domingo, 2 de julio de 2017

¿DÓNDE SE ENCUENTRA ALONSO?




"Maroto", un inocente abatido y angustiado como nunca en una cárcel, puede pagar por un crimen que, tal vez, ni se ha cometido. Haciéndose a la idea de que puede ser ya condenado cruelmente a garrote, comienza a intentar acostumbrarse a que le queda poco de vida; buceando entre las negruras de lo que le espera como final de la misma y, casi resignado, en su infierno de la realidad, se encuentra en desesperanza total. Y asume que quieren aplicar la muerte alrededor suyo sin posible vuelta atrás porque buscan un falso culpable para tapar algo. La pesadumbre que reflejó la secuencia del viernes en la cárcel, entre "Jaime" y "Maroto", fue aterradora. Un acusado sumergido en una pesadilla y un abogado que no cejará. Fue brillante, valiente y descriptiva. Y lo más injusto es que él no le mató. Y lo más insólito e inaudito es que tal vez Alonso no muriera. Lo contamos hoy a tenor de datos proporcionados en el capítulo y que pudieran orientarnos en esa dirección, si esta secuencia del libro entre "Benigna" y "Benito" no es baladí y el guión la dejó caer por algo.

                                         

Pudiera resultar esclarecedora esta secuencia del libro de "Los tres negritos" de Agatha Christie y nos puede aportar una suerte de deducciones que pudieran encajar con las observaciones que venimos examinando y que el guión nos brinda en la realidad de cada capítulo. Este momento de ese libro puede ser un aviso de lo que es el final que tanto deseamos conocer y que nos está hablando sin que  tal vez lo apercibamos a simple vista.

                                         

"Los diez negritos", una de las mejores novelas de Aghata y donde una serie de delincuentes, escapados de la justicia, son reunidos en una casa de una isla desierta y asesinados por alguien del mismo modo que repiten las diversas estrofas de la canción. Claro que en la novela el final es aterrador, el último se ahorca pero tal vez lo más sorprendente es quien es el asesino que aparece al final. Yo no voy a comentar de quien se trataba por guardar el secreto a quienes no hayan leído la novela, pero sí decir cómo actuó. Y que me ha dado que pensar sobre la supuesta muerte de Alonso. Si nos han querido dar una con clave este libro, tal vez, no hay que despreciar nada por muy imposible que parezca, puede resultar una sorpresa final. Tal vez no sea ese referente que hemos podido apreciar, fiable, pero me ha dado que pensar hilvanando secuencias.



Con alguna referencia dada el viernes, entramos en un thriller negro con ribetes políticos y un posible sorprendente final.
Una secuencia descorazonadora, cómo se quiere dar garrote a un inocente posiblemente para tapar la corrupción de quienes estaban en el poder y de quienes llegaban. La secuencia apunta a un sistema jurídico que hunde a un ser humano en la desesperación más absoluta; que juega con su vida sin piedad. En la escena, "Maroto", padece la claustrofobia del sin esperanza y llega a sentirse ya cadáver; consecuencia de todo un modo de proceder judicial que no depara si es inocente o no, únicamente culpable por conveniencia y que no mide las consecuencias morales, legales y humanas de ese acto de injusticia. 



Con crudeza y realismo, "Jaime", le informa sobre la petición de pena de muerte sin preocuparse para nada la justicia por el verdadero culpable. Y es de preguntarse: ¿Por qué no quiere la justicia, la oposición y su familia encontrar al verdadero culpable? ¿Tal vez lo conocen? o ¿No se interesa airear lo ya corrupto de la trama y entresijos de estafas y reuniones clandestinas de la oposición? A "Alonso" lo pudieron matar también por molesto y peligroso, aparte de por venganza o conflicto familiar; daba la cara del Régimen que llegaba y que no aportaba nada que no tuviera ya Franco; y pudieron también hacerlo desaparecer sin matarlo. O él urdir un plan para que, considerado muerto, ya nunca jamás, alguien se preocupara por él y pos sus delitos.  ¿Dónde se encuentra "Alonso": ¿En el cementerio, en Berlín, en Nueva York o en el piso de abajo? Sobre el piso de abajo... Es extraño que la "Marquesa" no haya intentado ir. . ¡A ello vamos!


