En 1.926 de estrenó en Nueva York el "Don Juan", con efectos sonoros y partitura sincronizada. El 6 de octubre de 1.927 se estrenó "El cantor de Jazz", considerada la primera película sonora del cine. El cine mudo se tambaleaba y en 1.930 el cine sonoro era ya un hecho consumado. A San Sebastián llegó un 17 de marzo de 1.930 al Victoria Eugenia donostiarra y el 22 de mayo de ese mismo año al Miramar.
Inauguración del cine sonoro y entradas al Victoria Eugenia ese día.
El cine sonoro llegaba al Victoria Eugenia un 17 de marzo de con el filme "Rapsodia Húngara" 1.928. La foto de arriba pertenece a las colas para asistir a este nuevo invento, con este filme de Hans Schwarz que no satisfizo al público donostiarra. No era un filme hablado propiamente dicho sino de una versión sincronizada de la música de Liszt. La gente quería oír hablar. De hecho se iba a proyectar "Picadilly" de E. A. Dupont, de 1.929, y no se pudo.
Teatro Victoria Eugenia en 1.930 y caratula de "Rapsodia Húngara"
"Picadilly"
EL MIRAMAR 1.930 Y EL SONORO.
Llegaba el sonoro al cine Miramar el 22 de mayo de 1.930. Contaba con un nuevo proyector. El más novedoso, un aparato Westrex con sonido Western Electric y con lente para el formato académico de 1:37:1, sin bandas negras y con una pista de sonido óptico. Superaba al 1:33:1 del mudo y añadía el sonido.En los años 40 le agregaron una linterna Superson como la del Corazón de María. Así lo contaba el operador Ángel Garzo.
Ángel Garzo
En la década de los años 40 y 50 tras la guerra se proyectaron interesantes filmes como:
"La reina de África". "Tarzán de los monos". "Nacida para la danza". "Bajo el manto escarlata". "Siguiendo a una estrella". "El vagabundo millonario". "La sirena del puerto". "Romeo y Julieta". "Callejón sin salida". "Los licenciados del amor". "Hombres si nombre". "Prisionero del odio". "Adorable enemiga". "La mujer sin alma". "Sin novedad en el Alcázar". "Vive como quieras". "Noches blancas". "Lorna Doone". "La carta". "Rio Bravo.
Proyectores similares a los del Miramar
El 22 de mayo de 1.930, en sesiones de 5, 7 y 10,30 se inauguró el sonido en este Salón de Cine con tres estrenos: "Noticias Fox Movietone"; la maravillosa revista totalmente sonora, hablada y cantada, interpretada por Sue Carol y David Rollins y titulada "Fox Movietone Follies" y "La mujer del diablo", en una primera parte, consistente en la escenificación de un couplé de Padilla. Precios magníficos: 3,50 pesetas por la tarde y 2,50 por la noche.
EL RELIEVE:
Al Miramar llegó el relieve. Llegó tarde. Cuando lo hizo, las grandes productoras ya habían dejado de filmar en ese formato. Un 29 de julio de 1.953 con el filme "Bwana, diablo de la selva".
Recordamos aquellas primitivas gafas de relieve , polarizadas en colores, que eran entregadas a los espectadores y que resultaban un incordio para el personal de los cines.
El 29 de marzo de 1.953 se estrenó "Los crímenes del museo de cera"; un filme que fue proyectado en el Festival de cine de 1953. Mejoró la calidad de las gafas y el aspecto técnico del celuloide.
El 12 de octubre de 1.954 se proyectó en relieve "La carga de los indios". El Día de Santo Tomás de 1.954 "Hondo", de John Farrow. Y el 1 de febrero de 1.955: "El fantasma de la calle Morgue".
También legó la novedad de la pantalla panorámica, un 29 de febrero de 1.954 con el "Quo Vadis". Fue en aquella época cuando se cambió la antigua pantalla de 4/3 para colocar la que luego todos conocimos.
"Cada vida es un mundo". "Adorable coqueta". "Mujeres soñadas". "El mensaje de Fátima". "Solo ante el peligro". "El gran secreto". "Separación peligrosa". "De Madrid al cielo". "La dama de Trinidad". "El secreto del desierto". "Amor en conserva". "Moulin Rouge". "Lili". "Tres citas con el destino". "Retorno al paraíso". "El único testigo". "Cautivos del mal". "La reina virgen". "Los gavilanes del estrecho".
