ACTORES DE LA TARDE:
IVÁN MONTES (SU DEBUT COMO EL PROTAGONISTA DE UNA TRAMA), MARÍA BOUZAS, RAMÓN IBARRA.
CON: RAUL PEÑA, CARMEN CANIVELL, SELU NIETO, MARÍA DE NATÍ
Una preciosa secuencia que mezcla desde un reencontrado romanticismo forzado en ella, un plácido acomodo en él en la senectud de los protas. Controvertido y atrevido momento que no se suponía que un día podía llegar; repleto de sensibilidad; mezcla de anarquismo de amor domesticado y engaño (una explosión cuando estalle); con una notable actuación de los dos actores: María y Ramón.
Tierno trance rural, de acomodado costumbrismo amoroso, que es toda una alabanza al conocimiento del disfrute de la vida, el encuentro de la senda perdida entre la molicie de una plácida relación otoñal, donde él encuentra una señorona que le domina y mangonea y que le transforma en un calzonazos anulado de personalidad. Muy bien dirigidos los dos actores en esta bovina fabula de la domesticación de un falso existencialista que, en cuanto suena la campana, corre a refugiarse bajo las falduncas de aquel amor que ya no existe aunque sí que queda la ternura y el recuerdo de los viejos tiempos.
Idealismo puro rural, bucólicos momentos de pasar de todo y dejarse llevar en él y una dominación más sibilina en ella que sigue llevando los pantalones bien puestos. De lo poco que queda ya de aquel añorado ESDPV que valga la pena: la vida entrañable y deliciosa de estos dos ancianos que saborean de los pequeños placeres reencontrados que les ofrece la vida de adultos entrados en años. Parecen los dos que rebosan humanidad aunque seguimos dudando de "Francisca". ¡Fuerza y honor a estos dos veteranos de ESDPV!
A algunos les habrá conmovido el alma hasta las raíces. ¡Que poco queda de aquel ESDPV!. Esta tarde en la secuencia del encuentro entre "Matías" y "Prado" hemos visto la tenue sombre de aquel otro juvenil y presumido encuentro de una chiquilla, "María", con "Gonzalo", cuando llegaba este a PV. ¡Que época! Todo aquello que nos retrotrae no tanto en el tiempo pero que marcó muy hondamente a nosotros los espectadores de esa época. Los que vimos aquel ESPV y anterior, no sentimos ahora esa emoción que nos sangraba cuando aparecían por primera vez aquellos inmensos e irrepetibles: Megan, Álex, Loreto, Jonás, Alejandra, Jordi, Rubén y Ariadna que ya se ha ido. Cierto es que el encuentro nos muestra a un chico, Iván Montes, que se está haciendo un hombre en la interpretación y que ya esta tarde ha sido su debut como actor con rango de llevar las riendas de una trama. Iván se lo ha trabajado mucho, tiene fe e ilusión a raudales y hay que reconocerle un embrujo especial que en poco tiempo ha cuajado más que otros jóvenes del serial que ya pasaron y que nunca alcanzaron tanto en tan poco tiempo, ni dejaron la huella que imprime Iván ya en la historia de ESDPV.
Aunque la secuencia principal ha sido esta de la que ya hemos hablado. Por su fragancia a juventud marchita que han sabido imprimir los dos actores. Olor a amor en el campo que permanece inalterable frente al desgaste de las pasiones y el envejecimiento de los humanos. A sabor de besos entre orillas semiocultas de un río testigo de generaciones que fueron pasando y de cómo fueron devorados sus enamorados por la vida que se acaba. Amantes anhelándose entre los sonidos de la cascada, el gutural croar de las ranas, el estimulante olor de la flora en cada estación de un río, aquella época bucólica que hoy se encontraba encriptada en la secuencia que conservaba el olor, los sonidos y las sensaciones de los lugares que parecían más grandes y eran el paraíso de aquel amor.
Gracioso momento con esta renovada Carmen Sevilla que nos han traído a PV. Sevillanas, alegría de vivir y Feria de abril en PV para calentar la libido empalmada de "Hipólito". Una veta surrealista, "Gracia" bailando en el "Colmado". Marcando los pasos salerosos del arte andaluz, una atracción por la tierra que muchos aman que han tenido un puntazo de magia y majeza sobre todo en ese inicio de baile superrealista que incitaba las pasiones más cachondas y humanas del pobre "Mirañar".
Secuencia de una televisión que añoramos y momento inaudito en ESDPV. este protagonizado por Raúl Peña. Escena de peleas muy bien resultas, si misterios o excesiva violencia, casi reales y muy entretenidas además de justicieras. Un goce de pelea. Resuelta en un santiamén. Didáctica de cómo se tiene que resolver actuando forzosamente cuando alguien te agrede.
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