Aunque hay algunas personas que comentan que parece está reiterativo esto del asesino y que siempre estamos parecido, que aburre un poco; yo, cada día, le encuentro un nuevo aliciente y creo descubrir algo. Me apasiona. Tengo una cosa segura: que el guión nos va a sorprender con algo que se nos escapa a la mayoría. Es más, debe de ser así. 
En los crímenes de los "Negritos" la gran sorpresa estaba en que, el asesino, no podía ser considerado como tal porque aparentemente había muerto entre los que fueron siendo asesinados. Fingió su muerte. El criminal, cuando asoma en la secuencia final, intentando matar al aparentemente último personaje, descubrimos que no murió y estaba vivo; que fingió la muerte y del que nadie sospechaba porque desapareció de escena. Era imposible suponer que fuera él.



Esto, tal vez no tenga nada que ver con el final de "Alonso". Igual, si.  Que "Alonso" no murió en realidad y me baso en más situaciones observadas y nunca explicadas suficientemente. Puede parecer retorcer mucho el final pero nadie nos asegura que, esos últimos minutos de la serie, no supongan un asombroso, insuperable y sorprendente final. La vuelta de "Alonso" sería insuperable. 
Podemos trasladar dos situaciones, como en el referente de la novela: que su asesino anda oculto en una muerte en escena prematura: "Valderrama", "Edison", "Alcoriza, "Vigo"... y que son estos por ejemplo, pero no me satisface. Pero creo que la sorpresa es que, "Alonso", vive y que es cierto que "Ana María" habla con él. Puede parecer absurdo y enredador, sin futuro, que damos por hecho que está muerto y con autopsia... pero nunca se sabe. "Alonso" puede no haber muerto". Y me explico.




Estamos descubriendo que, "Alonso" tenía un gran problema además de los que ya arrastraba económicos y delictivos: una implicación en una tela de araña "Juancarlista" que era un pura secta de delincuentes que deseaban tomar el poder a la muerte del Dictador y que, imbuidos en la clandestinidad, desde el oscurantismo de la misma, tejieron un organigrama económico delictivo, a la sombra del país y de su realidad para dar la sorpresa tras el inminente ya nombramiento de Juan Carlos por Franco, como Sucesor a la Jefatura del Estado, que sucedió un años después, en julio de 1.969. 


Y ahí estaba "Alonso" aprovechándose del grupo para medrar, trapichear con cualquiera y barrer para su casa. Era un chantajista, colaboraba con todos, guardaba fotos y documentos comprometedores y suponía un peligro para aquella oposición que se forjaba en torno al dinero y el pesebre a repartir luego. Un oportunista estafador, uno de los nuevos ejecutivos sin capacidad de gestión pero que formaron parte de ese nuevo capitalismo de amiguetes que tanto daño ha hecho siempre a España y que se consolidaron a finales de los 60 con la entrada del OPUS en el gobierno. Ese capitalismo de amiguetes con una cobertura de partidos políticos corrompidos moralmente y a su servicio,  es el que ha gobernado España en esta época llamada democrática y allí comenzó a gestarse.


El cadáver de "Alonso" tardó mucho tiempo en ser entregado a sus familiares. ¿Por qué'? ¿La autopsia lo justifica". ¡No! Nunca supimos si lo vieron sus parientes, no se dijo nada ni comentó sobre su estado en al ataud. Sobre la novela podemos establecer una hipótesis: Que "Alonso" estaba aparentemente muerto. Podría haber recibido un golpe muy fuerte pero certero para sufrir una catalepsia, en estado de aparentemente inmóvil y sin signos vitales, que puso ser declarada como clínicamente muerte aunque se encontrara la víctima en un leve estado de consciencia que no se apercibía a simple vista. La catalepsia provoca los mismos efectos que la muerte y hasta el aspecto blanquinaceo de un cadáver. Remite al cabo de los días que pueden ser los que esperaron quienes fingieron su muerte para supuestamente enterrar a un "Alonso" del que nadie ha escuchado mencionar cómo se encontraba y si lo vieron de muerto.  


¿Quien lo hizo y por qué'? Dos opciones:  Una persona contratada por él, un profesional, que le golpeó, borró huellas, dejó  a"Alonso" supuestamente fuera de juego y encaminó las pesquisas hacia un supuesto culpable que, después, dejaría sus huellas en la estatua. Nadie jamás le buscaría; habría fingido tener un pasaporte que jamás recogió; un billete de avión que nunca usó y toda otra tapadera para salir del país con otro personalidad y sin ya existir. Pasaría a ser el hombre que ya no existía. Con dinero y amigos y hasta en la morgue, lo puedes conseguir todo.

