jueves, 1 de junio de 2017

LA TERRIBLE HISTORIA DE LA ETA


Tremendo capítulo con una sencilla pero compleja y muy valiente disección de la inutilidad de la lucha armada; de su flagrante injusticia, de su irracionalidad  y del drama aterrador que provocó a su alrededor. Un capítulo aderezado además, con historias muy tiernas y bonitas, tristes, melancólicas, de felicidad, de despedida, policíacas que siguen sin cuadrar móviles con personas, de amor y de enamorados que despiertan a la belleza del otro ser. Ha habido de todo como en las boticas y colmados de antaño.


Yo conozco muy bien Errenteria, el pueblo del etarra de la serie. Fui corresponsal en ese lugar varios años y la ETA lo ensució durante dos décadas de modo ignominioso. Yo he visto morir a gente en Errentería, asesinados por la ETA. Gentes semidesnudas tiradas en la calle, como Zamarreño, en un patio de su casa, expuestas a la humillación más grande y con un tiro en la cabeza. Uno de los peores días de mi vida. He visto a sus viudas en "Fandería" llorar en silencio en torno al monolito que recuerda a las víctimas de ese pueblo y mucha gente más, deesconsoladas por sus maridos y amigos. Conozco aquella calle Viteri que menciona el etarra esta tarde, donde en algunos bares se reunían aquellos facinerosos que tanto dolor causaron y a los que no te podías acercar. Sé lo que es informar y ser amenazado, insultado y zarandeado; conozco transmitir desde un balcón del ayuntamiento sus fiestas de "Magdalenas" y tener que esconderme porque nos tiraban piedras, huevos y de todo desde la calle que parecía era sólo de algunos. Yo he estado en ese pueblo y cuando veo al etarra rememoro los peores y más inútiles días de la vida de mi país.


Lo que con valor ha plasmado el capítulo era así y la alucinada justificación de la estéril lucha de armas es la que ha dado esta tarde el jefe del equipo: "Ser fuertes y demostrar quienes somos", cuando "Maroto" le dice no entender, ni él ni nadie, que se pueda matar a inocentes ciclistas porque, ello, no conduce a nada, es irracionalidad asesina. Que la lucha de un pueblo nada tiene que ver con asesinar a sangre fría a sus gentes por motivos que, la mayoría de los que murieron no se enteraron jamás del por qué , ni ellos ni sus familias.


Me toca la fibra sensible porque conocí la Errenteria de "Los años de plomo" que dejó quebrada la ETA y la era de la recuperación socialista y conozco de su evolución. ¿Para qué sirvió aquel ensañamientos criminal? Para nada. Contemplados desde hoy, estos malhechores de las bordas, perversos, vengativos, embusteros, manipuladores, sin piedad, sólo han conseguido regar con odio y desventura a una gente que, antes de ello, tenía más derecho a vivir porque, un desalmado psicópata, un día, pensó que para su lucha y negocio personal, era necesario eliminar al que pasaba por allí. Yo quiero mucho a Errenteria. Siempre he tenido mucha audiencia en ese pueblo y le estoy agradecido porque siempre me apoyaron sus mejores gentes.



Claro que cuando "Maroto" se entera que estaba siendo manipulado por unos locos de atar y peligrosos, desea marcharse y no hubiera colaborado. La secuencia es tremenda: el signo de ETA de la serpiente y el aizkora; la Ikurriña como soporte emblemático de la lucha armada; los recelos de los militantes hacia quienes no son de ellos; la turbiedad de la clandestinidad; el error humano de pensar que, matando, alguien conseguiría algo para los demás o para ellos; la agresividad y violencia que impregnan esos momentos en los que, deseando salir de la borda "Maroto", se intentan abalanzar sobre él; el desprecio terrorífico que se respira por la vida humana en los sin alma de etarras; la vergüenza de los daños colaterales como algo  inevitable y  a asumir por la causa de nunca nadie supo cual y todo aquello que, contemplado desde hoy, no sirvió para nada, por lo que murieron tantos de entre todos para algo más que no haya sido vivir algunos de puta madre gracias a la sangre vertida por los más inocentes.
Una gran secuencia de denuncia y real como lo fueron aquellos preparativos de atentados con sus injustificables argumentos e impiedad hacia los seres humanos que acabaron siendo víctimas de un llamado "conflicto" que sólo residía en su tarada cabeza.
Detrás de "Maroto" hay algo que me sigue oliendo a que pudo ver al asesino o tal voz tener complicidad con él. Aquella cara descompuesta que ponía en "El Asturiano", al escuchar a "Ginés" y "Bruno" era harto elocuente. "Maroto" creo será una pieza fundamental en el futuro.




Secuencias preciosas. A lo "My fair Lady", esta tarde Henar" con su "Profesor Higgins", el tal empalagoso "Edison". Un ciero remake de Audrey Hepburn en la ultima secuencia de este filme de Cukor. Por cierto, tampoco descarto a"Barrantes" como asesino, sus motivos tenía; ni a "Henar" en absoluto.
Una despedida sincera, amistosa, llevada con un tino en el que, "Rosalía", reconoce que le podía haber querido pero es su familia y marido quienes deben de estar a su lado, todo con gran tristeza asumida casi masoquistamente por "Esteban".




