EL CUENTO DE LOS SUBSAHARIANOS EN SAN SEBASTIÁN.

Me dan ganas de tiznar la cara, montarme en bus desde Pancorbo, con unos amigos desesperados de la vida y viudas en bancarrota con míseras pensiones, llegar a Euskadi y pedir manutención, albergue y subvención, decir que me manda Cruz Roja de allá y que nadie me quiere y que no sé lo que sucede. Desde ese momento ya tengo de todo menos vigilancia y control. Las puertas cerradas hoy para muchos vascos y las angustias por sobrevivir, darían paso a una vida confortable y de paso, luego, como harán muchos de estos que llegan ya al norte, marcharme a Francia; pasar la frontera de madrugada, pero es que el déspota y sinvergüenza de Macron no los quiere ¿Dejados a su suerte? o ¿Todo preparado? ¡Queremos respuestas! ¡Queremos conocer quienes, de dónde, cómo, quién los trajo, para qué vinieron y por qué están aquí? Es que considerado como tal, parece que Cruz Roja deja "paquetes tirados"

No se pueden abrir las fronteras con tanta facilidad. Si conocer quien y para qué llega. El parecer inmigrante no es patente de corso. Mucha gente va a Servicios Sociales de ayuntamientos, pomposo Gobierno Vasco y Diputación y no le hacen ni puñetero caso por ser vasco o español. Esto no puede seguir así. Las fronteras no son de Sánchez o de los virreyes de las autonomías. Son nuestras y las gestiona la Unión Europea. Este es un problema europeo. No puede ser que ya esté ocurriendo que aparezcan inmigrantes con rollos patateros. No somos racistas, pedimos y exigimos los mismos derechos de identificación que las autoridades tienen para con nosotros y estamos hartos ya de esta política buenista de “puertas abiertas” porque es nefasta para todos y sólo engorda a la mafias. Puertas que Macron y Merkel piden hoy cerrar y controlar..

Nadie puede creer esta increíble historia. Parece cosas de mafias de inmigrantes. Para mí que miente alguien y ensucian la imagen de la Cruz Roja. De repente unos 46 pobres desgraciados perdidos, aparecen en la estación de autobuses de Donostia; dicen que los mandó la Cruz Roja de Almería en autobús. Nadie sabía nada en San Sebastián, ni la propia Cruz Roja tenía conocimiento, ni autoridades, ni policías diversas. Un chófer los dejó a las 8,30 de la mañana y se marchó sin que sepamos más. No quisiera involucrar en esta historia a la Cruz Roja y sus supuestas pésimas gestiones. Porque no me creo nada. Aquí, ya para empezar, hay que indagar en dos puntos de referencia: el del video del autobús llegando a la estación y su matrícula y que Cruz Roja de San Sebastián se ponga en contacto con Almería.

Los dejaron tirados como a fardos y apesta a inmigrantes ilegales. Llama la atención que parece ser iban con la misma ropa de hace días, de la Cruz Roja no podían venir. Posiblemente fueron náufragos. No me puedo creer que sea un caso de descoordinación, de "falta de comunicación" entre Cruz Roja de Andalucía y de Gipuzkoa. Al parecer, los inmigrantes fueron embarcados el domingo en Almería en un autobús, no sabemos por quién, pero nadie ha acudido a recibirlos hoy a su llegada a San Sebastián. Si fuera así sería de un despropósito total la irresponsabilidad de Cruz Roja.

Yo creo que los inmigrantes mienten o que les engañaron las mafias adscribiéndose el papel de Cruz Roja. De todos modos deberemos saber si pagaron o no. Dicen que entraron en España este mismo mes de junio, tras atravesar en patera el estrecho y alcanzar las costas de Andalucía. Todo el grupo ha viajado sin equipaje, la mayoría vestidos con la misma ropa de chándal de color gris y negro. Cruz Roja comenta que no tenía información de la procedencia de estas personas, y que no han tenido ningún aviso de que fueran a ser derivados a Gipuzkoa desde ningún otro punto de España. ¡Que hablen con Almería! Ya por lo pronto la ciudad que volvía la espalda a unas chicas supuestamente violadas por Kote Cabezudo, se ha puesto las medallas organizando un ejército compuesto por 40 educadores, psicólogos, abogados y traductores, que se está encargando de atender a estas personas. Por supuesto alojamiento y próximamente se les realizará una valoración individual para ofrecerles los recursos adecuados, no descartándose vivienda y subvenciones. Y la pregunta ¿De dónde procede esta gente que nadie se ha hecho cargo de ella? Mañana llegan 3.000 y ¿Que hacemos?

Elena Luquín de Cruz Roja, directora de Intervención Social de Cruz Roja Gipuzkoa, nos confesaba que estas personas estaban cansadas. ¡Faltaría más! Como muchos trabajadores y gentes de Euskadi. Maite Peña, del PNV, concejala de Errenteria y que votó contra su propio partido en un Pleno donde se podían haber sumado votos con el PP y PSE y dar el triunfo a los socialistas en lugar de a Bildu, dice que han llegado de repente y sin previo aviso. ¡Averigüe! No vas a dejarlos tirados pero tampoco abrirles las puertas sin saber de quienes se trata y que referencias tenemos. 

¿En Euskadi todo el que viene sin saber cómo se queda y recibe subvenciones y demás recursos? ¿Quién está tomando el pelo a quién? Es bello mandar a personas, traficar con ellas, que lo paguen los demás, sabiendo que nadie y menos en la injusta Euskadi, les va a dejar tiradas, pero es preciso averiguar qué ha sucedido. Y cuidado con unas autoridades que pueden estar colaborando con gangsters