CONFESIONES DE UN ASESINO

Antes de nada felicitar a Raúl Peña, hoy de lo mejorcito en la serie. De hecho, como ocurre con Jaime Lorente en el teatro, Raúl hoy triunfando con "Our Town" en el Teatro Fernán Gómez con el actorazo Eduard Alejandre, aquel "Cyrano/Doroteo" increíble y que ha sido de lo mejor de ESDPV. Su confesión, la de "Carmelo" esta tarde ante "Severo", ha sido antológica aunque fuera tan breve y casi de pasada que por ello no ha desmerecido. Por otro lado parece que  la inmortal "Rosario" se marcha ya de la serie (algo que parece imposible pero su personaje estaba ya amortizado y Adelfa lo interpretaba a desgana), es la tercera baja de la serie y tal vez una cuarta, ya que parece que en "Miel Amarga" hay duelo, aunque no creo que Aída de la Cruz se vaya de la serie. Y respecto a Ignacio Montes, mostrar que nunca le creí cuando el 24 de noviembre prometió "rotundamente no era hijo de "Hernando", en "Noticias", y que tenía "vínculos con otro personaje del pasado que no se sabe si volverá". Todo mentira. Es el hijo de "Hernando", como en este muro lo hemos sabido desde siempre (le llamamos el "Damien" de "La Profecía") y el personaje con el que tenía vínculos es "Elías", desgraciadamente ejecutado por los guionistas sin previo aviso. Un actor no puede debutar en la serie con esto. ¿Cómo se permite un recién llegado jugar a equívocos así con el espectador? ¿Es una broma? ¡Oiga! No debe de contar nada y menos lo contrario; ni si es o no es hijo. Ni para desvelar o despistar. Antes, ello estaba prohibido. Ingenuo el que pensara que los guionistas tuvieran algo más de imaginación que no supusiera emparentar al padre con el hijo. Eso es simple y de folletín de saldos de enero. Y la confesión que se ha adelantado hoy, respecto a "Ismael" ante su padre, me ha dejado estupefacto por su pésima interpretación. Verle gimotear es llorar de pena. ESDPV será una serie para divertirse pero no por ello debe estar reñida con la seriedad. No todo vale. ¡Y para esto dejaron marchar a un actorazo, uno de los más grandes malos de ESDPV, como Jaime Lorente! ¡Y a comer turrón!

Al estilo de Hitchcock, ha sido la grandeza interpretativa y la hondura dramática que sabe imponer este buen actor como Raúl Peña en una serie que va en ocasiones de exagerados registros no creíbles, lo que me parece enorme.Me ha emocionado la belleza de la confesión truculenta de su asesinato; su impotencia para dominarse; como cayó en la trampa urdida por un despreciable "Garrigues"; su honda confesión arrepentida y ya sin remedio; unido a la expresividad dramática de su rostro compungido; el fulgor afligido y penitente de su mirada hacia el cielo en algún momento, ante un atónito "Severo".

Un momento estremecedor y angustioso y que nos transmite la misma sensación de desesperación que va sintiendo el protagonista. Reconcomido, abatido y contrito sin esperanza de perdón.

Tal vez no haya sido una secuencia que se haya apreciado como yo la he estimado, pero ha sido un modelo de inteligencia y versatilidad interpretativa de Raúl ante un Chico que escuchaba, que ha sabido crear una tensión apabullante que ha asfixiado todos los teleespectadores y al otro personaje.

Al final quisiera aclarar una cosa. Me guste más o menos o nada, yo soy el que decide ver y comentar la serie.No es cierto que siempre la he puesto mal. Yo he escrito un libro, llevo varios años escribiendo cada tarde y creo que he destacado lo buenísimo casi siempre y los malo o peor cuando así lo entendí. Y le quiero responder a una lectora que me ha acusado de hablar mal de los actores a nivel personal, que ello es incierto. A los actores los juzgo en su interpretación, jamás en su vida privada o insultándoles. Lo que no hago es hacer la rosca ni caerseme la baba cuando les veo y ello está mal visto. Me da nauseas cuando veo como algunos pelotas me destripan y sólo adulan a los que creen son más importantes que un periodista. Otra cosa es que haya apuntado a algunos de la serie que me han insultado, amenazado, que me han llamado facha, burlado de mis apellidos, faltado al respeto a mi compañera en la emisora o llamado "buitre" y aprovechado tan sólo por escribir sobre la serie como yo la veo en cada capítulo y en su marcha general, y porque no comulgo con ideologías extremas. Y lo del turrón que tanto se ha malinterpretado, al margen de la calidad de ese manjar y de la bella población de la que proviene, es publicidad del Ayuntamiento para un argumento al servicio, no de la calidad de un guión independiente y romántico como preciosa historia de amor entre "Onésimo" y Elodia", sino para con un texto creado ex-profeso para vender turrón con esa historia exagerada e increíble que fue una tomadura de pelo. Y para vender ya están los quince minutos de publicidad que meten cada día.