Puente Genil es un pueblo muy solidario, no merece ser difamado como vertedero.
Puente Genil se reunía la pasada noche para protestar por los insultos en las
redes por parte de un médico granadino representante de una Asociación que
concentraba a vecinos en la citada localidad para protestar por el supuesto “abuso
sexual” a menores en el municipio, pidiendo la destitución de un inspector a quien se acusó y
fue absuelto en el “Caso Ciber”. Fue un caso de denuncia de un compañero, policía
local de Puente Genil, donde señalaba la corrupción del PSOE de Puente Genil,
prostitución de menores y tenencia de pornografía infantil con presunta
complicidad de jueces y policías por parte del jefe de la policía local y de
otro policía amigo suyo. Denunció destapando una supuesta trama de pederastia y
que llevó a ser juzgadas a varias personas por relaciones con una menor en la
capital cordobesa a cambio de dinero.
El magistrado valoró que los que se
acostaron con ella tal vez no supieran si era o no menor de edad, y tenía una
duda razonable al respecto. La menor accedía a Internet, desde un locutorio
regentado por dos de los procesados, con Nick como “gatita de 18 años” y “se ponía en contacto con diferentes
personas del otro sexo y con las que concertaba encuentros de carácter sexual a
cambio de dinero", según el juez. El alcalde decidió mantenerlo en el
cargo hasta una resolución judicial firme sobre las acusaciones del delito
relativo a la prostitución, la explotación sexual y la corrupción de menores. Y
es de destacar también que, además del inspector, hubo en total nueve procesados, dos de ellos eran mujeres que
supuestamente incitaban a una menor a mantener relaciones, otros dos propietarios ciber y, el resto, son
clientes que concertaban las citas por Internet. El policía denunciante fue
apartado del trabajo y ganó el juicio en magistratura.
Toda esta confusa historia ha dado pie a que, por un lado el
ayuntamiento y los vecinos, salieran en defensa de su institución y su pueblo
respectivamente. Todos coincidían en denunciar los insultos vertidos por el médico granadino sobre todo contra la ciudadanía de Puente Genil en general, a
la que calificó de Pontanenses que apestan a “mierda”, de “basurero que huele
que atufa” y de “membrillos”. Fueron vecinos ninguneados por el médico y sus
satélites asociativos, humillados en su pequeño número representativo,
menospreciados porque no fueron a la manifestación e insultados al tiempo que
se les trató como excrementos. Y ello, para mí es grave; usar de pantallas
asociativas en defensa de loables intenciones de mejorar la sanidad o bregar
peleando contra la pederastia, desde redes sociales, para insultar reiterada y
sistemáticamente a los vecinos y que libremente decidieron no participar en la
manifestación, es una inmoralidad y una canallada.
Ellos tienen derecho a pensar y a actuar como
crean conveniente. No son “membrillos” de nadie ni huelen peor porque no ven
clara la manifestación de estas asociaciones; porque consideren que el médico
es un charlatán; que puede ser algo manipulado para pedir dinero; porque el
trasfondo pueda ser una sentencia laboral y no una campaña contra un partido,
el PSOE, de un señor que por cierto nunca critica al PP o a Ciudadanos y porque
desde hace muchos años, en Puente Genil, se promueven actos de condena contra
cualquier vulneración de los derechos humanos, contra actos de terrorismo, de
violencia de género o xenofobia, representando así los valores y sentimientos
que expresa la ciudadanía de Puente Genil. Y no ser maltratados por una persona
porque no le bailan el agua. Y sobre todo no sabía yo que una baja
representación en una manifestación le resta veracidad, fuerza reivindicativa y
da derecho a la difamación y a la ofensa racista al decir que “huelen muy mal”.
Insultar a la gente y menoscabar la integridad moral de la ciudadanía de Puente
Genil, es algo fascista, señor Doctor. Puente Genil se ha manifestado en
innumerables ocasiones yo creo que por casi todo. Algo verán en usted señor
Doctor que no les inspira confianza. Destacar que a algunos de los participantes que,
incluso, acompañaron esa manifestación del Doctor, no gustó el tono crispado de
la misma.
Este señor Doctor que habla de efluvios de desperdicios entre los que
no siguen mi llamamiento; a chivatos malolientes porque defienden una postura;
a estiércol porque apoyan a un partido o a un pueblo; a excrementos porque se
manifiestan con él y sus proclamas insultadas; a inmundicia y a mugre porque
son unos pobres vendidos a los que sólo les queda deambular entre heces de membrillo
con su sedimento apestoso y comparados para ser llevados al triturador con la
basura, este Doctor, es un pésimo ejemplo para cambiar ningún sistema y por
supuesto luchas contra las injusticias y defender a las desgraciadas víctimas de
la pederastia. ¡Qué vergüenza!
Puente Genil ha sufrido mucho desde hace años. Algo que no han mostrado
nunca estas asociaciones que no son de justicia, de defensa de víctimas
agredidas sexualmente sino de interés mediático y para captar adeptos
injuriando a quien ellos ponen por delante para alguna causa que se me escapa. Lo
último es menospreciar a la ciudadanía en general comparándola con un container
de zaborra apestosa. Lo que contaremos mañana, como ocurre con el Caso Bar España,
este Doctor no tiene en cuenta en Puente Genil. Sólo lo que le interesa para su
parroquia. Pero hablaremos mañana de víctimas de verdad en Puente Genil y del
sufrimiento de su gente que se ha manifestado en muchísimas ocasiones y por
motivos muy diversos.
Mejor explicado imposible
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