lunes, 12 de marzo de 2018

CrÓNICAS MUTANTES: SATANÁS SE LLAMA ANA JULIA. LA CADENA PERPÉTUA


Las mujeres, incluso las progres o a las que hago la “rosca” para que me voten, son tan malas o buenas como los hombres. De 23 niños asesinados en España en el 2017, la mayoría lo han sido por sus madres, en su ámbito más cercano. Yo que soy hombre y me insultan la ultraizquierda, los de Podemos me dicen "me calle" al estilo de Tejero,  el PSOE me llama "mierda seca", los vividores que llegaron tras el 11-M, tildándome de asesino en potencia y siempre de machista redomado, ser despreciable condenado de antemano; jamás he matado nadie o hecho daño y quiero a la gente con todo corazón. Yo no soy malo ni creo que la mayoría de los hombres lo son por ser de ese género. Y como hombre sufro también violencia y no solo padecen las mujeres. Somos todos malos o buenos. El problema es el poder; dárselo, a hombre o mujer, a quien sabes que nadie le va a controlar. A un corrupto moralmente y a alguien  que lo ejercerá sin control. El discurso del rebaño es que ellas son buenas y nosotros malos. Y los sentimientos encontrados o perversos pertenecen a ambos géneros, a la persona. ¡La cantidad de gente que vive en España de lo público envenenando a la población para su provecho! Los que hemos tenido una infancia bella, feliz, inocente, con cariño y buenos padres, no llegamos a comprender tanta maldad satánica. Vaya mi condolencia a la familia y amigos de Gabriel. De todo mi sentir.


Hoy, mismamente, nos hemos enterado que a la policía se le escapó investigar;  tuvo evidencias de algo extraño que sucedió con la hija de Ana Julia, 4 añitos tenía en aquella fecha de marzo de 1.996,  con informe ocular de un agente, donde esta niña se encontró en su casa con una mesa que podía escalar y tener ante sí un hueco al vacío desde un séptimo piso; a pesar de que había ventanas y contraventanas, se encontraban abiertas, con el agravante de que la mitad de la doble ventana corredera derecha estaba abierta y era justo la que tenía delante una mesa por la que se podía escalar hasta la ventana sin dificultad alguna, y la persiana subida completamente. Y la inocente niña cayó.  Y la policía no dio importancia pese a que la madre de su pareja advirtió que “la niña no se había caído sola y que estaba preparado”. Es decir, que todo estaba en condiciones perfectas para que una niña pequeña pudiese atravesar sin obstáculos un hueco hasta caer al vacío de un patio. Y la policía, teniendo incluso la declaración de que la fallecida no era su hija sino una niña que cuidaba, no hizo nada. Motivo más que suficiente para detenerla. Hoy, se reabre el caso que nunca debió cerrase porque se consideró un acto que fue analizado en su momento por la policía como fortuito y puramente accidental. Pese a ello, ahora, la Policía ha decidido comprobar de nuevo los hechos. 


Un poco tarde. Ha hecho falta un estrangulamiento doloroso de un pobre niño, que debió de sufrir lo indecible en su final de vida. Estas muertes por estrangulamiento tardan en acabar con la vida de uno en cinco minutos insufribles. Se obstruyen las vías aéreas, lo que provoca una caída generalizada del oxígeno en sangre o hipoxemia. Esto causa a su vez una parada cardiaca, que termina en un cese de la circulación de la sangre en el cerebro, que es la denominada muerte cerebral. Tal vez si la justicia hubiera sido más puntillosa y hubiera desconfiado de una persona que miente al declarar que la niña caída era una a la que cuidaba, cuando era su hija. Mentirosa hasta el final. Pero todo se aparcó, considerado como accidental y sin aspectos de evidente criminalidad. Tal vez si se hubiera investigado aquello en condiciones, Gabriel estaría vivo. 


Aún quedan muchos puntos por aclarar ya que Ana Julia no se ha confesado culpable. Pero los delitos, por desgracia, prescriben sobre los 20 años con lo cual, Ana Julia, no sería condenada si se descubre que también asesinó a su hija. El juez archivó en marzo de 1.996 el atestado por el fallecimiento de la niña.

  
Este tipo de personas son harto inmorales. A las que se les cae por la ventana en forma sospechosa una hija de 7 años que se trae de su país. Su marido burgales se muere y recibe dinero de un seguro y los hijos del empresario dicen que intento influir para modificar la herencia. La hija del ex novio de Ana Julia confiesa que a su padre le vació las cuentas, en el 2012, y se compró un piso en la República Dominicana. Tiene otro compañero, inmediatamente tras la muerte de su marido, con el que se va a Almería. Con este dura un año y conoce al padre de Gabriel. ¡Cómo una persona así no va a tener sangra fría para cualquier villanía! Asesina fría que colocó pruebas mover intentaba confundir a la Guardia Civil poniendo pruebas en otro sitio; la más dolida de entre todos y la que más llamaba a la solidaridad y búsqueda; la número uno que participaba en las búsquedas; quien hablaba con los medios y lloraba desesperada y encima ahora se sospecha de que pudo hacer lo mismo con anterioridad......el diablo en persona.  



Este jueves, en el Congreso, se debate lo que la ultraizquierda y sus amigotes del PSOE han presentado para anular la Cadena Perpetua. Ya los sacó a casi todos Zapatero de la cárcel. Es un problema muy grande, favorece a  los asesinos en serie y violadores. Venimos de celebraciones donde parece que todos los hombres somos escoria y criminales, en potencia y casi de hecho. ¡Es el 11-M! Machistas insufribles que nos llaman y que por mor del 11-M así aparecimos. Todo es violencia del hombre en un país de "amor femenino". Hasta en los seriales de la televisión, “Amar es para siempre”, la mujer es pía y sufrida, acosada por el machismo y unas leyes injustas y el hombre un desalmado. Está ocurriendo en Europa, ahora; sucedió cuando no se investigó a esta mujer, y desde el 11-M. Se aparcaban en España los delitos que no eran presentables. Hoy, la Ley de Violencia de Género resulta obsoleta; burocracia de la que viven muchos vividores de despachos de abogaduchos. Ese castigo diferente, según sexo, por el mismo delito, para hombres y mujeres, pagadas con “parné” europeo incluso, es inadmisible.


Esta mujer asesina, dentro de la dictadura que nos imponen, es tan asesina como cualquiera otra persona de género masculino. Y debe entrar para siempre en la cárcel. Debe de ser castigada con la Perpetua de 30 años. Ni que sea de color o mujer. Es que hoy los voceros plumillas de la ultraizquierda hacen propaganda de que existe un complot racista contra este satanás de Ana Julia. La realidad es que un niño ha muerto por la madre que lo debía cuidar. Que una niña murió y no sabemos cómo. Y es que todo en España es una falsedad y los asesinos son siempre asesinos. Y decirle a la abuela que no se reproche nada. Aquí la culpable y asesina es Ana Julia.






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