"La Señora Chesney". "Johnny Guitar! "Melodías de Broadway 1.955". "Romeo y Julieta". "Las señoritas del 09". "Locuras de verano". "La bella del pacífico". "Sucedió así". "Semiramis, esclava y Reina". "Hombres olvidados". "Luces de la ciudad". "El gran delito". "El bígamo". "Napoleón". "Calabuch". "Hoguera de odios". "Las maniobras del amor".
"Anastasia". "¡Adiós juventud!". "La gran jugada". "Pablo y Carolina". "La violetera". "Un rey en Nueva York". "La maldición de Frankenstein". "Rififi". "Yuma". "Un médico en la marina". "Orgullo y pasión". "Mon oncle". "Testigo de cargo". "Sayonara". "La gran prueba". "Al otro lado del puente". "Sin familia·. "El arbol de la vida"
EL AÑO 1.960 Y EL FINAL DE ESTE CAPÍTULO:
"Historia de una monja". "Río Bravo". "F.B.I. contra el imperio del crimen". "Molokai". "Furia en el valle". "La pelirroja indómita". "Rojo atardecer". "Cómo atrapar un marido". "La mano izquierda de Dios". "Juicio en las nubes". "Papá se ha enamorado". "Resurrección". "Un sombrero lleno de lluvia". "La quimera del oro". "El árbol del ahorcado". "Volverás a mí". "Drácula". "María matrícula de Bilbao". "La ciudad frente a mí". "La novia salvaje". "Misterio en el barco perdido". "Un rayo de luz".
Con los años el Miramar sufrió reformas y la nueva pantalla es ésta que ven debajo, dejando la sala muy diferente a su original.
El cinemascope llegó al Miramar el 11
de noviembre de 1.955 con "La zapatilla de cristal". En un sistema
panoramascope. Pero tardó mucho en proyectar habitualmente filmes en
este formato. El Miramar no estaba al par en proyecciones en cinamascope como el Príncipe, Principal, Bellas Artes y algunos más. Hasta el 25 de enero de 1.959, desde "La zapatilla..." no se proyectó otro filme en este formato: "Anastasia".
Antes, en 1.954, se estrenó la pantalla panorámica con el filme "Quo Vadis". Una pantalla mas ancha que alta; un sistema que ya se utilizó en los años 20 en noticiarios y en los 30 por cuestiones económicas y que revivió en los 50 como competencia a la televisión y entre el formato antiguo y el cinemascope.
LOS OPERADORES.
En esta segunda etapa los hubo y muy buenos. Don José Otaño al que vemos en el centro de la foto de bajo. Su hermano, Bixente, en la de abajo, hacia la derecha.
Debajo de Otaño se encuentra Indalecio Garzo de la Sade, que escribía de balonmano en la prensa, justo en la primera foto donde se encuentra José Otaño (al que se le ve la cabeza).
Ángel Garzo.
José Luis Antero y Javier Gorri. Peña. Alejandro Cabañas, operador y que era tambien Jefe de Tramoya en el Príncipe.
Alejandro Cabañas sentado.
Gorri
Y a finales de los cincuenta incorporaron sus proyectores Westrex 35/70mm (los mismos que en
el Savoy), que son los que duraron hasta el final de la vida de este cine que proyectó enormes filmes. Ello ya lo narraremos en el siguiente capítulo, en el triste final de su vida cinematográfica. Muy triste. El próximo capítulo habla de su época dorada (1961- 1987) y final. Conoceremos y recordaremos la sala, su pantalla, sus gentes y trabajadores y sus últimos días.
el Savoy), que son los que duraron hasta el final de la vida de este cine que proyectó enormes filmes. Ello ya lo narraremos en el siguiente capítulo, en el triste final de su vida cinematográfica. Muy triste. El próximo capítulo habla de su época dorada (1961- 1987) y final. Conoceremos y recordaremos la sala, su pantalla, sus gentes y trabajadores y sus últimos días.
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