Todo esto y lo que mañana se seguirá narrando, está en Sumario. No juzgo. Pero es un caso que apesta. Las víctimas, para que su supuesto depredador pague una fianza sin pasar por la cárcel a pesar de los delitos enormes que se le imputan, deben de pagar dinero con otra fianza.
Vídeos repugnantes colocados en la Red a 14,95 euros. Muy difícil escenificar en nuestra cabeza, en imágenes, lo que ha padecido con tanta dureza, una víctima sexual cuando cuenta su calvario. Cuando una víctima sexual narra lo que le sucedió, su propia palabra hace prueba en si misma. Ello, añadido a las imágenes, es insoportable para quien lo ve. Son víctimas reales, no supuestas. Hay muchas pruebas contra todos los denunciados. No comentes, ello, a nadie en la Ciudad. Todos huyen. No es una conspiración, si ello resultara condenado, se trataría de un delito. Si son pederastas, y si se puede, con esta justicia, que sean condenados.
Vídeos repugnantes colocados en la Red a 14,95 euros. Muy difícil escenificar en nuestra cabeza, en imágenes, lo que ha padecido con tanta dureza, una víctima sexual cuando cuenta su calvario. Cuando una víctima sexual narra lo que le sucedió, su propia palabra hace prueba en si misma. Ello, añadido a las imágenes, es insoportable para quien lo ve. Son víctimas reales, no supuestas. Hay muchas pruebas contra todos los denunciados. No comentes, ello, a nadie en la Ciudad. Todos huyen. No es una conspiración, si ello resultara condenado, se trataría de un delito. Si son pederastas, y si se puede, con esta justicia, que sean condenados.
Hasta la semana pasada no se ha hablado en Donostia del “Caso Kote
Cabezudo”. Toda la Ciudad ha visto el vídeo de Miralles. La prensa donostiarra
que ha contado hasta el nombre del pederasta más grande de la iglesia, cura o
arzobispo, aquí, miserablemente, se ha callado. Hace unos meses nos dieron la
tabarra con el “Tatuador de la Parte Vieja”. Hoy, nada, silencio sobre el
privilegiado Kote Cabezudo. La diferencia es que ya, el “Tatuador”, está en la
cárcel y Kote, feliz y encima enseñoreándose con la prensa que se ha atrevido acontar algo.
Hace unas semanas la Ciudad tildaba de “hijo de puta” al “Tatuador”. Hoy,
encerrados en sí mismos, los habitantes te responden que “algo saben de ello”,
que “creen en Odón Elorza”, “que esperan conocer qué queda de todo esto”,
son cómplices de una supuesta ignominia. Se le hiela a uno el corazón. Nadie del
monopolio de la prensa donostiarra lo ha contado pero la Fiscalía General del Estado
tiene en su haber una denuncia contra el fotógrafo Kote Cabezudo, de ocho supuestas
víctimas por pornografía, abusos sexuales de todo tipo y violaciones, contra el
mencionado fotógrafo, denuncia que ha habido que acudir a Madrid para interponerla
porque el propio fiscal de la causa, Bermúdez, recomendó al abogado Mario Díez
Fernández, acudir a la Fiscalía del Estado, ante lo que se estaba retardando y
obviando en Donostia, en favor de Kote Cabezudo. Una juez y una teniente fiscal,
ralentizaban el sumario. Consta en la denuncia el nombre de políticos de varios
partidos, jueces, empresarios, agencia de modelos, periodistas. Hay dos
denunciantes más, además de los querellantes, y testigos que no presentan pero
que se avienen a declarar si es necesario.
