miércoles, 4 de enero de 2017

NO PUEDO VIVIR SIN Tí


Confesión in extremis. Amores que nunca mueren y la mejor secuencia de la tarde; repiten "Francisca" y "Raimundo" en este descafeinado navideño que ha devenido ESDPV. Atrapados en los mismos laberínticos conflictos amorosos que se cebaron en los magníficos primeros tiempos de PV. Una maravillosa ironía de como el enfrentamiento entrambos puede ser el origen de una felicidad que jamás encontrarán y de cómo la razón y la mentira están condenadas a entenderse aunque hablen diversos idiomas. Y nunca sabremos, y ese si que es un misterio en ESDPV, si en realidad, "Francisca", ama a"Raimundo" y no es sino una pérfida teatrera. Luego continuaremos con este final.



Ignoro el por qué ha vuelto Loreto aunque nos ha gustado verla, aun en tan pocos capítulos; por simple nostalgia y por su estilo recitativo y su valentía que han cobrado independencia y personalidad sin "Gonzalo",  y ello ha sido muy interesante. Pero la han hecho participar de un guión  sin pies ni cabeza, sin coordinar y al estilo de un PV ocurrente sin alguna base ni lógica, que bien merecería poner a estos guionistas en la calle, por reírse del público. ¡Es demasié!
No sólo es que nos quisieron "colar" que dormía "María" en el monte, cuando en el pueblo helaba en una plaza, durante varios días y sin higiene alguna a pesar de lo fresca y lozana que se le ve al final, con unas mantitas compradas en los "chinos" de Leganés.


Es peor aún: Nadie puede creer que, interviniendo la G.C. y siendo ella la trampa, y más en un tiroteo con el primer fiambre del año, nadie se enterara que no era una testigo cualquiera y además era la hija huida, perseguida en primera instancia por ese mismo cuartelillo, que no testificara ni se identificara, a la que llamó "hija" su padre delante de los miembros de la G.C. O que nadie se enterara, ni "Francisca", y su visita a la cárcel fue una chapuza para salir del paso. Por no hablar del fulgurante viaje relámpago de de "María" a PV, atravesando el "charco" en algún poderoso medio de transporte parece. Como la secuencia de pacotilla entre "El Guapo" y su "hija". No son serios y la actriz habrá cobrado pero nos ha dejado perplejo el guión. No sé si segundas partes son aconsejables, aunque "María" tiene su encanto y autonomía interpretativa, y las audiencias no han sido muy favorables. Una Loreto no necesita que cause risa la situación por incomprensible, sin pies o cabeza, porque ella vale más que para esta parida del monte. Si contratas a una actriz de su altura, dale un guión y no bases todo en su presencia y bagaje de otra época. Para eso sobran guionistas.


Y sigue faltando iconos de Navidad, ineludibles en aquella España. ¡Es acojonante! Mientras Pablo Iglesias confiesa poner el belén, cantar villancicos y entusiasmarle la Navidad en su casa, lo coloque o no, ESDPV da la cara e intenta jacobinamente cargarse motivos de la Navidad en la serie. Aunque sí que coincidieron con Pablo Iglesias, en el PV el año pasado, cuando dijo que "San José era republicano, la Virgen socialista y el niño marxista-leninista" Por eso exhibieron un belén comunista, regado por bailes revolucionarios y a los que sólo ya le faltaba taconear el Kasachok".



Ya dijimos hace dos días, los espetadores pasamos de muchas tramas porque nos enseñaron a amar ESDPV los mejores guiones y los mejores actores y esto de ahora no tiene fundamento, no se lo creen ni ellos mismos. Es una chapuza simplemente. Y nos escoramos hacia lo de ayer, buscando rescollos de brasas que albergaron nuestro corazón e incendiaron nuestro amor por la serie. Como lo de "Francisca" y "Raimundo" esta tarde.
El amor carece de lógica y el de estos dos personajes, ni de ello ni de futuro porque, "Francisca", María Bouzas,  es la mayor y mejor teatrera de seriales de TV desde la gran Amelia de la Torre.



Una impactante secuencia que se desarrolla entre los contornos de enamorado perpetuo en "Raimundo" y la fuerza transfiguradora de la ficción en "Francisca". Secuencia simplemente brillante. Donde el personaje tiene algo de la generación frustrada de vascos como  de la época de Ramón Ibarra, los cuales pensaron que, con el nacionalismo, llegaría un mundo mejor a Euskadi tras la muerte de Franco y se embarcaron en luchar por unas ideas nobles y que fueron traicionados por la casta político nacionalista y militar; que buscaron el confort, la moqueta, la "pasta", el poder, la Razón corrupta de consenso de Estado y se hicieron todos pasteleros y vividores. Todo, mientras unos ilusos daban la cara.  A "Raimundo" le sucede igual. Su cargo chocó con la imposibilidad de ser justo y la injusticia que suponía favorecer a los tuyos. Y dimitió. ¡Fíjense hoy en día! Cualquier cargo de cualquier partido, desde la ultraizquierda hasta el PP, se jacta desvergonzadamente de favorecer a los suyos. Y luego me llaman  "facha" y me borran del facebook por recordar a alguno estas cosas y por agradecer que uno escogiera seguir en PV y no haciendo de Bandrés en un filme sobre Mario Onaindía, en un filme que ni se sabe del mismo a día de hoy. 



Secuencia con gran carga de sentimiento y ternura que narra esta entrañable historia de amor repleta de ambigüedad y sin futuro pero que no se desprende de su presente y pasado; una trama que nos lleva a una melancolía y nivel existencial demoledor, que nos recuerda lo que en tantas ocasiones hemos vivido muchos de nosotros. Millones de sensaciones a las que casi sobran las palabras siendo todo algo muy próximo a lo que es en realidad el amor: un escalofrío que recorre el cuerpo, unas miradas que lo dicen casi todo, y luego la pena y su triste grandeza, al amor frustrado y casi sin saber por qué. Amores viejos que nunca acaban de morir.












2 comentarios:

  1. Enorme artículo muy moderno y actual. Escrito por un maestro como tú testigo de tantas cosas en Euskadi. Estoy alucinado sobre como has descrito todo hoy, con brillantes, honradez y mucho amor a la serie.

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  2. Precioso y me sigue atrapando el amor esntre estos dos.

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