martes, 25 de octubre de 2016

NICOLAS ORTUÑO DETECTIVE PRIVADO

 

Sencillo momento que tiene su pequeña calidad e intriga; eso que podíamos llamar complot y que lleva un cierto suspense sobre la personalidad de ese macarra oscuro que es el cubano "Nestor". Tenía un toque a radioserial matutino de detectives, para muchos que tengan una edad podrán recordar, protagonizado por Eduardo de la Cueva y la inigualable María Romero. Un poquillo de intriga, algo de seducción en la astuta propuesta de "Hernando" y un momento agradable que tal como está la serie por lo menos algo nos podemos tomar en serio.


Yo me sigo preguntando cómo marean a Alejandro de un lado para otro sin ubicarse en la serie. Da como si, al marcharse Carlota, se quedó él sin papel pero con contrato a cumplir y le andan recolocando; por cierto tiene más caché que antes y mayor atractivo dramático. Por cierto, Alejandro como Eduard Alejandre, son de las mejores personas que han pasado por la serie.


 
Y me ha gustado mucho, en la sencillez de la secuencia, ese entrar en el lado oscuro de la realidad, típico del cine negro, su lenguaje seco y conciso, esa mezcla de intriga y espionaje que tanto nos gustan a algunos. Un sutil "Hernando" y un lacónico "Nicolás" han protagonizado esta tarde un pequeño teatro sobre cómo das pasos para la resolución de una historia que parece muy turbia, enrevesada y compleja. ¿Que puede haber detrás de un hombre que oculta su pasado y presente? Algo probablemente situado en los matones y el proxenetismo,  el crimen, la mentira, el chantaje y el asesinato. Es una pena que se hayan deshecho de la trama gótica de "Elías" para hacer una astracanada con esta historia de personalidad perversa y cruel, descafeinada y folletinesca. Lo de "Elías" fundía expresionismo y realismo. Era una experiencia mental surrealista destinada a mostrar y explicar el mundo interior de un vampiro psicópata. Pero los horteras de los guionista y la mala cabeza de algunos más por encima de ellos, han convertido,  a "Los Manantiales",  en una parodia de cine negro, un refrito de culebrón e insulso serial irrisible, un melodramático soporífero y previsible.







No hay comentarios:

Publicar un comentario