Estos personajes hablan y desprecian así porque siempre han vivido del Régimen y el Régimen les obliga a pensar así porque de lo contrario, no comen. Hablaban desde su casa curil y para su parroquia y se han encontrado con la Red, con el dinero público y con España.
130 millones de euros se lleva el Grupo EITB para dar cobijo a sus amigos, a esta gente a la que hemos contemplado atónitos, con verdadera lástima (¡que pena dan!), en ese vídeo horroroso que encima pretendía hacer gracia. No es un caso aislado, la EITB, responsable de todo este despropósito, si no piensas así, no te da cabida en la programación. Todas las televisiones públicas son políticas, y se encuentran en manos de los aparatos del partido o partidos en el gobierno, para su servicio y propaganda.
Estos personajillos del gracejo y mala sombra, son unos más que representan al sentir de odio y apartheid a todo lo español, incluidos vascos que no son de su cuerda y pensamiento subvencionado generosamente. Y lo manifiestan tan felices en una televisión que suponen de ellos y para ellos. Están acostumbrados. No se libran ni los de Villafranca o Donostia si no eres de esta repugnante manera de despreciar, que les hace grandes y aclamados ante su tribu; pero que brindan, con el apoyo logístico de ese Grupo mediático, una imagen repugnante de Euskadi, controlada por tarados que perdieron hace tiempo la cordura. Decía Miren Gaztañaga que, ella, no piensa así. Sí piensa o no, es aleatorio; lo importante, es su cobardía por aparentar lo jatorra que es, ante su grupo de exaltados que viven, con tristeza profunda, muy equivocados; ella y los demás jalean que son más anti-españoles que nadie. Y encima trabajan algunos de ellos en España. Y cobran de donde sea. Como todos.
Estos personajillos del gracejo y mala sombra, son unos más que representan al sentir de odio y apartheid a todo lo español, incluidos vascos que no son de su cuerda y pensamiento subvencionado generosamente. Y lo manifiestan tan felices en una televisión que suponen de ellos y para ellos. Están acostumbrados. No se libran ni los de Villafranca o Donostia si no eres de esta repugnante manera de despreciar, que les hace grandes y aclamados ante su tribu; pero que brindan, con el apoyo logístico de ese Grupo mediático, una imagen repugnante de Euskadi, controlada por tarados que perdieron hace tiempo la cordura. Decía Miren Gaztañaga que, ella, no piensa así. Sí piensa o no, es aleatorio; lo importante, es su cobardía por aparentar lo jatorra que es, ante su grupo de exaltados que viven, con tristeza profunda, muy equivocados; ella y los demás jalean que son más anti-españoles que nadie. Y encima trabajan algunos de ellos en España. Y cobran de donde sea. Como todos.
A mí todos ellos me dan profunda lástima. Hablan de catetos y "mongoles" y no se han mirado ellos al espejo. Esto es una anécdota más. En Euskadi, se sigue expulsando a la gente a "España", que es el lugar al que se manda al que no tiene estos raros cromosomas y piensa con otra mentalidad diferente al más rancio nacionalismo sabiniano. En Euskadi, para algunos, aunque uno sea vasco de nacimiento, sino eres como ellos y de su grupo subvencionado, es un español que lo mejor que puede hacer, es largarse de Pancorbo para abajo.
Tiene una una visión mema y agresiva de todo lo que no es su círculo; no respetan a los contribuyentes; son pedestres en sus manifestaciones y culturalmente paupérrimos. En Euskadi se ha marginado a profesionales de mucha profesionalidad en diversos campos, por estos sinsorgos. Son de estudio de estudio para los antropólogos que igual se sienten interesados por ellos, pero con precaución. Aunque tiene móvil viven instaurados en el sabiniano preservarse de cruzarse con españoles y evitar el cruzamiento de razas. Y ofenden, creyéndose hacen gracia.
En sus cenáculos alardean de no haberse jamás extraviado de su raza, mermando su inteligencia, y no cayendo jamás en la ignorancia palurda de los españoles. Me sorprendió aquel que se desinfectaba de españoles que viene a saludar y darte la mano. Tal vez, el más patético de todos. Coinciden con Adolf Hitler en su "Mein Kampf" que descalificaba todos por su dedicación exhaustiva a analizar la raza y la nacionalidad. Y mientras ellos se creen muy inteligentes por soltar estas chorradas, consideran alos demás catetos y pertenecientes a una raza sinsustancia, impreparada y pordiosera.
En el tema de los actores siempre me ha parecido que, aunque puedan y deban tener sus opiniones política, no es bueno hacer apología de las mismas porque pueden provocar enfrentamientos y no es nada aconsejable comercialmente. La bocazas de Miren ha comprometido a sus compañeros de un buen filme que no merecen todo su trabajo vaya por el sumidero porque ella es más vasca y
anti-española que ninguna. Por no hablar de Joseba Apaolaza que llame "mongoles", ofendiendo a Mongolia, a con quienes ha trabajado en "El Comisario", "Sin identidad", u "Hospital central", "Los misterios de Laura", "Periodistas".... ¡Es muy gracioso todo, sí!
VIDEO
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