                                     

Y otra opción, similar, pero con rostro. Dos modos de librarse los "Juancarlistas" de él: matándole, que es una opción; y otra, ofreciéndole una opción de desaparecer, con dinero por supuesto, pactando un supuesto crimen y acreditándole una nueva personalidad en algún otro lugar del mundo. Claro que dos matones expertos le golpearon y toda la sofisticación de las huellas borradas fue algo estudiado para que jamás nadie pensara ya en el "Marqués, un asesinado por alguien incauto que dejaría sus huellas, tarde o temprano, en la "Victoria de Samotracia".  En la morgue todo quedaría tapado. Puede parecer alocado e inverosímil, puede ser rechazado este argumento,  pero lo cierto es que no se tiene constancia de que alguien viera el cadáver ni tampoco de que, "Ana María", esté tan loca como para creerse que habla con su hijo. Y de ello enseguida escribimos.


Hay algo que a "Pitu" y a "Los Juanacarlistas" apremia: que el caso sea cerrado cuanto antes, con un culpable cabeza de turco y que nadie remueva los entresijos de "Alonso". ¿Pusieron ellos las pruebas de la "Victoria de Samotracia" para culpar a alguien inocente? No lo descartaría. Ello puede ser debido a dos causas principales: Que se ponga en ventilador y asome, tras los negocios y apoyos,  la figura de Juan Carlos o que no exista asesino, porque vive el "Marqués", por lo tanto imposible encontrar a su mano ejecutora y que todo ha sido un montaje. En este argumento existe una contradicción: Si "Alonso" vive...  ¿Por qué no les ha contado lo de los archivos, fotos y demás que guardaba y que, ansiosamente, buscaba "Pitu".
Todo ello no son más que deducciones sobe un muerto vivo de la novela de "Los diez negritos". En el tema de "Pitu" hay algo que se nos escapa aunque pueda parecer lógica su posición que desea blanquear al Príncipe. La opción de que "Alonso" puede vivir y hablar con su madre no la descarto, como ya en este caso, de nada prescindo. Parece de locura pero con el guión nunca sabemos por donde tirar.



Cada día estoy más convencido que "La Marquesa" se oculta en esa demencia para salir airosa de hacer y decir lo que le da la gana. Y también para dar una especie de imagen de loca cuando dice que tiene que hablar con su hijo que se encuentra en Nueva York y que no me extrañaría nada, hablara. Confunde a "Rosalía" con "Menchu", en la librería, pero porque se ha dado cuenta que le han pillado robando y así entiende la frase de "Rosalía" de que salga que irá ella pronto. Está lúcida más de lo que parece. Como lo del milagro del Pan y de los Peces" que es del Evangelio o esa impresionante secuencia en la que ejerce de "Marquesa" y madre de "Alonso", se planta con distinción y señorío y les advierte absolutamente lógica e impositiva, a su viejo estilo, a "Rafa" y a "Marta", que no es tonta y que se da cuenta de lo que está pasando entre ellos. En este momento, "Ana María", recobra el plante, la ironía directa, la lucidez y el tronío de una "Marquesa" como siempre fue defensora de lo suyo y el honor de su hijo y censura la "evidente" relación que no acaba entre estos dos. Y les advierte que no está loca. O sus recuerdos perfectamente asumidos como que "la pesca" es muy aburrida.






Parece que el fiscal "Pallarés" aporta el lunes otro hilo de donde tirar. Estamos esperando pero, planteado así el juicio, son casi nulas, con la escasez de coartadas y abrumadoras pruebas, además del asesinato de Pardines, las posibilidades de que, "Maroto", sea sentenciado como inocente.





Y vuelve la mula al trigo. Tras "Alonso" le ha caído ahora la pedrea a "Marta" con un insoportable "Rovira". Ya se ve que "Rovira" es otro esbirro de "Holstein" que acata sus mandatos sin tener una posibilidad de independencia o espontaneidad en la gestión. Por lo tanto puede representar cualquier organigrama en la empresa y es más falso que Judas. Se hizo el adulador y encantador y ahora, como suponíamos, vemos su verdadero rostro, el de un tirano desagradable y frentista. El asunto es que intentaba camelar a "Marta"; yo creo que ya tenía referencias de ella o sospechas; que intentaba tal vez enamorarla para probarla en algún sentido; tal vez le ha sonsacado sobre sus sentimientos con "Pierre" y si tenía algún amante y si pudiera ser la asesina; que desde luego ha ido a recoger información como espía (recordar que no paraba de insistir en preguntas personales hacia "Marta") y que es, con los alemanes, un sospechoso más, tal vez conocido por "Alonso", y que también entra en la terna de asesinos. Es un personaje que usa del maquillaje para conseguir sus fines y que se lo quita porque, por detrás, alguien le manda y protege y ya no es necesario porque ha averiguado lo que desea.... ¡Quien sabe si "Alonso" no está en Berlín!







