miércoles, 8 de febrero de 2017

EL AMOR DUELE MUCHÍSIMO. UN GRAN CAPÍTULO DE AMAR ES PARA SIEMPRE


No hay mayor pena que la del amor, se tenga o se haya perdido o jamás encontrado. El amor duele y sabe a un punzón de hielo directo al corazón. Alegría de inicio y esta pena dura toda la vida. ¡Que se va a hacer! Por ellos somos humanos y trascendemos a nuestra propia existencia. Cuando llega, atormenta; cuando no asoma, se añora y anhela de modo insufrible; cuando está, aflige y lastima y cuando se va, te rompe las entrañas. Desde luego no podemos decir que el amor no está presente en la serie, aunque este sea retorcido, doliente o inalcanzable. ¡Es el amor! Hay amor en todos los personajes, aunque se sientan traicionados o no estén enamorados y aspiren a alcanzar un día esa maravillosa ensoñación que tanto les va a hacer padecer y llorar. Nat King Cole cantaba que es algo maravilloso, en realidad es algo siempre muy amargo.


Precioso capítulo que habla del amor a través de sus muy diversos personajes. En un "Alonso" que asiste derrumbado a esa conversación entre su esposa y el "piloto", "Rafael", donde las miradas de deseo se cruzan entre ellos y ella intenta pudorosamente apartar cualquier manifestación amorosa y atracción que siente por el padre del hijo que lleva dentro. La secuencia en la oficina ha sido de una tristeza casi inalcanzable donde todo se ha dicho en ese lúgubre lugar y donde todo se ha callado. Donde sobraba todo porque en las espadas afiladas, en la ternura de sus miradas, en la soledad de pensar nunca más podrás estar con tu amor, ha sido un derrumbe para los dos enamorados.





La hay en el perdón condicionado de un "Alonso" quien inquisitorialmente pone condiciones para no repudiar a su esposa y hacerse cargo del hijo de "Rafael". También hay un amor enfermizo pero que subyace en el tiburón por su presa. Aunque este espléndido personajes está sobrado de sorpresas y, como le ha traicionado al arrinconado patriarca "Novoa", doblando en pantalla y sonido, en el anuncio, al viejo empresario. Pero no deja de ser un desgraciado más sólo que una y perdido sin remedio.



Toda la secuencia en el "King´s" es casi perfecta. Recuerda a " El Guateque", en la realización y en algunos de sus aspectos de conversación, con sus hombres de negocio, gente del cine que se divierte y estrafalarios personajes como el sobón del "director" que corrige a "Novoa" sobre que "Blow-Up" no es el nombre de algún director, sino el título de una película. Ese era el humor típico de "El guateque", disparatado, despectivo, alocado y burlesco. La verdad es que el mundo del cine no queda bien parado, y justamente además, en la serie que tiene la audacia de llamar por su nombre a los que se dedicaban a ligar con actrices para obsequiarles con un papel muchas veces inexistente. Un mundo dominado por la hipocresía, por el tener que vender el cuerpo para sacar algo, putero y traicionero, que da risa y lástima, patético, sin escrúpulos, aficionado al sexo sucio y al engaño para conseguirlo, pedante y obsesionado por la codicia y obsesionado enfermizamente con el ego. Aunque también esa sabandija de "director" busca amor ni se sabe por dónde. 


Todo esto es de "El guateque". Estos que padecen el síndrome fanfarrón de creerse más que nadie por ser amigos y quedarse ensimismados con Antonioni, despreciando otros gustos por vulgares y horteras y que valoran la inexistencia de intelecto en los que se sienten atraídos por la pachanga.




Y esta ironía entre "Rafael" y "Marta" surge de la necesidad de besarse y no poder hacerlo. Se aman. Y ella le ama como se ama al padre de tu hijo, que también nació del amor y no de un devaneo aunque se plateara de este modo. Por cierto Gonzalo Kindelán mantiene el tipo y muestra otras facultades y sensibilidades. Aún se le recuerda como aquel "Paquito", al que no le dieron mucho papel, enamorado de una "Mariana" que le asesinó, en aquel Puente Tragedias.




Como "Ana María"perdona a su hijo porque el amor de madre está por encima de todo y lo absuelve e indulta todo al hijo al que le dio la vida.Y se lo confiesa a un comunista pero de corazón que ama a sus vecinos y parroquianos y hace las veces de sacerdote laico y revolucionario. Un secuencia donde María José Goyanes ha exprimido todo su saber e interpretar de una vida dedicada el espectáculo. Es maravillosa, como toda su familia y no la voy a descubrir yo. ¡Me encanta!




Lo hubo en una "Fuencisla" que ha recordado con lágrimas en los ojos que amó a aquel hombre perdido en los nunca olvidos del tiempo, quien también le decía que "verla coser le relajaba". Basta una chispa de pasado para avivar el fuego de las pasiones que nunca dejan de arder y de morir aunque parezca muerto el amor. Esa secuencia ha sido casi lo mejor de la tarde. Lola Casamayor ha estado mejor imposible y uno se pregunta si "Henar" no será hija de ella porque, el amor que nunca terminó de concluir, era el padre de la chica. Las lágrimas indiscretas han brotado de entre el sustrato amoroso que siempre lleva con ella por aquel hombre que murió y al que amó.





