EL OCASO DE LA MONARQUÍA CORRUPTA

El Estado de Partidos lo pactó desde Marzo. Es el fin de un tiempo corrupto que les ha ido muy bien a algunos y dejado en la miseria económica a los súbditos y quiebra total a los valores democráticos de un país europeo.

Habrá un divorcio, la reina saliente se va a Nueva York  al siniestro Club de Bilderberg que pretende imponer una dictadura mundial y reducir nuestras democracias, y el Rey a sus cacerías y frivolidades, desligándose de algo que hecha humo y que está  a punto de explotar, algo que los vividores de todos los partidos (que han estado en la pomada y en el pesebre) han impedido, conjuntamente con la Corona: el desarrollo de la Constitución que sólo ha supuesto un señuelo para apropiarse del poder en sus días de la Transición,  sin Cortes Constituyentes, y luego para medrar en los chiringuitos de la apropiación del poder y autoridad que pertenecen y usurpadas al pueblo.

Rajoy y la casta de periodistas sinvergüenzas no se han enterado de lo que sucedió tras las elecciones europeas y pretenden vivir como antes con ese oligárquico consenso de la bicameralidad que funciona en España desde el último tercio del siglo XIX.

Cuando llegó al poder escribimos en “Primeran.com” que la mayoría era un arma de doble filo, por un lado era peligrosa esa concentración de poder pero podía resultar un estropicio que, a pesar de tener todo el control del inaudito parlamento español, ese masivo refrendo podría traer consecuencias nefastas de no usarse bien. Así ha sido. Aunque hubiéramos deseado que el Rey se fuera antes, la mayoría del estropicio ha traído como consecuencia la abdicación tras la brutal crisis del sistema y de un incontrolable Estado de Partidos que son un problema nacional más que la solución que pagan con tanto esfuerzo los contribuyentes.

Rajoy, anteriormente Zapatero ya lo inició, remató a la clase obrera, entierra a la clase media, premia a bancos ladrones y políticos que operaron en Cajas sin responsabilidad alguna a pesar de los desfalcos que hicieron y que hemos pagado con nuestros impuestos. Lejos de lo que podía pensarse, en la España de Rajoy, se paga por todo y s persigue la opinión, y se alfombra la calle para que los más sinvergüenzas se enchulen ante gente inocente y pagadora, asustada.

Ha sido un mandato imperioso de alguien que ha pedido sea ya, hoy mismo, la abdicación. El Rey tenía toda la agenda organizada de la semana. Y no son tiempos fáciles los que llegan, en un momento de ascenso de predicadores, enrabiados, violentos, fanáticos, subvencionados, gentes desesperadas por el inmundo gobierno de Rajoy que nos ha dejado sin dinero, sin futuro y sin Estado ya que debe abdicar.

Al Príncipe no le quieren. Ya hay convocadas concentraciones en las ciudades y no le van a dejar regenerar el sistema, acabando con la corrupción y volver a lo mismo es ya inútil y será la catástrofe ya que la Institución no cuenta con simpatías y la vuelta atrás es imposible.  Porque el Régimen está hundido.

Como ejemplo del cómo la casta sigue reproduciendo su ya inválido sistema reproductor, lo del PP que no se da por enterado tras las elecciones y del PSOE, ambicioso y decrépito, donde nadie se fía de nadie y los más conchabados enarbolando banderas de regeneración y que proviene de gobiernos nefastos, apoyados por muchos que hoy se han pasado a “Podemos”.

¿La izquierda?. Pensando en una República de ellos cuando este Régimen de poder es de la base civil representada, primero en Cortes Constituyentes, y luego en elecciones abiertas, con derecho a elegir y no a refrendar con derechos individuales una lista cerrada y donde el Presidente no es un pinta monas sin facultad para enderezar la corrupción.
Nada me satisface en este país, salvo marcharme y mandar a todos a tomar por el culo y perdonen. Me dan nauseas los estómagos agradecidos y sus valedores de partidos que los enchufaron y subvencionaron y que me han destrozado el país; me repele la demagogia ultra de cualquier signo y los anti-sistema que en cuanto pueden se acomodan al euro en grandes cantidades. Me produce vértigo considerar al Régimen de poder republicano como patrimonio de unos partidos político y no como logro de las ciudadanía de todas las ideologías.

Cuatro décadas de reinado, la mitad de la vida de más de una generación. Siendo sólo bendecida por los súbditos que no querían enterarse, aplaudida por los comilones del parlamento y santificada por los jefes de los partidos. De hecho, ese pacto que habían establecido era conocido por el oligopólio de los partidos, se ha adelantado y no sabemos por qué.

La Red está llena de propagandistas para que se arme el cirio padre y que le entregues las llaves de una república bananera a los mismos partidos que se encaramaron en el poder, apropiándose, sin cortes constituyentes. O sea, lo del Príncipe Giuseppe di Lampedusa: Reformar, sin cambiar para que todo siga igual.

Todo hecho por sorpresa, después de este tiempo no sabemos cómo abdica y como se hereda el trono. Más tiempo que Franco ha durado este basurero del estado de Partidos, es un tiempo que finiquita muy mal. Me temo lo peor que es lo que suele ocurrir a las sociedades civiles y políticas que miraron para otro lado mientras llevaban a la cárcel, desacreditando a sus buenos periodistas

No , ahora es la hora de lo que nadie habla, cortes constituyentes. Ni rey ni políticos que se eligieron a si mismos. Harto de leer en el face a propagandistas de partidos corruptos de un sistema que no tuvo cortes constituyentes y que se apropió del poder.