CATETOS A ESTRIBOR

Dice la frívola Carmen Calvo que un gobierno para dos días es una tomadura de pelo. Tomadura es haber hurtado unas elecciones y pensar estar el sillón durante dos años.
Podemos fue un engendro de Zapatero, como mayo del 68 de Pompidou y De Gaulle. Después usado como papel higiénico por Rajoy y ahora al dar su respaldo a Sánchez, ya no es nada.  Poco van a disfrutar el desalojo de Rajoy, ya no tienen argumentos para justificar su revancha a esa derecha que odian como posesos y el PSOE traidor los ha comprado por humo o a lo sumo por la medalla del torturador  “Billy el niño” que por cierto lleva ahí muchos años cobrando un 15% más en su pensión y siendo reconocido para vergüenza del Estado de Partidos. Y todos lo han permitido.

Andan los errados de Bildu confesando que ellos “no apoyaron a Sánchez”. Por supuesto que sí. Y son responsables. Todos, incluido los necios de Ciudadanos, han alentado el bipartidismo y el pacto Rajoy/Sánchez para cambiarse las tornar sin pasar por elecciones. Todo ha sido la respuesta ambiciosa de un  pijoprogre, de un traidor demagogo que compra medios y periodistas culeros para domesticar a una izquierda que sólo piensa en revancha sin mayor programa. Una izquierda golpista que voto en cenáculo sobre pactos secretos con un embustero; un presidente revanchista hoy, Sánchez, que jamás hubiera soñado serlo sin estos golpistas que le han aupado a pegar un golpe al Estado a través de una enmienda al gobierno. Una ultraizquierda y ultraderecha golpistas contra el gobierno el PSOE y contra el Estado, los demás. ¿Qué sentido tienen ahora estos traidores de los que apoyaron a Sánchez una vez caído Rajoy? Ninguno. Ningún objetivo social que aporte el mínimo interés, apenas unos cuantos eslóganes arcaicos gracias a la derecha que los motivaba y que fueron usados por la misma derecha para mantenerse ella en el poder por la preocupación social que concitaban en sectores moderados. El odio a la derecha ha mantenido a la derecha en el poder sólo desalojada ahora por un pacto entre oligarquías del bipartidismo. Como el odio a Puigdemont le dio su triunfo.

El “Txokobolo” de Iglesias es en lo que quedan unos fantasmones que se creían iban a ganar al Estado del Bipartidismo. Son como cateto a a babor. Es felipismo puro, unido a agradecimiento a autonomías corruptas, que llega con aderezos podridos de corrupción en Andalucía, Valencia y que ha vaciado ya de discurso a unos   las mismas siglas y propaganda, mucha propaganda. Ahí están: Sánchez, desde el PSOE y con la mayoría mediática aplastante que el PP entregó a la izquierda hace ya muchos años y con una babosa prensa subvencionada que él. Todos estos partidos que ahora dicen “no sé nada”, vendieron sólo, con propaganda, humo negro y cercado. El camino sin Rajoy está abierto, pero no para ellos que a lo sumo recogerán las boñigas de caca de los barones socialdemócratas a los que han aupado. Y es que han dado su confianza a un gobierno derechoso, tramposo, que viene marcado en carteras por el felipismo, la corrupción, la judicatura y lo más duro del PP en materia económica. Deberán explicar a sus votantes ¿a cambio de qué han apoyado a Sánchez y quien les dio permiso?

Para mí la Moción ha sido ilegítima y el escapismo de querer desvincularse de ella no es creíble ni será aceptado por mucha base de estos partidos. Han vuelto Felipe González, Guerra, el juez Garzón, Bermejo, el Gürtel de Valencia, los ERE de Andalucía, Grande Marlaska, Zapatero y su vividora y frentista Memoria Histórica, el Valle de los Caídos y Franco atodas horas, las mujeres ruinosas de la época Zapatero, la ministra denunciada por prevaricación que enchufaba al muerto de hambre de su marido, los mismos caraduras, siglas, libro de ruta, marketing y propaganda de siempre: los que pactan con el PP y ¡Ahora te toca a ti! Los mismos de siempre que devoran a los demás y ellos, que van contra las privatizaciones, desviaban pacientes a hospitales privados del grupo acusado de financiar en B al PSOE valenciano. Se trata de la recién nombrada ministra de Sanidad. Un cargo al que ha llegado directamente desde la Consejería valenciana también de Sanidad. Allí se encontraba bajo el mando del presidente regional Ximo Puig, también socialista. Y allí derivó pacientes hacia hospitales privados del grupo Hospimar. Esto es lo que han apoyado algunos. Al PSC con una Batetr que tiene  4 dirigentes imputados unos días antes de la Moción de Censura. Al felipismo de Borrel y su época podrida. A jueces al poder ministerial. Los mismos que ayer iban a apoyar los presupuestos y hoy no. Que ayer una pavisosa de portavoz del Gobierno dijo lo contrario de una ministra de Hacienda: no descarta subir los impuestos, eso sí para políticas sociales y de paso para pagarle la reforma de la Moncloa a la mujer de Sánchez y los suelazos a las nuevas ministras o nuevos ministros. ¡Menuda desgracia nos ha caído!

Ya están mintiendo los socialistas. Una ministra alucinada dice subirá los salarios hasta 10% en tres años y su jefe Sánchez dice que cumplirá con Bruselas. Imposible las dos situaciones. Carecen de decoro y son unos inmorales mintiendo así con cosas tan graves y con tanta frivolidad. Les da lo mismo todo sólo buscan su financiación. Llegaron por una Moción ilegítima y con pactos secretos que nos van a costar ni se sabe. Todos reclaman lo que les deben. Los chanchullos de los socialistas para llegar al poder como sea y mentir todos los días han tenido el refrendo de partidos que son responsables de lo que suceda. Y sobre Catalunya que se preparen los que se sienten constitucionalistas en un país dónde se desea cambiar la constitución para acabar con el Estado. De todos modos, el problema catalán tiene dos vías: o se hace lo que mandan los separatistas, seguimos a peor, que cada día querrán más y el dialogo es para darles más poder y dinero y sacar a sus presos y proclamar su República, se cede en todo y se muestra ya claramente lo que muchos pensamos que no existe división de poderes, o se arma la tremolina porque impunemente no van a dejar tirada a Catalunya estos vividores de socialistas. 

Ahí estamos. En puertas de subir impuestos descaradamente, dar el poder a los sindicatos y reformar lo laboral para generar más paro, mintiendo sobre el 10% de subida salarial a alcanzar en tres años, castigando el patrimonio, gastando en ellos como ya han comenzado a hacer sin pudor. En plan tribu y de lo mío. Un plan dictado desde Soros con liquidación de la Monarquía que tan buenos y suculentos dividendos les ha dado, para entrar en ni se sabe qué donde todos en una República confederal se comerían entre ellos con derecho de autodeterminación de clanes. Se podía haber evitado mucho de esto con unas elecciones. Si que unos oligarcas nacionalistas y de ultraizquierda no hubieran permitido entrar por la puerta falsa a un PSOE que les ha mandado a freír puñetas.