su trabajo e ilusión y porque ha dejado muerta de amor a su hermana. ¿Quien recibe más?

La secuencia en la que confiesa ante "Rosalía" que ya es tarde para volver atrás, es antológica. Es la confirmación que, en el amor, cuando una mujer esta enamorada, es muy difícil pueda desenamorarse así de sencillo. Y esa brecha en ella no se cicatrizará, posiblemente, jamás. Brutal ver partir a tu amor por una malsana situación maldecida; verte obligada a mentirle; llorar en silencio y caer en una agonía que sabe "Nuria" se agravará con el tiempo hasta hacerle insufrible los días y las horas. Historia realmente desgarradora y la mejor de la serie; triste y dolorosa que obliga a esconderse a la chica en el manto de una mentira que le hará sentir aún más desconsuelo y angustia existencial. Lo importante que es el amor; es lo que más hace sufrir al paciente porque es también un mal que se torna una enfermedad por sus síntomas y diagnóstico. 

                                                                                                       

Las dos conmovedoras interpretaciones nos han transmitido esa sensación atribulada de dos personas que se quedan descolgadas y que se aman más, paradógicamente, tras la ruptura. Se han quedado aisladas, abandonadas, él uno sin la otra, tras lo que ha truncado una terrible mentira.

La representación ha sido tan natural que hemos participado en la angustia de estos dos peonajes lanzados al olvido que nunca terminará de olvidarse; todo ello gracias a la pareja protagonista de Thaïs y Javier, dignos de un premio de la academia. Un momento que habla de asumir una herencia genética no deseada; de una mujer hacia el hombre que más ha amado en su vida. Momentos de culpas de otros en un entorno inhumano. Personajes auténticos colocados en el límite de lo soportable en una realidad cruel y hostil.

Poco a poco van convenciendo a "María", otra de las protagonistas esta tarde, a que cambie de opinión; que tal vez por su juventud, falta de compromiso en lo social o por miedo y malas experiencias familiares, necesita un empujón para comprender la grandeza de aquello que lo dieron todo por un ideal y se jugaron el tipo. Otra cosa fue la traición con Suárez de todos los partidos políticos. 

Capítulo a capítulo, el guión incide honestamente en la pureza de sentimientos y valentía de aquellos héroes de lo cotidiano luchando contra el inmundo fraquismo; que combatieron por restablecer un gobierno democrático y encuadrados en movimientos de resistencia anti-franquistas. Y lo que le ha dicho el "Abuelo Pelayo" es una linda verdad, sobre lo orgulloso que se siente que hay gente que se tuvo que irse o fue encarcelada o torturada, por la libertad. Esta parte del guión habla de la memoria histórica, no la corrupta de Zapatero; del valor de la lucha y de la libertad; de la vida y de la esperanza en un mundo más justo; del valor de la utopía y de su alto precio para alcanzarla y de todos aquellos soñadores ideológicos que mantuvieron encendida la llama en los años de mayor dictadura opresiva de España. "María" resulta agradable, pizpireta, cabezota, amante de su familia, tierna, justa al final y emotiva. 

¡Que tiempos! Robaron todo. Solía contar mi abuelo que toda la juventud pero jamás la decencia. Amigos que se dieron por muertos, exiliados, gente oculta, luchadores de clandestinidad, la crónica negra de unos tiempos que nunca fueron buenos para la gente corriente. A veces los espectadores valoran más las historias de amor y es lógico, pero es un lujazo este recuento de historias de humanidad y sacrificio en "Amar es para siempre"; de penalidades de aquellos hombres y mujeres siempre en rebeldía, a veces  de forma airada, otras en silencio, que se negaban aceptar a una triste sociedad a la que se les condenaba a padecer.