Antes de nada, me ha sorprendido esta tarde la desinformación del canal
24 horas de la TVE. El canal de la televisión, con conexión directa, incompresiblemente,
desconocía lo que sucedía en torno al desalojo del metro de Oxford Circus, en
pleno centro comercial londinense, mientras todos los medios ya daban la
noticia tremenda de un tiroteo terrorista. ¿A qué viene este enrtedo sin alguna base?
Era chocante seguir las imágenes que proporcionaban desde Londres, policías desalojando
apresuradamente a las personas, gentes llorosas que salían del metro, los
mismos agentes de Scotland Yard pidiendo a las personas no se quedaran en la
calle y que se resguardaran de algún local, y el busto parlante de 24 Horas y
el corresponsal (que por cierto no sabe hablar), ni idea de lo que sucedía.
La
misma policía, ante la huía de la gente, coordinada por los propios agentes,
decía desconocer evidencias sobre que algún tiroteo hubiera sucedido. ¿De qué
estamos hablando entonces? Dos estaciones cerradas: Oxford Circus, Tottenham
Court Road y Bond Street. Los trenes ya no se detienen en esas paradas. Gentes en estampida que juran se escucharon
disparos o había fuego en el interior, algunas en su rostro reflejaban que algo
les había impactado mucho. Y la policía
y el Canal 24 Horas no saben nada. Tranquilidad mientras vehículos de
emergencia se dirigen y llegan a la zona. Nada de lo que se se podía contemplar por la televesión era real; un simulacro.
Si no hay víctimas, atacantes, ni fuego, y todo es normal: ¿Por qué la
muchedumbre abandonaba llorando la estación del metro? ¿Qué habían visto? ¿A
qué asistieron si se encontraban en lamentable estado psicológico. ¿A nada? No
me lo puedo creer. No hay disparos, sospechosos, víctimas, la calma reina y la
tarde de compras continúa plácidamente en un entrañable ambiente prenavideño. O
sea que ¡Muévanse! o ¡Váyanse! No eran por nada. Y ese hombre que ha entrado en
la tienda Zara de Oxford Street con un arma y todos los clientes fueron sacados
del establecimiento…. ¿Tampoco es nada? ¿No ha habido disparos en Oxford Street
esta tarde? ¿La policía no ha sido convocada a las 16,38 horas tras informes de
disparos bajo tierra en esa estación? La periodista de la BBC que informaba que
vio esa huida de personas, saliendo apresuradamente del metro y que hablaban de
disparos se equivocó? ¿Todo se ha tratado de una sugestión colectiva y la
policía ha incurrido por nada en un excesivo celo? Que no está mal, la
seguridad es la seguridad, pero siempre que nos expliquen a qué se debió y qué
provocó el despliegue. ¿Y las estaciones se abren a las 18,50 y nadie sabe lo
que sucedió?
El cantante Olly Murs, testigo de lo ocurrido, habla de disparos. Que
yo lo creo. Que la gente gritaba y salía corriendo. Los bomberos, incluso,
fueron alertados a las 16,39. Gentes que se han escondido en sótanos y, todo,
alarma injustificada por un pánico inventado en Oxford Street.
¡Qué buenismo! ¡Cuánta delicadeza! ¡Que seguro me siento! Hasta nos
desalojan por nada! ¡Qué eficacia! Es evidente que esta Europa es refugio de
terroristas y se está desangrando ante la desidia general y la manipulación gubernativa.
Parecen memos los de Scotland Yard. Habrá sido un petardo de este viernes de
gastar más de lo que se ahorra. Pero es que ni tan siquiera una falsa alarma de
un perturbado, ni eso. Ni un caso aislado. Nada. Se corta todo por ausencia de
incidentes reconocidos como tales pero que no lo eran. ¡No existe mayor
felicidad posible! Ninguna estampida, se equivocaron los testigos, el pánico
era sugestivo, y ante todo la sospecha de que todo esto pueda ser ya un ensayo
para actuar contra Europa en estas navidades.
Semejante despliegue casi como producto de un error de apreciación de unos ciegos y sordos que ni escuchan o ven, entre ellos la policía que no me parece muy de fiar la verdad sea dicha. De lo contrario: ¿A qué viene
mentir desvergonzadamente a la población de este modo tan descaradamente
manipulado? Luego, cuando muchos piensan que todo esto, de algún modo, está
subvencionado con dinero público y tolerado por organizaciones regadas también
del dinero de todos, se enfadan. ¿Qué hay que pensar ante lo no-ocurrido esta
tarde y la desproporcionada reacción ante ausencia de todo?
Podemos ir a dormir tranquilos porque nada ha sucedido. Ha sido un “incidente”
que no es ni “incidente”. Es tratado por la misma policía algo como “terrorista”
que no es ni “incidente”. ¡Paradójico! Oxford Street ha sido un requiebro de paz
en esta apacible tarde de compras de Navidad.
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