Preciosa secuencia la del reencuentro radiofónico con "Blanca" que ha pasado el tiempo y poco hemos disfrutado con los buenos momento que este ensoñado enamoramiento nos ha brindado. Secuencia de reencuentro tierna y adolescente y con ese toque de clarividencia en ella, muy bien interpretado por  Tábata Cerezo y que ha robado el corazón a "Bruno".





Muy complicada está la situación. A fecha de hoy, cualquiera, puede ser un asesino o ninguno.

13 comentarios:

  1. Una apuesta arriesgada la que haces pero puede ser asi y tener su explicación. Tu dices una cosa y que toda hipótesis está abierta.Yo tampoco desecho nada y tal vez el marques pueda vivir igual que el asesino puede ser Alba por ejemplo. La serie no nos da pistas muchas y cualquiera puede ser o no ser. Un abrazo José Ignacio de esta tu admiradora

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  2. Todo puede ser. La verdad está toda la trama muy enrevesada.Puede ser cualquiera, esté vivo o enterrado. Lo que ocurre es que a algunos no les gusta que pueda ser algo con lo que no se contaba y de ahí que se rechace. Pero puede ser. Nada tal como está es para descartar ni para desecharlo.

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  3. La cita de los negritos algo puede querer decir. Fíjate que yo imaginaba un final con Alonso que aparece y muere pero hace ya semanas. Veo que la gente no comparte tu postura pero es posible. Y esa sería la sorpresa.He leído que seria simple lo que tu dices y no lo creo seria sorprendente

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  4. Ya se que es difícil comprender este razonamiento mío que pasa por "Los diez negritos". Que puede parecer algo exagerado pero estoy convencido, y más desde ayer, que "La Marquesa" no está tan enajenada como pueda parecer.Y lo he comentado en el Foro, los guionistas están dando sumo interés a este final y eso es un reto para ellos. Cualquier cosa no valdrá para convencernos.

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  5. Te puedo hacer una pregunta: ¡Cuanta gente te pone me gusta y cuantos leen tu escrito porque te leía en Puente Viejo que sabías cuantos te leían. Y disculpa

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    1. Pues Margari muchísima menos gente que la que me lee.El me gusta es de un sobre el 5 % de las lecturas. Ya veré ahora en verano si continúo porque me gusta salir y disfrutar por las tardes que tengo fiesta.

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  6. Llevo dos capítulos de retraso que veré hoy Pero te lo repito seguro que tu trama es mejor que el guión He disfrutado mucho con este relato de tensión absoluta Gracias siempre José Ignacio eres un genio de la escritura,

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  7. Eso ni dudes Marga que seguro que lo que escribe Iñaki es mejor que el guion que al final veremos.

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  8. Que misterio hay con querer culpar a Maroto. ¿A que crees que es debido?

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  9. Cada día te superas y la verdad tengo un txandrio encima que no me aclaro Iñaki. ¿No nos puedes decir quien crees que es el asesino? Muxus y gabon

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  10. Os agradezco los halagos.La verdad es que me identifico mucho con la serie. En el tema policíaco con el que más. Recuerdo que cuando Germán, aquel policía lo identifiqué con el cine Polar policíaco francés y precisamente, Tirso calero, me escribió para decirme que era entusiasta de ese cine y que el personaje de Germán Arratia, excelentemente interpretado por Óscar Ladoire, estaba basado en iconos de ese cine. Sobre "Maroto" alguien desea sea condenado para esquivar líos, muestra la calaña malaje de la mayor parte de los personajes, o también alguien en concreto para eludir su responsabilidad si es el asesino.A los que no se les escucha decir nada, pronunciarse, es a "Ana María" y a "Ginés". Sobre quien creo es el asesino tal vez confío en una solución sorpresa. "Amar es..." no puede decepcionar después de tanto ahínco e interés que el público está demostrando por la serie, y espero algo que sea sorprendente. Lo que ocurre es que ya nada nos puede sorprender porque, en estos meses, se están barajando todas las posibilidades. Creo que no tanto el asesino, si lo hay, sino el modo de actuar y lo que realmente sucedió serán los que nos puedan causar asombro y estupefacción. Si es que no acometen un final simple y nos dejan pasmados de decepción.El remate es en lo que más fallan los guionistas en España, en cine y televisión. Buenos guiones y realizaciones acaban despersonalizados y banalizados por culpa del final.

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  11. Tienes una imaginación que barre José Ignacio. Y es que ya leerte es un vicio y si no te leo parece como que no me entero.Un beso fuerte y sigue así.Por cierto lo de vivo Alonso yo lo creo.

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