martes, 6 de marzo de 2018

CRÓNICAS MUTANTES: LOS POBRES PENSIONISTAS CON HAMBRE Y LOS PESEBREROS SINDICATOS VASCOS REGADOS CON MILLONES DE EUROS.


Ningún partido o sindicato va a hacer nada por los pensionistas. Sólo, aprovecharse de su necesidad, para robarles, con el caramelo de su lista cerrada que todo lo puede.
¡Pobres pensionistas y jubilados vascos! Buscando unos 1.080 euros establecidos para el conjunto del estado y de la mano de la corrupción política y sindical. Esta mañana desayunábamos con la desvergonzada Fátima Bañez que arengaba sobre que “los jubilados, solo en el ejercicio anterior, han perdido poder adquisitivo”. Y ni un periodista le ha mostrado los datos de anteriores donde, subiendo un 0,25% de llorar, llevan más de cinco años perdiendo ese negado poder adquisitivo. Desde que PP y PSOE pactaron la reforma. No me extraña que no se compran periódicos. 



Todas las manifestaciones que estamos contemplando de los jubilados y pensionistas, de espontaneas, desgraciadamente no tiene nada. Lo peor de cada casa sindical y de la casta política anda rumiando en ella para sacar tajada y, luego, dejar tirados a los pobres ancianos por los que, ninguno o alguien, va a hacer nada por ellos salvo robarles las esperanzas, defraudarles, timarles y sacarse a su costa de votos, un pastón y una plataforma para reproducirse en poder y casta dirigente si cuela en el consenso. Esa es mi verdad sobre lo que pienso de este malévolo y corrupto modo de los partidos. Indeseable y a denunciar todos los días.


Los que hemos hecho información en ayuntamientos conocemos el percal. Había uno, en Gipuzkoa, el pobre pueblo de Pasaia, feudo de Herri Batasuna y de socialistas y de izquierdas trotskistas, en el que, el PSE, se montó unas aparentemente manifestaciones independientes, para anular la asquerosidad del sistema de recogida del “Puerta a puerta”, una invención de batasuna, y a través de este asunto que tanto molestaba a los ciudadanos del pueblo, alcanzar la alcaldía. Lo logró y los pobres pasaitarras lo han penado. Los mismos que se hacían pasar por dirigentes independientes y conductores de manifestaciones vecinales que incendiaron el pueblo, fueron luego concejales del PSE que mandaron a tomar gárgaras a muchas reivindicaciones del humilde pueblo. Usaron del descontento para gobernar y entre lo más llamativo es que la alcaldesa del PSE, Izaskun Gómez Cermeño del PSE, se subió un 35% el sueldo un 30 de julio del 2015, 12.000 euros más, y un 10% los concejales liberados, con los votos de los dos partidos que se repartieron el poder: PSE y PNV, en el pueblo más pobre de Gipuzkoa. Sin decoro alguno. Estos, los demás partidos, y sus sindicatos... ¿Son los que van a sacar a los pensionistas de la miseria?


Y aquí, con los pobres pensionados, la ralea política en pie de acción electoral, están metiendo la mano partidos políticos como la izquierda abertzale, su sindicato LAB, los socialistas y casi todos en verdad buscando auparse electoralmente a cuenta de esta inmensa desgracia que acaece a nuestros abuelos y abuelas, padres y hermanos. En Euskadi, cuatro de cada 10 pensionistas, no alcanzan el salario mínimo. 


Andan los sindicatos ELA y LAB de aladides de los desposeidos; unos cínicos subvencionados millonariamente por el pesebre y que hace tiempo dejaron de defender a los obreros y grupos marginados, que presumen con una desvergüenza inusitada de autofinanciación, pero  a los que riegan con subvenciones públicas los gobiernos Vasco y del Estado, llegando a percibir en los últimos cinco años 7,1 millones ELA, otro defensor de los pobres y LAB, 3 millones de euros.


Una mujer machista, representante del sindicato LAB, millonarios ellos los sindicalistas, desvergonzadamente, osa ponerse a la cabecera de la manifestación de Bilbao, preocupada muy mucho por la indignación de los pensionistas y pensando, ¡chúpate esa! por el 0,25%, osando criticar a partidos que, recortando de los más humildes, les han hecho ricos  a ellos. No hay para pensiones pero sí para sindicatos vividores que sólo representan a su oligarquía. Claro que se ha atacado  al poder adquisitivo de los pensionistas, rebajándoles con esas subidas hasta la limosna para un indigente, pero esta señora y LAB son los menos adecuados para poner el dedo en la llaga porque chupan del dinero de todos nosotros para intrigar y medrar, ellos y sus partidos, y nada más. Y no les preocupa su futuro laboral a estos desvergonzados dirigentes sino su panel de rica miel política más próximo.


Para dar pensiones mínimas de 1.080 euros y superiores, y que no es tanto, hay que cerrar la autonomía y el grifo a ellos en primer lugar. Ni un céntimo de euro. ¿Y pretende esta señora además un capacidad competencial en materia de seguridad social, ósease para manejarla ellos y sus partidos, y así poder establecer nuestro sistema de pensiones. Y ellos cobrando del estado también y manejando el “parné de las pensiones. La situación de los jubilados vascos es desesperanzadoramente dramática. La prensa se ha pasado años hablando de las excelencias de la media de 1.300 euros del jubilado o pensionista vasco. ¡Un gran embuste! Hoy, esa media, con los datos en la mano, no asoma por algún recodo siquiera. Cuatro de cada diez pensionistas no rebasan el Salario Mínimo: el 36,22 % del total, son en total 198.448 pensionistas. Los que ni tan siquiera rebasan los 629 euros, suponen un 31% del total, unos 170.056 hombres y mujeres pobres. Y los que ni llegan ni a los 500 euros son un 16,31% del total, gente pobre ya de solemnidad. Y es imposible que estas cantidades que oscilan entre los 400 euros y los 1.100 aporten una media de 1.300 euros.



El colectivo de viudos y viudas son los que se están dejando sentir de forma especial en estas protestas y movilizaciones, ya que muchos tienen que optar «entre poner la calefacción o comer para poder llegar a fin de mes», con lo que pasan bastantes penurias, sobre todo en invierno. Son los vascos que perciben una prestación de viudedad y que no rebasan el SMI ascienden a 56.112, lo que supone el 41,46% del total de viudos y viudas. Y los que están por debajo de los 650 euros ascienden a 43.334, es decir, el 32% del total. Por no hablar ya de los trabajadores por cuenta ajena también. Este colectivo cobra una pensión media de 646,3 euros mensuales, 383 euros más baja que los 1.029,2 euros que perciben en el régimen general. ¡Gora Euskadi!


2 comentarios:

  1. Mi madre cobra 467 euros es viuda en Donostia

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  2. Conozco un lame... de enchufado del GV que cobra cerca de los 70000 euros

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