LA MÁS BELLA SECUENCIA DE AMAR ES PARA SIEMPRE

Pocas veces uno se ha emocionado tanto como con la secuencia en la que "Félix" reconoce ante su amigo "Quintero" que, "Nuria", no sólo es de la familia sino que es la familia e hija suya con "Julia". Un "Félix" necesitando gasofa; ingiriendo coñac del mejor; tomando un impulso supersónico gracias a la fermentación del vino de uva blanca; decayendo su consciencia poco a poco pero mientras reavivaba su lucidez sentimental, abría su alma y confesaba a su gran amigo que "Nuria" era su hija y que si cayó en las redes de la estafa era por preocuparse por los más pequeños de sus hijos y por ella.

Ante un "Quintero" que comenzaba a atar cabos con ese brindis final sellando el secreto y lacrando la amistad que se profesan los los viejos camaradas. De muchas secuencias que he visto en esta serie, ésta, figura entre las mejores. Por su sinceridad; calidez; valentía; por el amor a esa hija que es suya. Por alguien tal vez más querido que otros hijos porque de algún modo la desheredó de su amor de padre al no saberlo hasta hace poco; una hija muy querida porque forma parte de un pasado que, aunque breve, no fue sino por una doblez de soledad y que creó víctimas y huérfanos que no tuvieron la culpa. Prueba de amor por ser la cenicienta de su clan familiar. Valor de amigo y sinceridad y pedir perdón por haber sido tan infiel a "Quintero" ocultándole lo profesional y sentimental.  

Una secuencia hermosísima. Sin mentiras ni fingimientos; franca y noble; respetando la verdad y comunicándola. Esto es lo que hace grande a la persona. "Félix" es una persona honesta y sólo desea como razón única de su vida, el bien de sus cinco hijos. Por fin ha respetado la verdad y ha desnudado su alma bajo los parámetros morales de la sinceridad y franqueza.

Con una soberbia dirección y la interpretación no sólo de dos actores buenos sino muy buenas gentes. Iñaki Miramón es un vasco noble, entregado a una profesión que ama, agradable en su trato y tiene buenos sentimientos. No se parece a esos fanáticos actores vascos ultras, racistas y vividores de la teta del nacionalismo, que hacen política de meterse con España, insultado a buena gente del Estado,  y poco más.

Otra monumental secuencia ha sido la de un conmocionado "Vigo", casi llorando ante el drama que le plantea la "Marquesa", ofreciéndole sus joyas para que pare de hablar sobre su hijo. Y la mirada escéptica de "Ginés" que no se cree nada de lo que escucha. Puro teatro; tras el cual, sobre un desconsuelo real por haber matado a su hijo, oculta el hecho y el homicidio y a la mano ejecutora de "Ginés". Era elocuente la mirada de "Ginés, ante el baile de máscaras de la "Marquesa", en medio de la majestuosa interpretación de María José Goyanes, un modo de actuar con los ojos y músculos de la cara en el sirviente que no se creía nada. Las fotografías de abajo lo dicen todo en "Ginés"

"Ana María" está destrozada como lo venimos defendiendo, pero por el filicidio involuntario que no se lo puede perdonar. Se arrancó de ella la parte más querida y amada, el hijo que tuvo. Ellos dos son los que ejecutaron a la Bestia.

Este tipo de mujeres teatreras, que son capaces de interpretar falsedades de enormes tragedias, son un jugoso elemento dramático y sólo el el rol para las muy grandes actrices. Si nos fijamos bien, "Ana María", sabía de sobra que no se las iba a coger; luego, todo era mentira. estos detalles en una gran señora como es "La Marquesa" que usa de la edad, rango, condición femenina y madre enlutada, para camelar, es lo que le delata además de ese pétreo "Ginés", testigo mudo y expresivo de la manipulación a la que somete la "Marquesa" a los demás, cuando le interesa.

Hay algunos puntos que me sugiere la serie. Uno, tiene que ver con esta dinámica de hacernos partícipes, como en aquel filme de Hitchcock: ¿Quien mató a Harry"? sobre varias cábalas en torno a un cadáver y personajes que se tropezaron con él, y que versaba sobre la importancia del que miraba o podía pasar por allí. Desde luego este extraño final de la temporada resulta apasionante. Hoy me han dicho que ni los actores conocen el final. Algo grueso debe de cocerse ahí. El pasado día recibí un extraño mensaje anónimo que me decía que, en algún capítulo, he acertado sobre quien es el asesino. Y no decía más. Tampoco le doy a este escrito mucho valor pero ahí andamos.

El otro aspecto tiene que ver con la plasmación de "Caldas". Tiene la sagacidad de un José Suárez en "¿Crimen imposible"?; el aire destartalado y casi inconexo, sorprendentemente genial y de porte estrafalario de "Colombo" y ese regusto por resolver los casos mientras practica la pasión por la gastronomía, como "Pepe" Carvalho" apreciando la comida hasta acabar devorándosela. "Carvalho", ese inmortal detective de "Manuel Vázquez Montalbán, notorio personaje que dio a la gran Barcelona ese aire de ciudad literaria mítica.

Descartamos a "Vigo". Puede ser cierta su coartada. Pero, en cuanto a "Rafael" su círculo de medias tintas y olvidos, parece que le están cercando. Yo no creo sea quien mató a "Alonso" pero hay hechos que me resultan extraños. ¿Por qué cuando salió a buscar a "Valderrama" y no lo encontró, volvió y dejó el pasaporte en la Caja fuerte?  Puede tener una explicación, tal cual que "Alonso" no tenía por qué coincidir con él, en el aeropuerto. Él, "Rafa",al no saber que hacer con ese pasaporte, lo guardó como medida de seguridad. Pero sabía que se encontraba en la empresa y pudo ir a buscarlo. Creo que no, no obstante. Quien fue a la empresa no despertó sospechas de estar allí por ser una persona extraña a la gente que frecuentaba el despacho; era un asiduo, conocía el lugar y yo creo que un familiar. Podían ser "Jaime", "Félix", "Henar", "Holstein", "Maroto", "Vigo", "Alcoriza", "Marta", otro trabajador de la empresa y "Ana María" con "Ginés". Descarto a "Rafa" porque, quien fue, actuó sigilosa y rápidamente; fue sobre seguro. Conocía el lugar. Pero ya os digo que creo que fueron "Ginés" y "Ana María", salvo que aparezcan datos que cambien el rumbo y pistas fundamentales ahí guardadas en el cajón.

¡Atención a la hipnosis! Que puede llevarnos hasta lo que sucedió aquella noche. Hoy no ha contado "Jaime" la verdadera pesadilla, la que se vio el pasado día, lanzándole la estatua a "Alonso", en el calor de la discusión.

Lo que comentamos ayer sobre Fraga y su ley de prensa, ha salido hoy. Tanto en aquellos tiempos, como en estos, y la secuencia lo muestra, la censura existe tras una aparente libertad pero siempre vigilada y recortada por procedimientos burocráticos o artículos del Código que sancionan comentarios, textos, que obligan a autocensurarte; recovecos que siempre se han dado en este país fascista para que no haya libertad.