Tras el 11-M, sin aclarar aún, se hundió todo el corrupto Régimen del
78. Un Régimen de pacto con los franquistas que se gestó antes del 78, ya en los
tiempos de Carrero Blanco. Viene desde antes de fallecer Franco. El nuevo
Régimen que era en realidad un pacto entre los franquistas, el PSOE y una
oposición cobarde y vendida, acaparó todas las felonías, traiciones, venta de
favores y todo tipo de tráfico de influencias así como de oscuras prácticas
contra el pueblo Español a cambio de unas monedas; algo tan antiguo como la
España de incluso antes de la Restauración. Toda la casta política actual sabe
de donde proviene y de los innumerables golpes de estado que ha habido en las
últimas décadas, teledirigiendo el poder y si Rajoy actúa así hoy con Catalunya,
y siguió con la política que marcaron el 11-M y el PSOE, es porque, detrás de
todo, temblarían los cimientos de las cavernas que oculta este sistema de
partidos heredado de Franco. Por ello, cada día, comprendemos menos lo que
sucede y a una infamia, continúa otra mayor. El pueblo español está destrozado
por los golpistas de gobernantes.
En Catalunya, donde no se gobierna pero se cobra millonariamente por toda la casta parásita y aprovechada, todo se retrasa y se
ríen de los contribuyentes y trabajadores, es un ejemplo más de la iniquidad de
Rajoy, que sería la misma en Ciudadanos, Podemos o PSOE por supuesto, de gobernar ellos. Lo tienen todo ya
pactado desde hace años con el gobierno central. Un status de quasi Estado, con
todas las competencias inherentes a un estado a través de una reforma
constitucional por parte de los tres partidos, PP, PSOE y Ciudadanos, que
permitirá una independencia de hecho sin derecho, regada por miles de millones
de euros pero sin demasiada escandalera de partidos identitarios. Todos los
partidos se metieron en el 78 en algo muy sucio, tienen las manos atadas y temen
asome lo que realmente transciende a la apariencia y muestre la faz fascista y
golpista que, de conocerse, caería ante incluso Europa el deleznable Régimen de
vividores del 78.
En ningún país democrático de Europa se permitiría que, tras aplicar el
artículo 155 (que no daría ni tiempo porque se intervendría con el ejército), la responsable máxima del Gobierno en Cataluña, Sáenz de
Santamaría, haya aparecido por allí y ha seguido dando dinero hasta a Roures y
a todos los responsables que siguen financiando el independentismo. Es un
gobierno desvergonzado que tiene para rescatar autopistas y sacar adelante “pelotazos”,
para regar a TV3 y medios digitales con siete millones de euros, entregados por
Soraya, pero no para las pensiones. Catalunya
es una exhibición de separatismo, ragada por Rajoy, Soraya y con emblemas
separatistas mientras, los indignos del PP hacen la vista gorda y hasta incluso
ya sopesan perdonar la deuda descomunal que tiene esta autonomía que deberá
devolver por los préstamos que ha ido solicitando al Estado desde 2012, cuando
inició su adhesión al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) y a otros mecanismos
extraordinarios de provisión de liquidez a las comunidades.
Rajoy hace tiempo debía de haber sido detenido con Puigdemont y los
demás. Él, ha facilitado al separatismo y al golpismo el dinero y los medios financieros
y el uso de edificios del Estado para preparar el golpe, abonarlo, recluirlo en
nuestros propios edificios, mantenerlo con una fuerza militar que deja mucho
que desear y que se dedica a borrar pruebas, y finalmente no haciendo nada
salvo una elecciones tras un 155 que fue idea de Soraya, que no ha servido para
nada que no sea perpetuar el ‘golpe’ contra la nación. Debe de ser
responsabilizado penalmente, él, Soraya y su Gobierno, ha dejado su
responsabilidad constitucional y entregada a una Comunidad a la bancarrota y
sedición. Hoy, Cataluña, está abandonada; sin parlamento pero cobrando
millonariamente sus indignos representantes de sus jefes políticos; sin
gobierno; sin oposición (volcada en elecciones nacionales); sin gestión alguna;
sin reunirse; riéndose de los trabajadores mientras juegan a pasar el tiempo
unos y los otros a montárselo para la municipales en el Estado; en manos de los mismos que siguen machacando a los no-nacionalistas; unos golpistas más
ricos aún gracias a Soraya; y cada día ven más cerca el plan de pacto por el
CUPO, embajadas, legitimando con Madrid una separación de España se oponga
quien se oponga.
Rajoy pactó con ellos una Cataluña como nación siendo la España que le
vota “una nación de naciones”. Apalabró
el CUPO, similar al de los vividores vascos y sin olvidar que se creará una
Agencia Tributaria catalana desgajada de España; todo ello supondría supondrá
un expolio para los contribuyentes y los jubilados españoles de más de 60.000
millones de euros, dado que el cupo y las Diputaciones suponen un expolio de 20.000
millones euros anuales (igual al déficit de las pensiones) y el PIB catalán es más
de tres veces al vasco. Garantizando las pensiones en Catalunya, que albergan
un déficit de 21,5 %, que será cubierto por la Seguridad Social. Además de
representaciones exteriores, embajadas y demás bicocas, reformando para ello la
Constitución y la deuda, noticia por cierto reciente, nos la comeremos nosotros,
unos 70.000 millones de euros. Todo ello pactado por el Estado de Partidos, con
Sánchez, el visto bueno de Podemos, la Conferencia Episcopal, con la mayoría de
los medios lame traseros, que son de Soraya, los curas, regalados a Podemos por
el Gobierno, PSOE y demás subvencionados del pesebre.
Rajoy no reconoce error; vitoreado pos sus pelotas; aplaudido por sus
periodistas basureros; sin reconocer
error alguno; el responsable principal de este corrupto y criminal golpe de
Estado, cogido por quienes montaron el 11-M, no va a resolver nada ni a afrontar
que una comunidad se va y él lo abreva además; sin autoridad ya alguna y comido
por la propia corrupción de su partido, que es la de todos, sólo le queda el
miedo que da Podemos y sus algaradas callejeras, para seguir rascando votos. Y es el máximo responsable de la persecución que sufren los súbditos por defender la Constitución.
Totalmente abandonados. Es una verguenza
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