viernes, 2 de marzo de 2018

CRÓNICAS MUTANTES: LA ERTZAINTZA, UNA POLICÍA MUY CARA Y MUY CONFLICTIVA


Amenazar a la sociedad con coger "bajas médicas" para no trabajar en momentos de gran conflictividad. Osease: huelga encubierta en los momentos más peliagudos. ¡Oiga! ¿Las bajas las dan ustedes o así? ¿Son ustedes los médicos y repoarten bajas? ¿Tan seguros se encuentran de que los médicos les van a reconocer para otorgarles la baja? ¿Con que seguridad establecen que, masivamente, los médicos les van a dar esa baja por que sí en ese momento? ¿Tantas bajas cogen ustedes? ¿Que respeto es ese  a los contribuyentes que les pagan sus sueldazos, dejar tirada  a la sociedad que se lo trabaja muy arduamente para costearles esos emolumentos, y que nadie defienda el orden en esos momentos clave del fútbol, como el partido del próximo marzo entre el Athletic Club y el Olympique de Marsella? Un despropósito y un insulto intolerables a  los contribuyentes y necesitados de protección. ¡Inadmisible!






Ni un día más, ertzainas insultando a parlamentarios. No se les puede consentir. Mal vista la Ertziantza por todos. Por sus jefes y por los ciudadanos. Tener en la calle  a estos señores que se manifiestan tumultuariamente en Euskadi llenando de oprobio al gobierno y representantes, no es nada aconsejable. Por ellos y por los pobres ciudadanos. Cuando unos policías amenazan con ponerse de huelga, por culpa del abandono de sus mandos, antes partidos y situaciones conflictivas, debe de ser disuelta. ¿Es que los sindicatos no conocen lo que nos cuesta a los trabajadores mantener a dicha policía? Ni un chantaje más. Cuando acusan al gobierno de ser el responsable de sólo sus muertos, que no de Cabacas, esa policía en la calle es un peligro. Ni una baja médica más. ¡A la calle! 


Gritos desaforados, rabiosamente enfrentados a sus jefes, dicen se encuentran indefensos y por lo tanto reconocen que, en acción, no es aconsejable tenerlos, acusan a sus jefes de un modelo que los mata. En la calle, esta policía, con este pensamiento y sentir, sin descansar que denuncian de jornadas exhaustivas, es muy peligrosa. Por falta de preparación y porque no están serenos para afrontar su papel en momentos de tensión, Puede caer cualquiera. ¡A la calle! Un pobre Ertzaina: Inocencio, murió; le dio una bengala que lo han ocultado; y con estos despropósitos en la calle de policías enrabiados, puede ocurrir cualquier desgracia y además avisan que, en el partido del Olympique de Marsella y el local,  se van acoger la baja por estrés. ¡¡A la calle con ellos! ¿Que significa que no van a proteger el orden público?


Acusaciones muy graves que los ciudadanos, tengan o no razón, no podemos permitir. Resulta que, tras los sueldos enormes que tienen, descubrimos que no están preparados. Carecen de una formación adecuada, desean más personal y que lo sigamos pagando los trabajadores y que les aquejan graves problemas laborales. NO es cierto que carezcan de vehículos policiales; es falso. Escondidos en lugares estratégicos, se dedican a “cazar” pobres automovilistas para multarles. ¡Menudos vehículos poseen! Una concentración con insultos contra cargos de Euskadi cuando acudían al Parlamento. ¡A la calle con ellos! ¿Qué debemos pedir, que los saquen a pelotazos como hacían ellos con trabajadores, cuando montan tumultos ante nuestras instituciones? Carecen de derecho para protestar, unos ricos que confiesan están mal formados y que piden pelotas de goma para machacar a pobre gente y que acabaron con Cabacas. Y que no piden disculpas. Pues a nosotros, sí nos importa y mucho que la gente pueda sufrir abandono o quebranto por una policía ten enconada con sus jefes. Unos agentes que cobran, netos, casi los 2.400 euros mensuales, con 14 pagas, un 60% más que las fuerzas del estado,  el que menos llega a los 33.600 euros netos, y que nos dicen se van baja médica para no defendernos y preocuparse de ellos. ¡A la calle con todos ellos!



Todos estos Ertzainas deben de ser sancionados cuando menos. No se trata de alguna “Ley Mordaza” es que no se les puede permitir tanta arrogancia y falta de respeto a sus jefes en unos funcionarios ricos. Insultaron a la parlamentaria Jone Goirizelaya, que lleva el caso de Cabacas y ello es intolerable. Ellos carecen de sensibilidad por los muertos que generan.  Nosotros defenderemos siempre a Inocencio o Iñigo Cabacas. Este precedente, unido al reciente episodio violento en las inmediaciones de San Mames entre ultras vascos y rusos, genera una gran preocupación entre las autoridades institucionales y policiales, y ya ha empezado a crear desasosiego entre los vecinos de Bilbao y los aficionados rojiblancos. En este contexto, la posibilidad de que una parte del contingente de unos 420 Ertzainas de la Brigada Móvil pueda adherirse al llamamiento de los sindicatos y pedir una baja médica en esas fechas no hace más que aumentar la tensión y la inquietud.


No es la primera vez que los sindicatos policiales manejan la opción de la baja médica concertada y coordinada para eludir la prohibición al derecho de huelga de todas las policías, incluida la Ertzaintza. La campaña para alentar a esta huelga encubierta convocada bajo el eufemismo de una “semana de la salud” se pondrá en marcha si el Gobierno Vasco no atiende a las demandas de estos sindicatos antes del 9 de marzo. Según explicaron sus promotores, consistirá en animar a los agentes que no se vean “en condiciones” de ir a trabajar a que acudan al médico y pidan la baja. Preocupados por su seguridad, me preocupa la nuestra sobre todo. No queremos ni autonomías ni esta policía ¡Que se busquen la vida como hacemos los demás!




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