Unas inquietantes miradas al vacío del abismo y pensamientos sombríos que registra "Marta" cuando toma conciencia de la situación económica a la que, tal vez, su crimen, ha conducido a "Ana María" y su intento de reparar daños para que, "Ginés", esté bien atendido económicamente. Yo encuentro a "Marta" que se acusa mucho, por palabra, expresión y confesión, de la muerte de su esposo. Me mosquea. Hay existe un punto eslabón tal vez con el homicidio o lo que fuera.



Yo no me fío de ninguno de los tres: "Ginés", "Ana María" y "Marta". Y no me creo nada de la "Marquesa", todo le da igual porque, su hijo, ya no está; por ello mismo, abandonando el barco, tal vez lo mató por canalla y poco más aspiraba en su vida. Le daba ya igual.


Ya digo que me sorprenden estas caras de autoinculpación en "Marta".  Algo hay aquí.



Enorme esta tarde María José Goyanes que nos lleva por donde quiere ; viéndola y escuchándola, nadie sospecharía que, ella, pudo matar a su hijo. Y yo creo que sí porque ese teatro que puede estar haciendo sólo lo alcanza una grandiosa actriz.





Un "Bruno" que recibe la mejor noticia que puede llegar a un adolescente enamorado que se se sentía olvidado de su amor: que ella le quiere y que no le ha olvidado.







Y una delicada secuencia, de reconciliación,  entre "Rosalía" y "Nuria" sobre su derecho a conocer sus orígenes.
¡Atención! la pista de los "Juancarlistas" no creo lleve a alguna clarificación y posible búsqueda del asesino. Aunque el inspector debe buscar porque no se puede dejar ni un cabo suelto. Pero mañana llega un asalto  a la vivienda de "Alonso" y creo que, de ahí, vamos a poder hilvanar quien puede estar tras de este asesinato a través de lo que buscaba o pretendía hacer creer que buscaba. Pero esa pista nos lleva a "Quintero" y también tenía sus motivos. Puede ser forzado y para despistar ahora que, "Caldas" sospecha de "Marta"; no que haya sido ella, pero sí alguien que le encubre. Tal vez sea la primera manifestación pública del criminal. 



8 comentarios:

  1. Dramático relato sobre la crueldad de la ETA. Valeroso alegato por la paz y de recuerdo a las víctimas y un 10. Así se escribe y asi se es un periodista no vendido. Bona Nit

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  2. Yo ya sabes soy de Rente y no sabes lo que me ha emocionado tu escrito. Que gran verdad. Es que en Rente te seguimos querido mucho aunque ya no estés de corresponsal. Marcaste un antes y un después en la crónica y se lo que pasaste. Permítete un abrazo amigo. Hiciste muchos amigos y se que te acuerdas mucho de aquella época y de nosotros.Ahora estás en otra onda pero siempre un txalo al periodista mejor que pasó por Rente. Gora Errenteria y cuanto daño han hecho

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    1. Sí Manu me acuerdo mucho. Cuando atravieso la frontera y voy a Donosti siempre miro a este pueblo donde aprendí tanto e hice a tantos amigos. Estaré siempre agradecido a Errenteria. A pesar de que un día, los de la ETA, quisieron volcar mi coche conmigo dentro. Pero la gente era buena, muy buena. Y recuerdo mis escritos en la Revista de Oarso, sus fiestas de Madalenak, mis idas y venidas al batzoki de Guezala, mis entrevistas al alcalde y concejales, los cines de antaño, mis compañeros de prensa, mis novias y mis bailes de chaval en sus discotecas, en el Penny Lane, y cuando presentaba en el Apolo festivales de música con Pedro Óscar Canadell. Una parte muy importante de mi vida que siempre llevo conmigo.Estoy llorando

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  3. Ese es el mejor Iñaki que conozco. Valiente y con la verdad por delante. El daño que hizo la ETA no se puede comprender tu si porque lo viviste Menudo merito tienes tu y algunos más. Los años de plomo tu lo has dicho. Gabon gudari

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  4. Eres un hombre maravilloso José Ignacio y te quiero tanto.

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  5. He visto autenticas broncas irracionales en los 80 en el Festival.Gracias por ser así un ejemplo para muchos de nosotros periodistas ante un gran maestro como tu

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  6. Has descrito muy bien esos terribles años de plomo en que la sociedad, sobre todo la vasca padecio tanto , ante la indiferencia y la incomprension de las Testas episcopales, incluida dos Tiaras, eres un vasco admirable que dice las cosas tal cual y sin paños calientes Siempre he dicho que elpueblo vasco me gusta porque es recio en sus convinciones y lealtades GRACIAS por tu vision sincera

    Hoy en lo poco que he visto observo que las dianas de Caldas han ido hacia Marta y hacia Quintero, sin dejar de un lado a Gines, Rosalia me sigue pareciendo una persona superficial y poco maternal Como a ti me mosquea tanta solicitud por parte de Marta hacia la Marquesa y sobre todo a Gines, como si hubieran hecho un trio y entre los tres sacaran a Alonso de la circulacion La forma de entrenar el nuevo Gerente me parece que hay gato encerrado Gracias por todo lo que nos aportas con tu vision de la novela

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