CRÓNICAS MUTANTES. LO QUE LA ULTRAIZQUIERDA Y ULTRADERECHA CALLAN SOBRE CATALÁ

Catalá debe de dimitir por muchos sucesos graves que han ocurrido y siguen sucediendo con él.  El último, el pasado viernes, en San Sebastián.
No es sólo el Juez Ricardo González, estoy seguro que el Tribunal Supremo dictará en su día: “libre absolución de los acusados de la “Manada”. De hecho ya casi pueden salir con permisos. Y la sociedad se puso en pie contra una Sentencia que no se la puede ingerir nadie. A Catalá el PP lo tenía que haber hecho dimitir hace tiempo. No quejarse ahora de su corrosiva crítica al juez discrepante, de haber actuado por su cuenta y comprometer a Génova. Es el sistema de partidos y sus oligarquías. ¡Allá ellos! Ya fue reprobado por el parlamento que exigió la destitución de los fiscales José Manuel Maza y Manuel Moix y Rajoy les apoyó. Todo es basura en España.

Que conste que a mí no me parece nada normal un juez que pregunta y dice de una víctima abusada por una “Manada”, en un portal, que pregunte sí ha gozado o sentido placer y que poco se vio resistirse. Evidentemente, este juez discrepante, al margen de su pasado y de Catalá, no está bien. Habrá valorado minuciosamente todos los detalles pero una mujer, será un juez competente pero una mujer desgarrada, arrinconada en el suelo de un portal, llorando y gritando, carece de alegría en esos momentos, diga lo que diga este señor que tiene ante sí a la opinión pública enfrente. Le han apoyado ultras que, además, de inventar sobre qué lo único que le importaba a la abusada era su móvil y la explicación que le iba a dar a su madre. Para periodistas lameculos de la ultraderecha, la abusada, rastró mentiras para ser manipulada por la ultraizquierda. Que practicó el sexo libremente con desconocidos, que se lo pasó muy bien, desinhibida y con gran tasa de alcohol. Sexo consentido con desconocidos y con denuncia falsa. 

¡Terrible! Yo que no me caso con ninguna ideología española, reconozco que todos los ultras han querido llevar el hecho trágico a sus listas electorales. En unos, para defender a jueces exacerbados y a algunos componentes de “La Manada”, y otros para sacar pecho por algunas mujeres abusadas olvidando a muchas de las demás.

Por otro lado, Lesmes, Presidente de CGPJ abronca a políticos, representantes de ciudadanos y del poder legislativo, por las críticas sobre la injusta sentencia sobre algo que para la mayor parte de la sociedad civil ha sido una violación, algo gravísimo. Y nadie presta atención. No voy a defender a Catalá pero tampoco a Lesmes. Los dos se meten en campos que no les competen. Y los dos linchan, desde sus puestos dentro de las oligarquías del Estado, a representantes de la judicatura y poder legislativo respectivamente, Catalá y Lesmes.

Por supuesto que un ministro o magistrado deben debatir o criticar a los poderes que por cierto los controlan todos Rajoy y Soraya. No se puede permitir que Catalá ponga su diana en un juez, al que prácticamente le considera loco, por un voto que me sigue pareciendo personalmente aberrante; ni que Lesmes, un hombre del PP,  abronque a nadie del legislativo por criticar la sentencia. Los dos, están salidos de contexto democrático, los dos merecen la misma crítica demoledora y deben ser expulsados de las instituciones. Los dos.  Como tampoco que este impresentable  Catalá propusiera la posibilidad de sancionar a los medios que publiquen filtraciones. Un ministro que quería cargarse la libertad de información, un ministro que anhelaba amordazar a los medios de comunicación para ocultar la corrupción. Que deseaba todo el control mediático al  periodismo que molesta a su corrupto partido, demostrando sus miserias y su complicidad con la mismísima corrupción.

Tampoco es cierto, como critican los periódicos subvencionados por la ultraderecha, con maledicencia, que se ha puesto en la diana a un juez que ha tenido la osadía de emitir un voto particular que ha soliviantado a los peores enemigos de la separación de poderes y la independencia judicial. Nada tiene que ver la crítica a su voto particular con que rechacemos la separación de poderes. Ello es una falacia y una manipulación que parte de la base que, en España, hay división de poderes. Precisamente, los que deseamos una democracia constitucional, en modo de república, anhelamos la independencia de la autoridad del poder judicial.

Estos días, en San Sebastián, se va a pedir por doceava vez que ingrese en prisión Kote Cabezudo, fotógrafo denunciado por múltiples delitos sexuales, entre ellos violación de menores y pornografía. Hay once víctimas que vienen denunciando se haga justicia desde el 2013. Nadie se ha preocupado por ellas, ni la derecha ni la izquierda. La juez y fiscal, al fin, han sido apartadas por prevaricación y todo porque, en el sumario, hay gentes del PNV, del PP, del PSOE con su Ex Alcalde Odón, de juez, de notario, periodistas, empresarios…. Y este caso no interesa a ninguno. Otra supuesta “Manada” olvidada de los vividores de la política.

 La ultraderecha bien que están callando estos días al mencionar los desafueros del “indigno” ministro Catalá, lo que ha ocurrido en un juzgado de San Sebastián. Parece que sólo les importa lo de su execrable maledicencia en este caso, sobre “los cabales” del juez, sumándose al linchamiento del magistrado, pero ni a esta ultraderecha embustera ni a la ultraizquierda tan embustera les importa que, el pasado viernes, información privilegiada de una vista bajo secreto de sumario 684/2013, fue a parar a Odón Elorza, acusado de pertenecer al grupo de Kote Cabezudo sobre algo que callan todos mientras sólo les reclama lo de la “Manada” de Pamplona. Una denuncia donde existen personas muy importantes sobre unos supuestos hechos de captación de adolescentes, chicos y chicas, de los que luego se abusaba sexualmente. Con una lista de supuestos depravados incluidos en esta denuncia por pederastia; donde aparecen dirigentes políticos del Partido Popular y del Partido Nacionalista Vasco, periodistas, juez, notario, empresarios.. Que habrían suscrito un denominado "Pacto de silencio" para intentar echar tierra sobre este aberrante caso. El viernes se va a intentar que semejante protegido vaya a la cárcel. Y es con Catalá que un parlamentario ha tenido acceso a una actuación judicial declarada como secreta y cuya revelación podría acarrear importantes consecuencias judiciales. De este Catalá no habla nadie. 

¿Conoce Rafael Catalá quien facilitó las testificales secretas al diputado socialista Odón Elorza, denunciado? ¿De no ser él conoce quién pudo hacerlo o piensa iniciar una investigación para dirimir responsabilidades? Pero de estos pobres chicos y chicas denunciantes, que peregrinan durante 5 años, niñas y niños que tenían entre 11 y 16 años cuando que fueron repetida y salvajemente violadas y grabadas en vídeo, nadie se preocupa. De este Catalá nadie sabe o conoce nada.