miércoles, 3 de mayo de 2017

ÉL ME PEGÓ / LOS ÚLTIMOS DÍAS DEL ESTAFADOR


Hoy hemos asistido a una secuencia clave, pienso yo, en el trágico desenlace de "Alonso" ya inminente. El desencuentro entre "Alonso" y "Maroto", en "Haussman", a propósito del finiquito que no firma por el momento. Uno de los candidatos a llevárselo por delante.
En esta secuencia está escrito el desenlace de "Alonso", no la mano ejecutora; unida a la del bufete con "Quintero", marcan el inexorable final del crápula este. Creo que el "Marqués", irremediablemente, muere y tal vez a mano de alguien que se la tiene jurada. Es una opinión basada en una lógica: el personaje no puede ir a la cárcel, supondría un no cierre de historia; tampoco huido porque de alguna manera seguiría influenciando en "Marta" y ella no habría resuelto sus problemas conyugales; los habría agravado. Lo mejor y más tranquilizador sería que descanse sin paz en el infierno que creó como pavor al pecado, aquella iglesia tan carcundiosa.


"Maroto" lo odia y es un comunista muy peligroso y tanto más por lo que puede llegar a hacerle a "Alonso" que por las informaciones impagables que posee. "Alonso" dejó muchos cabos sueltos con él; le hizo ser cómplice de su vida enredadora y delictiva; lo ha despedido, él, personalmente, después de haber abusado de su confianza y hasta de cierta ingenuidad que mostró el "Capataz". Pero aún no ha reído el último; peor aún, todavía no ha muerto nadie. ¡Al loro "Marqués! Hay, como en las novelas de Agatha Christie, varios candidatos para ejecutarle. "Maroto" es uno de ellos pero hay algunos más perjudicados por este sujeto. El final será coral. ¿Quien es el ejecutor?


La secuencia ha sido acerada y amenazante sin que se apercibiera tanto un ultimátum de advertencia que estaba escrito en el rostro de "Maroto" ante una chulería de "perdonavidas" de un yuppie que no sabe con quien se la juega. Este comunista las mata callando y eso es lo que, esta secuencia, me estaba marcando para el final de este personaje que tanto ascos e ira levanta pero cuyo actor ha pasado el Rubicón de triunfar como "malísimo" y que le recordaremos por muchos años por su enorme personaje; por su muy acertado acercamiento a una época y a un modelo económico que continua aún vigente; porque ha hecho del cinismo y desvergüenza el arte de comunicar con el público; porque lo ha hecho muy bien y porque, personalmente, es un actor cercano y nada engreído que no espanta al público con su sectarismo despreciativo y aire de camorra para los que no piensan como él, como otros en la profesión. Es un "tío" encantador. Y sabe ganarse al público a pesar de llamarse "Alonso" el psicópata. ¡Suerte Miguel Ángel!



La secuencia de "Alba", escuchando tras la puerta la narración de una agresión hacia su hermana es brutal por dos motivos. Por la carga tensional de conmoción y rabia contenida que lleva "Marta" en su confesión in extremis a "Rosalía", de que "Alonso" le pegó, y por el ejemplo que puede trasladar a su propia vida sobre cómo acaban muchos matrimonios, nada elocuentemente; por cierto, un personaje, este de la madre, al que  veo muy flojo y gruñón y, en ocasiones, se nota su ausencia ya que nadie le cuenta nada; está como evadida, como si le hubiera dado un pasmo.



La secuencia de la tarde ha sido la entrevista entre un viejo abogado zorro y el otro zorreras de un infiltrado comunista. No me ha gustado ese aire un tanto sectario de la secretaria, "Nuria" y "Jaime" menospreciando a un cliente, aunque se llame "Maroto", por prejuicios hacia su persona y comportamiento indecoroso en alguna ocasión. Es evidente que no le quieren defender, aunque lo mejor sea coger el dinero y correr, como Woody Allen. Yo pienso que, los abogados o cualquier persona al servicio de los demás, no deben mostrar ese disgusto ante nadie ni hacerle de menos; otra cuestión es si deciden o no defender un caso. Es ese punto sectario que ya en los profesionales comprometidos con ideologías de progreso se veía venir; el guión se ha marcado un punto. Y hoy sucede en mucho peor. Se rechaza al que no es grato sin ningún miramiento y por ese camino se llega al absolutismo de ideas.



La entrevista entre "Quintero" y "Maroto" no ha tenido desperdicio. Se consiguen cazar más moscas con miel que con hiel. Es cierto, un comunista seducido hoy por un abogado al que espiaba en su relación para con el "Marqués" a través de un cuaderno; que encarceló a un inocente en la cárcel; colaborando con uno de la Social y un abogado ayudándose a sí mismo, pactando con ese revolucionario de poco fiar y al que le faltó poco para venderle. Y es que eso es política; todos juntos y revueltos a favor de sus intereses contra el mal que involucra en sus delitos a los dos por parte de la misma persona, el "Marqués". Una burla sobre el pactismo entre jefes de ellos mismos por el fin común de tapar, salir airoso de todo y vengarse. Como hoy. Desde luego ha dejado en mal lugar a sus abogados del despacho; mientras ellos se desentendían, abriendo las puertas interesadamennte al revolucionario de salón de empapelar, para traérselo hacia sí mientras era rechazado por los alevines del despacho y que tienen mucho que aprender del marrulleo entre castas sociales. Es una parábola de cómo funcionan los negocios y la política en este país.










Deliciosa secuencia, como todas en las que participan "Bruno" y "Blanca", interrumpida, parece ser, por un avinagrado padre que se lleva a la chica como alma en pena. Sagaz "Blanca" que descubrirá que "Benito" no ve un tigre a medio metro. 
Preciosas secuencias de requiebros sensibles y confesiones dolidas entre mujeres, "Fiona" y "Blanca", sobre las posibilidades que, aún, tiene "Blanca" se ser feliz con su hijo y "Rafa", ayudada por su familia.






Y la canallada que le prepara su madre no va a tener día y hora. Estamos en la semana del estafador. Los últimos días de "Alonso". Y esperando a que "Félix" se entere que su yerno le ha estafado.



4 comentarios:

  1. Buen resumen,y Rosalia que no se entera de nada por que tiene el peor de los defectos,querer saber sin dejar hablar,interroga en vez de dialogar con sus hijos.

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  2. Yo creo asi tambien Kala. Y creo que el que va a matar al marques en Rafa que se le ve pegando. Magnifico articulo

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  3. Precioso resumen yo ya no veo puente viejo y te sigo aqui desde que dejaste de escribir no me interesa era lo mejor

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  4. Por cierto se me olvidó comentar sobre la novela que pide "Blanca". Me encantó cunado lo leí. "Un hombre en el castillo", de Philip K. Dick. Es una novela alternativa de comienzos de los 60, de las primeras que se dieron cita en quellos años, que plantea un hipotético triunfo de las Fuerzas nazis del Eje en la Segunda Guerra Mundial y cómo se reparten los EE.UU de América, alemanes, japoneses... y demás gentuza. Es muy interesante imaginar que pudo suceder en un mundo donde Europa también fue derrotada y los japoneses y alemanes tomaban la costa oeste y este.

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