CRÓNICAS MUTANTES: UNA DONOSTIARRA DE CORAZÓN ASESINADA EN MÉXICO. EN MEMORIA DE VIANCA MORENO

En Ciudad del Carmen, México, con pancartas y listones rosados, valientes mujeres, hombres y familias completas, que te juegas la vida allí, hicieron un recorrido por la Quinta Avenida para exigir a la Fiscalía General del Estado (FGE) justicia por el asesinato de la joven el pasado 21 de febrero. Ocurrió en el fraccionamiento Bosque Real de esta ciudad, el cual, según activistas, fue clasificado como "robo" y no como "feminicidio", luego de que el agresor entró al domicilio de Vianca Moreno y la hiriera en el rostro, lo cual la llevó a la muerte. 

Estoy ya un poco harto de escuchar todos los días el caso de Gabriel. Carnaza para medios de comunicación que no tienen más temas que les engorden la audiencia de ese tipo de gente simple, que se lo cree todo, medio inculta y que sólo escucha o ve por televisión a las Susana Griso, Ana Rosa Quintana, las emisoras caciquiles de las autonomías o contempla siguiendo solamente las cadenas que regó bien Zapatero: la Sexta, que tele-dirigen a las mentes, anestesiándolas,  para que no piensen y que no pidan conocer la verdad de lo que trata tras la apariencia. Y sobre todo que no vuele demasiado el interés por buscar a otros desaparecidos que no resulta, parece ser, sino motivo de alarma innecesaria. Mientras todos los días se abren la noticias sobre si cavó o no la tumba de Gabriel  e insultó  la asesina al cadáver, antes de matarlo o si la “mantis” devoró a sus parejas y sobre los “pececitos” y la “bruja” que se encontraba agazapada en casa o se crucifica al “vecino periodista” que se decía “amigo de la familia, mientras la realidad es que quien ha perdido es el niño y su familia y  todo ya son chismes, no se investiga nada más ni nadie recuerda o pide responsabilidades de lo que no se está haciendo.

Recordar que, en la actualidad, hay dos mujeres, Concepción y Lorena, desaparecidas en Asturias, de las que el ministro decía en un principio que seguramente habrían desaparecido voluntariamente. Y si la energía de esa prensa amarilla y basura de las cadenas de Soraya, los curas, Podemos, el PSOE… se dedicara no sólo a abrir informativos y desmenuzarlos con saña morbosa con el único monotema de Ana Julia, se prestara  a pedir responsabilidades sobre lo que a nadie parece le interesa, moviendo a las autoridades en favor de esas últimas mujeres desaparecidas, otra sería la perspectiva para estas pobres señoras de las que nadie sabemos nada; en torno a las cuales, incluida Paz, existe un enorme misterio y silencio.

Y no sólo ellas dos. En el 2017 ha habido unas 2.928 personas desaparecidas que no han abierto informativos como los de la violencia de género que es lo que da votos a los jefes políticos de estos millonarios periodistas al arrumaco del pesebre informativo. De estas casi 3.000 personas, es que ni existen para unas autoridades que han dado orden a la prensa escoria de no hablar para no generar un “innecesaria alarma social”. Nadie busca a esos desparecidos; sus familias que pagan impuestos a unas autoridades que no les defienden, están destrozadas. No son portada y hay que taparlos para que no huela mal o aparezcan incómodos culpables en algún caso. En España, miles de personas desaparecen, unas 7.000 en unos siete años, y nadie informa; es incomprensible. Para ello está la policía y las millonarias policías autonómicas. Y el gobierno no garantiza la seguridad. Crear esa alarma social en el buen sentido es cosa de la prensa pero la misma gana mucho dinero por mentir y manipular. Y la buena gente sólo ve esa basura que `proviene del corrupto Estado de Partidos. Si la prensa no lo denuncia… ¿Quién lo va a hacer?

