¿Recuerdas los mejores tiempos de Ariadna Gaya? Todo pasa y después se va diluyendo y cada día se olvida un poco más y más.
Metrazol, un inyectable mortífero para estimular el flujo cerebral y contrarrestar depresiones y que destruye el cerebro en grandes dosis que dejando de estimular te vuelven loco y agonizas entre convulsiones y perdida de consciencia. Galería de horrores cuya muestra son las fotos tomadas, espeluznantes momentos de los más duros vistos no ya en ESDPV, sin duda, sino en un serial de televisión. Yo mismo estoy aturdido ante tanta crueldad sobre la inocencia e indefensión de una pobre chica, espantado me encuentro, es que no acabo de asimilar lo visto esta tarde en el serial. Cuando su familia ha ido a visitarla, el cuadro no podía aparentar peor espectáculo, los guiñapos que quedaban de una bella chica arrojada y cuerda transformada en una desecho irreconocible a la que parecía que Drácula le había chupado toda la sangre y fagocitado el cerebro. Impresionante. El mundo en soledad de una mujer encerrada a la que un sádico le había profanado de modo miserable e inmundo.
Me puede parecer hermoso el titánico esfuerzo de supervivencia de "Aurora" (una grandiosa Ariadna Gaya) pero lo visto me ha revuelto las tripas. Deslumbra su interpretación pero aterroriza el macabro tratamiento de aniquilamiento al que ha sido sometida con todo tipo de detalles escénicos.
Momento gore cuyas vísceras son el cerebro que se desparrama en su cuchitril, casi un Psycho Killer sobre la vulnerabilidad humana con una grandísima dosis de angustia, un plato insano de despropósitos y un agobio ante los espasmos, gritos desesperados ante las consecuencias del tratamiento, en esa noche oscura y dantesca, que han quedado grabados en nuestra retina. Espantoso en verdad. Creo que debían advertir que hay secuencias que hieren la sensibilidad.
Momentos opresivos y macabros entre esa insalubre atmósfera cruel de los métodos de tortura que preveían los que llegarían con los nazis. Con una realización brutal, volcada de modo total y forma absoluta. Horror puro y crudo, un espanto. Todo es suciedad, muerte, sadismo y desesperanza. Unos instantes desquiciados que conllevarán mañana a "Conrado" a pegar al médico torturador.
Sí que quiero destacar la puesta en escena que es sobria pero magnífica, donde todo desprende olor a podredumbre en ese sanatorio infernal con una muestra de un doctor de lo más perturbadora que hacen imposible de olvidar cestos capítulos de ESDPV sobre la inmovilidad de una paciente y el horror que padece.
Sé que habrá muchos detractores del capítulo de hoy. ESDPV ha apostado por el gore, la inquisición y lo macabro. Arriesgada apuesta por el terror en estado puro. Muy adecuada para el fan del slasher o del horror movie, por su infernal crudeza expresiva, por lo malvado de su propuesta y por la bestialidad de lo que vemos.
Pone la piel de gallina, hiere la vista, violencia extrema,descuartizamiento mental, como queda un ser normal bajo los inyectables y tratamientos de un cirujano matarife del espanto, ese final abocado a pobres pacientes en ese sanatorio-matadero donde las razones de la mente quedan esparcidas por entre las paredes y los suelos de las cámaras de aniquilamiento. Con un Juli que interpreta a un "monster freak" inolvidable y al que un día le van a dar alguna mala contestación en la calle.
Ha sido tremendo y no me canso de decirlo y llegan momentos aún más violentos y explícitos. Interesante como documento de un tiempo y de un modo de hacer televisión que, aunque no es cine, sí que refleja una realidad lacerante y aniquiladora del ser humano que se vivió en España.
No se comprenden estos capítulos en muchos espectadores, lo respeto. Pero reconozco que el género de terror y sadismo es aborrecido y muy mal comprendido. Incluso se tacha de locos y psicópatas a quienes le gusta. Para crearlo hay que tener mucha sangre fría, no debe confundirse con la pornografía, hay que tener una mente inteligente para darle un creíble efecto de temor y miedo para que no desentone o sea muy rechazado. parece como si en un serial deben solamente verse lances de amor y que, ello, se valora más. Pero ver a este psicópata del metrazol es muy instructivo aunque ya digo que debía advertirse de lo que vamos a ver en cuanto a imágenes abrasivas.
TRISTE ADIÓS A BLANCA PARÉS
Este es otro cantar. Había que darle una lógica tranquilizadora a los "Mirañar" cuando Blanca Parés ya dijo que se iba de la serie. Se evaporaba la trama tragicómica de estos geniales zumbados porque un "Hipólito" muerta "Quintina", unos "padres", no resistiría tanto cachondo surrealismo que es para partirte el trasero de risa y para llorar también por los tontos desbarajustados. La solución, respetando la imaginación de los guionistas y sabiendo que han obrado con la mayor ingeniería ante el abandono de Blanca, está causando estragos en el personaje, porque era lúcida y tierna, y sabía donde se encontraba el justo límite de la cordura sobrepasada por su familia majara. Lo que vemos ahora es tremendo, es casi tan horrendo como lo del manicomio aunque no lo parezca. No dan ni ganas de mencionarla porque vamos a perder amistades. El guión es el mejor posible pero es patético ver a la chica con el oremus desfuncionado. Tejiendo un jersey amarillo de tres brazos que es una chirigotada de muérdago, con sus diálogos vergonzantes sobre el sisar y la canalla del pueblo. Con su risa mongui. Es que da una dentera inconmensurable y una tristeza para no levantarse de la cama. ¡Fuerza y honor! que falta nos hace. Estas licencias son de los "Mirañar", en "Quintina" resultan muy tristes. Y los guionistas no tienen la culpa porque es la única solución no traumática al problema de la partida de Blanca.
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