Amor de una chica desenfundada y frivolona que descubre, por suerte y desgracia, que existe ese hombre, el único, en el que ya no puedes de dejar de pensar. El hombre, la pareja de tu vida. Todo se difumina. Su aire desapercibido y sus novietes forman ya parte del pasado y lo que has descubierto es el amor, su enganche y la pena de amor. Preciosa secuencia entramabas, donde se dan cobijo y se consuelan de lo que desde fuera parece una "tontá" pero que te quema con vitriolo por dentro¡Es el amor entre gentes de muy diferente edad para quienes lo padecen!



Y son los besos lesbianos, experiencias y jueguecitos inocentes aparte, en los que se está proliferando la serie, algo que busca lo que tampoco en "Sophie" está muy claro que busca en la vida. ¡Caiga quien caiga! Sea el admirado "Jaime", un vacile esta tarde con él que me he reído y me ha hecho muchísima gracia en las respuestas escépticas y caras que ponía Javier Pereira, sobre los valores que podía aleccionar a los demás escritos y que "Sophie" escribiría. A la francesa le va todo y juguetea con todos y todos. Con un Óscar Ortuño que le da una marcha y una veracidad natural a todos sus registros. El de enamorado, el del celosote, el del crío que desea conquistar a una chica guapísima, el extravagante mirón de las estrellas y ovnis, el genial ingeniero que creó una radio de galena, el rebelde, el contestón, el adolescente de nuestros tiempos  y hasta el sucedáneo de cura en el confesionario. ¡Un talento Óscar! ¡Es el amor  a los 14 años cuando las hormonas y el morbo tocan a la insurgencia.







Por no hablar del misterio de la paternidad de "Nuria", del amor de una "Sor Amparo" hacia "Isabel" la medre de "Nuria, a la que tal ves vaya a confesar algo porque por la cara de circunstancias que ha puesto al mencionar la relación que hubo entre ella y "Jaime". Sobrevuela si son hermanos. Y es que todo es amor aunque no siga los cánones establecidos y pueda ser considerado como nacido de algo aberrante y repudiable socialmente. Todo es amor. Amor religioso y humano que es tan digno como cualquier otro aunque sea fruto de lo que llamaban los antiguos "pecado".


El capitulazo de hoy ha tenido momentos de ternura infinita, dolor de pecho, de separaciones drásticas, de frustraciones amorosas, incomprensiones, celos, derrotas de adolescencia, amores desengañados, sentimientos que no acaban de plantar cara a la verdad que ocultan, mezclado entre tramas de lo mejor de la televisión de hoy. Capítulo adorable y muy bueno donde todos buscan el encuentro y la unión con el otro. Todo han sido mensajes descarados de amor y de dolor, preciosos, porque estamos hecho de amor y él nos ha dado la vida y nos da esperanza. ¡BRAVO AMAR ES PARA SIEMPRE!




6 comentarios:

  1. Yo hoy no lo he visto tuve oficina pero me ha encantado tu escrito y veo por donde va. Sabes si empieza a haber mucho juego de lesbianas me parece excesivo. No se si tu me podrás decir pero sabes si en aquella época había mucho esto. Un abrazo

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  2. Es verdad cuanto amor hay y que bonito y triste es todo. Es precioso. Enhorabuena por tu maravilloso escrito que tan bien define la tragedia del amor. Buenas noches José Ignacio

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  3. GRACIAS, es un gozo leerte, pones poesia a la novela Un saludo

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  4. Que razón tienes Boira es una delicia leer estas cosas sobre el amor que son una verdad como una catedral dichas tan romántica y lánguidamente. Se nota que quieres y has querido mucho. Hoy has puesto poesía y otros días mas acritud pero siempre espléndido.Un abrazo José Ignacio

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  5. En aquella época Jordi había de todo como hoy. Date cuenta que el sexo lesbico o juegos de amor franceses se dan entre una parisina y una española sin gran conocimiento sexual. Era en quellos años aquí en Francia una liberación de la clase burguesa y fue más en los 70 que se expandió este modo de sexualidad ya entre obreros, en los barrios donde el feminismo imperaba. Sophie era una adelantada. Hay una peli que la vi hace un año aquí en Hendaye, que se ha estrenado en España, que es "La belle saison" de Catherine Corsini que habla de esta liberación pero en los 70. Ya las protagonistas más metidas, tras el mayo del 68, en los 70. Francia, sexualmente, ni antes o ahora, tiene nada que ver con España. Lo que sucede es que parece, por los adelantos vistos, que van a insistir en los besos y en el gustazo de besar que descubre "Alba" y que parece le atrapa. Ya comenté que alguna vez los papeles que, a Blanca Parés, le encomiendas de personaje acosado por alguna lesbiana. En la serie resulta bonito y digno, como el amor homosexual de "Gonzalo" tratado con dignidad y justicia. Aunque para muchos pueda resultar morboso, yo creo que, como le ocurre a todas las tramas actuales, tiene una segunda lectura digna y de gran hondura y que habla de injusticia, persecución, falta de libertad y dictadura frente aun pueblo que quería superar la asfixia del franquismo. Un abrazo a tod@s!

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  6. Felicidades por tus textos!...elevas la novela a la categoría poética, a mí también me parecen grandes actores y un buen recuerdo de mi epoca quincieañera, yo sería de la pandi de Bruno...y mi padre como Félix, santiguándose al salir, elegante, un hombre de bien. Espero tu blog como un bálsamo. Muchas gracias

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