Valiosa secuencia la de esta tarde cuando se abre la caja, fuertemente lúgubre, con esa imagen expresionista en el rostro de Yara, escasamente iluminada la estancia dominada por esos colores fuertes por donde trama el monstruo y en contraposición con los delicados efluvios de inocencia que marca el salón y su vanguardista Art déco y su croma suave; una secuencia de alto valor estético que intenta mostrar una parte del misterio en el que anda envuelto ese hombre taciturno, oscuro y dominado por un pasado que se guarda celosamente en la caja, confiere todo ello un valor trágico e inquietante de indudable interés. Por suerte hablan las imágenes y los actores y no un guión condenado al fracaso porque no está trabajado. Detrás estaba la fascinación que produce una foto; sobre la intranquilizadora presencia de tres personas; y la turbación que produce, al estilo de "Dorian Gray" y de resuellos del filme noir que se fotografían en ella, que por cierto tomó mucho del Art déco y de sus círculos envolventes y que tanto usaron Fritz Lang en sus clásicos negros de intriga y Stanley Donen, más recientemente, en algunos filmes de los 60 como "Arabesco" o "Charada".
Me gusta mucho esa sensación del tiempo que parecerse pararse en "Los manantiales", algo que cuesta entrar en ello para algunos espectadores; realizado sin elipsis, sin espacios inútiles y débiles (esta tarde en la secuencia de la preparación de la fiesta), con una relajada elegancia, mostrando un gran detallismo expresivo en los actores y desnudando un alma por la que no pasa la existencia y sólo parece habla el pensamiento en personajes gélidos y atormentados.
Es una trama culta aunque no está exenta de un aire imprescindiblemente comercial. Esta tarde me ha atrapado esa brumosidad que surge una foto en sepia en la que está atrapada una mujer y dos niños del pasado, posiblemente ella ya fallecida, que remueve de modo mágico y siniestro el tiempo presente. Y es que en esa casa, a pesar del diseño interior vanguardista de la moda de los años 20 (que por cierto contrasta con la trapería barata con la que le han decorado a la tienda de moda), sobrevuela algo enfermizo y traumático. Coexiste algo opresivo, tóxico y de raíz expresionista. Y me va gustando esa relatividad moral de los personajes, de la que hablaremos otro día, entre sordidez y sentimientos ocultos, el sosiego con el que un insociable "Hernando" se toma las relaciones de su esposa, parece gozar suponiendo; de la falsa equidistancia entre la verdad y mentira y del bien y mal; valores añadidos pero que hacen referencia cómo se muestra en pantalla el guión que es muy flojo, aunque no estúpido como el de otras tramas.
Ángel de Miguel sabe deslizarse en cómo interpretar esta carga onírica de la trama. Mantiene la tensión que él controla en sí. Tiene gran habilidad para trazar y sumergirnos en la trama en breves instantes, casi se corta con un cuchillo ese su infierno traumático que lleva dentro.
Maravilloso Jose Ignacio. Que finura y delicadeza conocimiento de la serie tienes.
ResponderEliminarEstoy totalmente de acuerdo con Maite. Es una maravilla leerte..
ResponderEliminarJose Ignacio es una buena noticia tenerte aqui entre nosotros, de los que vamos quedando con la serie porque muchos han dejado de verla.Tus cronicas simepre me han encantado. Besitos
ResponderEliminarEres el mejor Iñaki en casa te leemos mi marido y yo siempre y es mejor que la serie. Sabemos como se portaron contigo pero tu les has demostrado que eres un señor con mayusculas.
ResponderEliminarJose Ignacio hay una pagina de face en la que estaba tu articulo y lo han quitado y ya varias veces. Los quitas tu?
ResponderEliminarNi idea Raquel. Pero tampoco me extrañaría. En mi experiencia en escribir sobre la serie y algunos muros ha habido gente que es la primera en leerlos pero los borra para los demás. Nunca he querido hacer la competencia a nadie y siempre he creído que algunas personas con su dictadura han hecho daño a la serie porque hay absolutismo y dictadura y no dejan la expresión libre. De todos modos este artículo lo han leído casi 1800 personas y lo que escribo lo hago para el que quiera leer aunque no me tenga simnpatía. Tampoco lo voy a hacer diariamente pero sí que sobre Los manantiales centraré mi crítica siempre que la haga.Muchas gracias!
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