IMAGEN DEL ABOGADO DE LAS VÍCTIMAS
Es sin duda, por la edad de algunos denunciantes, por el número de
personas supuestamente implicadas y la relevancia de las que son implicadas en
la denuncia, por la narración repugnante de lo que se les obligaba a hacer a
los chicos y chicas adolescentes muchos de ellos, uno de los más grandes escándalos
de supuesta pederastia en España. Un extraño silencio cómplice de todos los medios
donostiarras en torno a esto, pero que va saliendo ya a la luz con gran cantidad
de kilovatios en las últimas semanas. ¿Qué van a contar estos medios si están
subvencionados por partidos y personas de ellos que están en la denuncia o
periodistas compañeros de ellos? “La Tribuna de Cartagena” “Sin Filtros", Mario
Díez abogado y Melchor Miralles han sacado a la luz pública algo de lo que, a Sotto
voce, con pánico, mirando siempre alrededor, encerrado en un ataúd, se comentaba en San Sebastián.
Cuando se habla de pornografía infantil, nos referimos siempre a la
misma en términos jurídicos, sobre lo que se considera pornografía infantil en
el Código; menores de edad exponiendo genitales en actitud sexual real o
simulada. Aunque niños no hay en foto, la pena es igual si se trata de niños de
corta edad o de menores de edad, adolescentes, como es el caso.
Todo comenzó como un posible delito de estafa, de publicación en
portales de pornografía y a partir de ahí comenzaron a aparecer casos y más
casos con supuestos delitos. Kote Cabezudo, dentista, cambió los dientes por
poner los dientes largos a algunos tarados de por ahí. Mimado por el Régimen de
fuerzas vivas donostiarras, muy bien relacionado, que pasó de la fotografía
artística a la comercial, erótica y pornográfica. Subvencionado por su
significado de fotógrafo oficial del establishment donostiarra. Y dieron
nuestra pasta a supuesto material pornográfico, algo inaudito en una ciudad
española, para talleres de fotografía, exposiciones, conferencias en aulas de
medio de prensa, actualidad de moda, entraba de lleno en los eventos artísticos
de provincias. Parece y así consta que se atravesó el umbral de lo erótico,
digno con mayores de edad, pasando por lo pornográfico para acabar en la
delincuencia sexual.
¿Cómo llegaban las víctimas a la vivienda y estudio de Kote? A través
supuestamente, según consta en la denuncia, de la agencia First Model en un 90%. Chicos y chicasque anhelaban triunfar. Debían dirigirse a la
Agencia y el propietario te pedía presentar un book y te mandaba a Kote. Melchor
Miralles preguntó en una ocasión a este señor ¿Cómo podía mandar a jovencitos,
a niños y niñas de 12, 13, 14 años a las manos de Kote? El propietario contestaba
que sí, que le habían dicho era raro, que si quítate el cinturón, desabróchate el
botón, que si te rocío con aceite; y ello, esa conducta, parecía normal a Iñigo.
Yeste propietario siguió mandando niños y niñas y se le encontraba siempre en todas
las pomadas de este basurero.
En octubre del año 2015 se denunciaron los vídeos por parte de una
víctima. Ahí siguen. En el juzgado se presentaron denuncias de supuesta prevaricación
contra la magistrada y teniente fiscal. Se denunció en la policía nacional, con URL
y links pornográficos sobre violación ya sobre los 14 años; policía que envió al juzgado un atestado sobre los vídeos, que no era sino la denuncia y no el obligado “escrito de querella”. A
pesar de ello nadie ha pedido quitarlos. En cualquier protocolo de abusos, tras
denuncia, te meten en la cárcel; aquí, los vídeos continúan, hay que poner fianzas para denuncias, se
persigue al que pone los vídeos y lo demás se congela lacerando a las víctimas.
Sin mayores diligencias de averiguación que se encontraban en la URL donde las
víctimas eran las tristes protagonistas de la villanía.
La magistrada, Ana Isabel Pérez, sin detención, algo extraño en estas denuncias y tan documentadas, pidió una fianza a Cabezudo de 25.000 euros, siempre y cuando las víctimas depositen 3.000 euros. ¡Dile a una víctima que tiene que pagar para que su presunto depredador cumpla con lo solicitado en el Juzgado de Instrucción 4 de Donostia!
¡Qué vergüenza!!
ResponderEliminarMagnifico articulo Jose Ignacio...Esto es una verguenza!
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