  

Y en esta tesitura, en Donosti, resulta que tenemos una desaparecida agradecida con nuestra gran Ciudad, mujer de la que nadie escribe o cuenta salvo sus amigos y gracias a la Red. Vianca Moreno Labastida es originaria de la Ciudad de México; vivió en España, en Donostia, y hasta su muerte residía en Ciudad del Carmen, en Quintana Roo

La familia y allegados de la donostiarra Vianca Moreno Labastida (se sentía muy donostiarra) han abierto una petición en la plataforma de recolección de firmas, Change.org, para recabar los apoyos necesarios y presionar a las autoridades de Ciudad del Carmen, en Quintana Roo, México, para que acelere la investigación acerca del cruento feminicidio del que la chica fue víctima el pasado 21 de febrero. Una donostiarra con su novio, también donostiarra, y cuya desaparición acusa de desinterés absoluto a las autoridades mexicanas, a la alcaldesa de la ciudad, Cristina Torres, de no haber hecho nada por su esclarecimiento. Cristina Torres, alcaldesa de “Solidaridad” en esa localidad, es una demagoga que se dedica a denunciar a todo el mundo, incluidos ex funcionarios municipales por desvío de fondos, buscando a través de esta anticorrupción del Estado, la reelección, pero tiene a su pueblo sin alguna seguridad y bajo su zapato. Con Vianca queda claro.  A esta progre se la suda esta mujer desaparecida.

Vianca Moreno Labastida de 31 años, fue asesinada el 21 de febrero en su casa de Playa del Carmen (México). Vianca vivió en San Sebastián (España) durante 10 años. En el 2013, con su novio donostiarra emigraron a México. Hace unos meses su ex y ella lo dejaron. El 21 de febrero de este año fue brutalmente atacada, dentro de su domicilio, ubicado en Calle. Monte Tanu, esquina Sauce 3, en Playa de Carmen. La gandula policía mexicana, para no comprometerse mucho, calificó el móvil como robo con violencia pero, de allí, no desapareció algún objeto y ni tan siquiera forzaron la puerta. Le destrozaron el rostro y el cráneo. Su coche estaba aparcado fuera de su casa, la cerradura no estaba forzada y no habían robado nada, aunque la compañera dijo que le faltaba el portátil”.

                                                              LUGAR DEL CRIMEN

Sus amigos de San Sebastián son los únicos que se han interesado. Incluso por su ex, Alan, a quien quisieron incriminar las autoridades, hoy en libertad pero que desean alejarlo del asunto por la absoluta falta de interés del Régimen en esclarecer la verdad. El ex, quien después de 11 días del asesinato de Vianca, llevó la denuncia a las autoridades de aquel país sobre quien creía podía ser el asesino, llegando hasta el despacho del fiscal jefe con testimonios; el fiscal despreció las pruebas y envió al ex a los mismos policías corruptos ministeriales que oculta información y protege a delincuentes. Los testigos de los que disponía están aterrorizados y un semanario colocó su foto poniéndole en el foco de la diana. Para Allan, hay un peligro real en este lugar de Playa del Carmen. Un país de luto con corrupción en todas las capas sociales, destrozado por la mordida. Un recuerdo para esta chica, que vivió en Donostia, con su novio, donostiarra, que amaba a nuestra Ciudad y que ya no podrá contarlo más´. ¿Sabremos lo que le sucedió?

Al respecto, Daniel Pérez Pereira, activista y organizador de esta marcha, hizo un llamado a las autoridades para que brinden mayor seguridad a todos los ciudadanos, pero exclusivamente a las mujeres quienes últimamente se han visto vulneradas, dijo. Las pancartas que llevaron durante el recorrido reunían frases como "Justicia para Vianca", "Ni una más", "No más feminicidios" y  ¿Cuándo citarán a los culpables?

Durante el recorrido por la Quinta Avenida, los manifestantes señalaron que el novio de Vianca, de nacionalidad española, tuvo que huir a su país, pues la justicia mexicana ha querido inculparlo por el sucedido, a pesar de que no se encontraba en la ciudad el día del homicidio.