No me extraña que el abogado de Puigdemon diga que su cliente no tendría un juicio justo en España; ello, lo afirmo, a pesar de que no es de mi cuerda el expresident. Lo de este juez de "La Manada" se las trae.
Los vídeos, no nos engañemos, y los testimonios de quienes recogieron a la chica llorando y en posición fetal en un banco así como de la Policía de Pamplona, reflejan que su reacción era coherente con la situación denunciada y que, todo en conjunto, hace imposible presuponer aceptación o tolerancia a lo sucedido carnalmente sobre ella. Sólo el juez González es favorable y se inclina por la absolución de los acusados. ¿Por qué? ¡Señor JUEZ!!!! No es cuestión de dolor o daño físico sino de humillación y posible violación. ¿No entiendes eso juez?
Los vídeos, no nos engañemos, y los testimonios de quienes recogieron a la chica llorando y en posición fetal en un banco así como de la Policía de Pamplona, reflejan que su reacción era coherente con la situación denunciada y que, todo en conjunto, hace imposible presuponer aceptación o tolerancia a lo sucedido carnalmente sobre ella. Sólo el juez González es favorable y se inclina por la absolución de los acusados. ¿Por qué? ¡Señor JUEZ!!!! No es cuestión de dolor o daño físico sino de humillación y posible violación. ¿No entiendes eso juez?
En el caso desgraciado que narramos ayer sobre Nagore Laffage, su madre
penaba porque tal vez si su hija hubiera consentido, estaría viva. La hubieran
deshonrado de igual modo. Ya muerta, la pobre Nagore, recibía preguntas de un
jurado popular que ni el mismo juez trasladaba a los testigos; entre ellas, la
única que sobresalió era si era “ligona”. Aquí nos encontramos con el caso en
el que, una chica de 18 años que en los Sanfermines del 2016 pudo ser violada
por “La manada”, y como parece tuvo relaciones sexuales con ellos, todas las
pruebas de la defensa y de los supuestos violadores van contra la chica en
cuestión. Y no sólo de sus abogados sino de mucha prensa y hasta hoy mismo ya
de un juez, Ricardo González, uno de los tres jueces del caso, que desea liberar a los de “La Manada” después de interrogar a la chica. Parece ser que como “daño,
dolor, queda claro no sintió la mujer” está todo muy claro y absuelto. Otro caso más que
huele que apesta y el juez ya ni contar.
Puede tratarse del caso contrario al de Nagore. La víctima quedó en estado de
shock y ello puede llevar a quien busca desde hace tiempos resquicios de
inocencia, a usar de esta laxitud en el momento de las penetraciones y
felaciones, para culpabilizarle de consentimiento. A Nagore le hubiera ocurrido
igual. Lo más lamentable y lo que denuncia al juez González es que, en este
momento de las declaraciones contra la chica, se puso en favor de los acusados
al preguntar a la víctima si hizo algún gesto o manifestación para advertirles
que se encontraba en shock. ¡Increíble! Podía haber dado incluso una rueda de
prensa la señorita para advertir que, en el portal, entre esos maromos
enfebrecidos, se encontraba bajo el choque de una conmoción. Es lo que se
busca, demostrar con la ayuda de este juez, que pudo haber consentimiento porque todo era gozoso y que
la culpa es de la mujer. ¡Vamos! Que no se comunicó oficialmente la situación psicológica
de la denunciante, por parte de ella, y si se resistió o no al agresor. ¡Aquí no ha sucedido nada!
¡Todos a la calle! Se escucha llegar ya.
Una cuestión que traslado al juez González: ¿En qué momento dicho de
palabra o cómo esta persona señorita accedió a tener relaciones consentidas con
ella? Porque si alguien como “La Manada” desean desprestigiarla y el juez
absolverla, tendrán que probar que ella accedió. Y a este respecto, uno de los
acusados, delante de ese mismo juez, confesó que la mujer había consentido en
las relaciones sexuales, no demostró con que fórmula y otro dijo, al respecto,
que con leves gemidos. ¿Explíqueme señor Juez cómo dio su consentimiento la
víctima? Los videos que ellos mismos grabaron parece demuestran lo contrario y
en ningún momento se observa conformidad de la mujer. Y sobre el móvil que
sustrajo un guardia civil a la víctima, confesó que fue por avaricia y que lo
tiró al ser identificado en la plaza de toros de Pamplona y antes de ser
detenido con sus compañeros en San Jorge, y que tiraron el móvil porque se les podía
acusar de robo. ¡Robo…robo, SÍ! Por otra parte, el militar acusado, negó haber
borrado imágenes que fueron recuperadas después, admitiéndolo después de volver
a tener esas imágenes gracias a la Policía Foral. ¿El móvil se lo robaron para
que no tuviera comunicación?
Parece ser que ella no dijo ¡NO! ¿Y qué? ¿Quién nos asegura que no lo
dijo? Que no se sintió incomoda según el personal allí reunido en el portal. ¿Y un señor enfervorecido es consciente de si la
persona a la que supuestamente está violando se encuentra cómoda o incómoda? ¡Vamos!
Es que escuchas a los denunciados y al juez y todo era balsámico; nada era
resistencia, dolor, sufrimiento, malestar sino puro goce con gemidos, jadeos, y
las gesticulaciones de placer; nada desprende que aquello era una violación.
Los abogados de la defensa de “La manada” con viles informes encargados a detectives
con seguimientos a la víctima acompañada por familiares y amigos, así como de la actividad
en las redes sociales de la denunciante, dos meses después de los hechos y que
han sido retirados de la causa aunque el tribunal, desde el principio, los aceptó como prueba
documental; pero juegan habilidosamente con una fotografía, obtenida tras el
seguimiento; en ella aparece una camiseta en la que se lee: “Hagas lo que
hagas, quítate las bragas”. ¿Y qué? ¿Qué prueba ello? Además, la frase, que está en la Red como comodín pijoprogre y al lado de frases de Groucho, puede
adquirir un significado muy diferente desde el caso de una mujer supuestamente
violada. Precisamente puede querer decir que te hagan lo que les dé la gana, que
sólo queda ya el shock, que tú ya te has quitado las bragas para la sociedad. Muy
desesperados andan los abogados, juez y los miembros denunciados, para tener
que presentar como prueba de que todo ha sido consentido una camiseta con esa
frase que incide en algo que, muchas mujeres violadas, hace en que no denuncien
su caso; porque es muy fácil sacarte un currículo donde tú, mediante, poses, frases
y desmadres, te estés ya acusando de buscar rollete.
Aquí hay algo muy extraño y lo muestra el empecinamiento del juez en sobresalir con su absolución porque no sintió dolor ni daño. Y si los tuvo...¿Usted puede demostrar lo contrario?
No se adonde vamos allegar en este pais. Dan escalofríos. En este caso hay mucho ultra machista que les apoya, es mi opinión,muy bueno el articulo y leal
ResponderEliminarEstupendo articulo y muy triste. Que verguenza
ResponderEliminarEspero que se les condene porque sino se va liar gorda y yo seré uno de los que la liara,por culpa del trato que se les esta dando a las víctimas, mas de la mitad no denuncian por miedo a no ser creídas y no me extraña con esta justicia que tenemos...
ResponderEliminar