El país quiere elecciones y que se vayan los golpistas.
Quien crea que este gobierno es “de los míos” “que hemos llegado” y que
la progresía ya está en el cambio gubernamental, está muy equivocado. Este es
un gobierno golpista, ilegítimo, preparado por Soros y toda la ralea ultra del
país que, aprovechándose de que el poder no lo conforma un ciudadano en
libertad política y sí las oligarquías de los aparatos de los partidos,
urdieron este golpe que es como el 11-M, pero sin fallecidos criminalmente
asesinados. Pero es que el cambio no es el que pregona la cara dura de
Echeminga pero sí el del ir trincando. El cambio ha sido apoderarse de las
instituciones, enchufar al mayor aparato vividor de nuevos altos cargos, subir
bestialmente los impuestos a todas las capas sociales sin excepción, no
solamente a los bancos y empresas sin repercutir en los clientes y disparar aún
más el insostenible déficit el mayor de la Eurozona. De eso va el golpismo.
Rechazar la intervención de Europa apartándose del objetivo de déficit marcado
por Bruselas en 2017. Y gastar más, mucho más entre los míos, para que Europa
no intervenga, mientras controlo los órganos de poder repartiéndolos entre la
chusma.
Así se despilfarra, se enchufa a todos sus lameculos, no se da
explicaciones a nadie, sin oposición, sin democracia, sin elecciones, golpismo
chavista puro y duro, usurpando cargos, saqueando al contribuyente, sin
posibilidad de defensa de la sociedad civil ante este atropello golpista en el
que, al fin, ha acabado el Estado de Partidos. Somos los rehenes de unos
sinvergüenzas cuya razón de vivir políticamente es apoderarse de las
instituciones, desalojar a quienes no comulguen con ellos, perseguir la
opinión, regar millonariamente a sus esbirros, enfrentar a los desvalijados
súbditos, inocular un odio mortal y un ansia criminal de reproducir un
escenario de la preguerra civil para ganar ellos la nueva guerra mientras
gastan como sanguijuelas nuestro dinero y despilfarran la riqueza de los dignos
trabajadores del país. Sin Estado y sin Jefe de Estado que está ausente (Felipe y su flagrante incumplimiento de sus más sagrados deberes
constitucionales le inhabilitan ya como Rey de todos los españoles), sin
oposición, sin ejército, sólo con la persecución a quien se mueva, iremos al
desastre.
La insaciable vividuría no cesa. Pedro Sánchez en un mes, ha obsequiado
con cargos y sueldazos a los integrantes de aquel grupo con el que, contra todo
pronóstico, logró vencer al aparato, con ocupación hoy de puestos de relevancia
a cargo del erario público. Sánchez, quien como presidente del Gobierno percibe
79.756 euros al año en 12 pagas. Los enchufados y sus sueldos son: Adriana
Lastra, 5.000 euros brutos al mes; José Luis Ábalos, 6.000 euros brutos al mes;
Manuel Escudero, 10.000 euros brutos mensuales; José Félix Tezanos, 97.475
euros al año; Alfonso Gómez de Celis, 96.058 euros al año; Josep Borrell,
76.323 euros anuales; Francisco Salazar, 90.000 euros al año; Meritxell Batet que
cobra en el ministerio casi 80.000 euros al año. Santos
Cerdánque cobra casi 4.000 euros netos al mes; Susana Sumelzo, su sueldo, según
consta en la web del Congreso, 5.218 euros al mes. Estos son los socialistas
ramplones de nuestro sudor.
Toda esta gentuza ha llegado El señor Sánchez está donde está gracias a
las dos deficiencias golpistas urdidas en la nefasta Transición. La política autonómica
y su sobredimensionamiento representativo, que muchos denunciamos hace años, y las
leyes electorales de oligarquía de partidos. En manos de la maquinaria
independentista y de los corruptos partidos. Aquellos que jamás se sacian, que
sólo quieren más y más y más que aquel, restando y odiando racistamente
siempre, aportando odio y confrontación la confrontación. La naturaleza
corrompida de quienes eligieron al golpista Sánchez determina el estercolero
socialista en el que está involucrado todo su cómplice partido. Ha sido el
chavismo, seguramente subvencionado por Maduro a través de Zapatero, es el miserable
partido socialista unido a los que quieren y desean destruir el país al estilo
Soros.
No se ha necesitado en esta ocasión llegar al poder mediante una
conmoción social ante un hecho cruento. Este sinvergüenza, avariento de poder
que sabía nunca lo alcanzaría por las urnas, enfermo y loco mentiroso
patológico, políticamente falto de credibilidad, rechazado elección tras
elección, llega al poder sin pasar por
las urnas y se aprovecha de un cargo que debe ser transitorio, en su
oportunidad única, para Gobernar un país hasta que le de la gana. Este no se va. La desvergüenza es algo intangible, pero existe
en Pedro Sánchez intercambiando hasta las instituciones en un mercadeo ilegal e
ilegítimo, para mantenerse en el golpe que ha dado con todos sus titiriteros. Y haciendo millonarios a sus compinches
Espero sea un día detenido por su descarado asalto al poder, por su
indecencia política y por su patológica ambición a hacerse con el poder usurpándolo,
sin elecciones, y por su estrategia política de un repugnante PSOE que apoyó el
golpe como única forma de gobernar, pactando con todos esos partidos
minoritarios, que tampoco nunca gobernarían, pero que juntándose todos en la
manada de Sánchez “pueden pillar". Podemos, ha comenzado ya a colocar a su
gente loca en RTVE y en puestos de mucha importancia mediática. Catalanes y
vascos, conocen la ambición desmedida del más corrupto de todos los partidos
europeos: la PSOE, que es capaz de vender a su madre y familia con hijos
menores para traicionar a España, y que les va a dar lo que pidan. Y La ETA por
lo mismo que el PNV, y como agradecimiento por haberlos legalizado y porque
saben que los socialistas sacaran a los asesinos de la cárcel. Espero sean
detenidos todos los golpistas.
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