LA HORROROSA MUERTE DE "CONRADO" / LOS QUE SE VAN MARCHANDO DE ESDPV

ACTORES  DE LA TARDE: RUBÉN SERRANO Y ARIADNA GAYA

¡ADIÓS AL GRAN RUBÉN SERRANO!

No somos nada ni menos nadie. Anteayer en la cuna, ayer pelo en pecho en la cama haciendo el amor y hoy descansando en un ataud. Por lo menos el actor ha echado los restos y ha estado sublime en este final dantesco; si la muerte demuestra algo, Rubén, lo ha sabido expresar con exquisita perfección: que es un trance doloroso, de ruptura con todo tras un desgarro físico y una conmoción sentimental porque eres consciente de que te vas y ello es muy desgarrador. Un hombre (personaje) muy complejo, tosco y de extraños modales que no se comprendió bien en su tiempo como enamorado de una quinceañera pero enormemente aclamado como actor y querido como personaje hasta el éxtasis en los foros y domicilios. Se lo llevó una parca mala, al personaje, la única salida con este maravilloso final por el que que pasará a la leyenda de la televisión, conjuntamente con Megan Montaner, Sandra Cervera, María Bouzas y Álex Gadea. Los cuatro muy grandes de ESDPV y tres de entre ellos (Rubén, Álex y Megan) que cimentaron su mito detrás del epitafio de una tragedia sobrevenida con sangre.

El final horroroso de un aventurero que deja con profunda convulsión anímica al amor de su vida en esa su partida hacia la nada. Arrincona en duelo a sus fans e incondicionales cuyas "páginas" están de luto esta tarde. Que reconoce que deja solo al ser más querido. Que duro son esos últimos momentos de despedida de lo que vemos y sentimos, al lado de la mujer que llenó todo y por la que fue capaz de dar más. Pañuelos y mucha emoción esta tarde. Llegaban a nuestras mentes aquellos días del otoño del 2013 cuando se presentaba aquella escena de crepúsculo rabioso, al fondo del plano, Rubén a caballo sobre una imagen épica del fin de una era al estilo de "Grupo salvaje". ¡Inolvidable! esta tarde he llorado, no me avergüenza decirlo.

Adiós a aquel "Indiana Jones" que, salvo el apresurado final caótico, nos contó una lírica e impresionante historia de perdedores. De las que más interesan, de las que nos hacen sentirnos vivos y no despegar los ojos del televisor. Un veterano que supo que su tiempo se acabó. Un verdadero hombre al que costaba ya sobrevivir en ese lugar que se le quedó muy pequeño aunque los guionistas le han dado una tarde de triunfo ayer en la cama. "Conrado" ha ejercido una influencia brutal en ESDPV. Un enorme personaje, pedazo de actor que por querer cobrar más nos ha privado de su presencia. Un hombrazo que nació demasiado pronto y que acabó anacrónico en un mundo que expiraba y agonizaba ya. Esto se ha intentado explicar en esta muerte absurda pero dolorosa, terrible, estaba ya agonizando y "Alicia" le remató. Un drama romántico y una solución a la partida del actor, al que deseamos suerte. Y es el ocaso de una enorme época en ESDPV. ¡Qué pena! Muchos éramos "Conrado! Y nos ha acompañado en estos casi dos años dándonos confianza y fuerza porque, lo distinto, áspero y raro, era lo protagonista.

Secuencia entrañable en su salvajismo y por lo que ha herido sensibilidades. Ver morir al héroe y ser creíble, no es cosa baladí ni alegre. Un crimen rotundamente humano en su inmoralidad, la secuencia ha estado presidida por una violenta emotividad.

"Conrado" perteneció en su interpretación a aquella estirpe de hombres duros, extraños y neuróticos, solitarios impenitentes, maduros fondones de grandísimo atractivo, con una gancho sexual y unos arraigados principios éticos que los hacen empáticos y telepáticos. Con esa ambigüedad en el mostrar sus sentimientos que le dotaba de gran humanidad. Un vaquero fascinante y profundo, enamorado y leal, sincero y generoso, amante de una chica desde que la vio por primera vez, en medio de tontos, cobardes, machos amorales y caciques criminales. Un ser muy  humano, de otra galaxia, al cual la nobleza marcó la brújula de su sobrevivir en la aventura sin haber podido elegir su fin. Un "The End" donde su rostro que divagaba, sus escasas palabras de  despedida a "Aurora", su mirada fija y transparente, sus pupilas dilatadas ya y su gesto que parecía ver el otro lado de las cosas, lo decían todo. ¡Gran interpretación!

Su vida y su tiempo, el final mismamente, ha sido un relato infortunado con homéricas referencias a la tragedia griega, a la verdadera pasión que nunca termina por consumarse. Su amor en la cama, fue una despedida mortuoria y una elegía donde desembocaron los ideales reprimidos de un hombre confundidos entre su instinto de supervivencia y su amor trágico pero grandioso. Sólo el amor nos salva y mata al mismo tiempo. Ha estado inconmensurable Rubén. Hizo su aparición en una secuencia ya mencionada hoy y como en los mejores western, nunca fue un héroe ni nada que se le pareciera. Aquella escena primeriza antes de la caída del arbol de "Aurora", es muestra de ello. Un trotar, recorrer y vagar sin rumbo hacia un destino trágico. aquel momento habló por sólo.

.

Desgarros y miradas que son palabras duras contra el infortunio. Ariadna y Rubén esta tarde. Una última mueca siniestra para la vida, antesala de la muerte, un horroroso recuerdo hacia el amor que parte de ese hombre que llevaba un héroe solitario en la maleza de sus entrañas. Un tío cojonudo. Un adulto que hizo enamora a una niña, una transgresor de los increíbles romances de amor entre chicos y chicas de chicle. Y es el acabase de aquello que empezaron juntos, juntos le dicen adiós. Un homenaje al amor que duele tanto cuando la otra parte se ausenta y se va por muerte. Un canto  a la dignidad de esos seres prodigiosos que son el hombre y la mujer, juntos.

La mirada de Rubén en esta tristísima tarde ha sido la de un gran tipo que luchó siempre contra la adversidad y que derrotado, muere para siempre. El mirar del que sabía que la muerte le aguardaba en cualquier esquina y se enfrentaba valientemente al peligro que le acechaba. Ha sido este personaje el reflejo de la derrota sabida de antemano. Se va joven y bajo el manto de la dudosa sombra de la derrota. Pero se va y las horas siguientes son corales y de funeral. Con él hemos muerto much@s esta tarde.

DEDICADO A RUBÉN SERRANO QUE TANTOS BUENOS MOMENTOS Y GRANDES EMOCIONES  NOS HA BRINDADO.

José Ignacio Salazar

FOTO DE PILAR LÓPEZ CHICA