domingo, 1 de marzo de 2015

INES DE LAS MIL DESGRACIAS / UN HOMENAJE A LAS MUJERES DE ESDPV


ACTRIZ DE MÉRITO:

FARIBA SHEIKHAN


Ver a Fariba, para mí, no tiene precio. Lo que se esfuerza y vale. Para mí sería más fácil hablar de los desamores y desencuentros entre "Conrado y Aurora", especulando sobre truculencias que recorren la Red y tener muchísima lectura, pero prefiero y me siento en la obligación de hablar de lo bueno, sea o no menos comercial. Ver a "Inés" algo tan interesante y atractivo como seguir  a lo mejor que ha habido en ESDPV. Su historia es sencilla y de pobres, ello me atrapa; Fariba hace grande la historia y te atrae enormemente. Ha sido un gran descubrimiento del casting de ESDPV y si no fuera por ella y en parte por Aída Flix, esta historia de la desgracia de una criada y del vástago con un bruto "Bosco", no resultaria interesante salvo en lo más epidérmico que puede traducir un culebrón. Además de incorprar esa gran crítica social de toda una época que se cebaba con los más humildes y mujeres sobre todo y que robaba bebés como se ha hecho en las últimas décadas en la triste España.


Fariba que procede de una escuela que el que ha querido aprender, lo ha hecho,en la EITB, posee una formación sólida (no es cualquiera) por sus estudios en lo más grabado: en la Escuela Superior de Arte Dramático de Sevilla o en la magnífica de Madrid de Cristina Rota. Ello se nota aunque muchos espectadores la despreciaban en sus comienzos, negándole su propio papel por no interesante y reiterativo y acusándola de sobreactuación, cuando no era un defecto sino una manifestación de su praxis en el teatro de la gestualidad corporal (algo contemporáneo y renovador de la actualidad escénica). Por ello se confundieron con lo hiriente y exagerado lo que no eran sino unas muy matizadas expresiones y de las que se derivaban esos primeros planos muy atractivos y desgarradores en la composición de su rostro y en la expresión bucal, fantásticos y con mucha poesía y ternura, que nos permitieron y permiten comprender y asumir, como nuestra, la narración dramática de sus infortunios sólo con el rostro, unos movimientos corporales, un primer plano y la voz, Ser actor es prepararse, saber expresarse y trabajarselo día a día y no sólo que te toquen el culo, salir de guaperas y hacer de macarrilla en una subvencionada peli bodrio que luego, a las dos semanas de su estreno inexistente, la pasan por algún canal de televisión pública y privada y que tampoco contempla nadie.


Por ello "Inés", a pesar de sus años jóvenes, manifiesta un asombroso dominio de la técnica interpretativa, una muy notable capacidad para representar a su personaje y recrear su desgraciada situación; ella llena la pantalla y ha sabido aprovechar la chance que le da María Bouzas (una gran señora joven, generosa y genial) y supo inmiscuirse incluso por un sadomasoquismo sinuoso muy difícil de crear con convicción y con María y su saber hacer consiguió una estupenda caracterización psicológica de su personaje. A Aída Flix le motiva y da un realce nada maniqueo a "Amalia"; a "Bosco" le supera (Ortiz es para que se vaya a hacer de compungido rey moro en algún drama de Shakespeare) pero se pone nerviosa frente a él; con Marta Tomasa tiene excelentes momentos de amistad y cuitas de mujeres que son una maravilla y es que Fariba tiene una presencia impresionante para expresar la humillación de amor en todos los tiempos y saber llevarse muy bien con los compañeros en escena.

 


De todos modos la sobreactuación tampoco es mala, si para muchos la siguen viendo con este defecto que así lo consideran, pero ya en el cine mudo ( y hay planos con Fariba en el chamizo que si les quitas el sonido, aumentas la velocidad, los ves en 4/3 y en blanco y negro, parecen del cine de Dreyer), en aquel cine silente, los actores transmitían y emocionaban aunque sobreactuaran y es que cuando a uno le sobran las palabras, tiene esa tendencia al plasmar lo que se quiere comunicar.

Fariba es dolor y espiritualidad en grado superlativo, nada que ver con actrices burdas y horteras, incluso de cierta calidad y preparación pero que les falta el alma, ella tiene que sabe agregar su propio mundo espiritual a sus papeles sin que notemos es ella misma. De hecho en su sangre lleva dos grandísimas y ancestrales culturas: la Persa, con esa expresión de lo profundo y de el valor de la interioridad del ser humano, capaz de trascender el tiempo y llevarnos hasta lo más sagrado; y la vasca, un país con su dureza y creatividad, con sus mujeres impresionantes y valerosas que son el centro de la vida, una cultura centrada en su ancestral percepción cosmogoníca, en la espiritualidad del ser, en la melancolía y pesadumbre y en la verdad alejada del todo monoteísmo.




En muchos de los momentos en los que participa lo es todo. ESDPV ha tenido y posee desde siempre un maravilloso plantel de actrices: Megan Montaner (un monstruo aunque nunca comprendió al fans y tuvo detalles muy feos con algunos de sus seguidores), María Bouzas (grandiosa), Tusty de Las Heras (una actriz de Hollywood), Andrea Duro (desaprovechada en el serial), Carlota Baró (el cine y la imagen en su esencia y de lo mejor que pasa por ESDPV), Sandra Cervera (la mejor representante del primigenio sentido de la serie), la elegantísima Loreto Mauleón (sacrificada a mayor gloria de Jordi), Maribel Ripoll (una todo-terreno), Cuca Escribano (la aristocracia en el más noble sentido), Carmen Estéban y Carmen Arévalo, Adelfa Calvo (una Jane Darwell de hoy), Sara Ballesteros (podía interpretar a cualquier personaje), Ariadna Gaya (muy buena, hoy algo en decadencia por el guión repetitivo que no le da margen, una voz Metro de Barcelona de los 40 como Leonor Fábregas), Aída Flix (una versión en malvado de "Melania"), Victoria Camps  (aquella lunática "Jacinta" que ha sido  una de las mejores que pasaron por la serie), Marta Tomasa (una casta). Todas en realidad: Paula Cancio (Romy Schneider), Aída de la Cruz (injustamente relegada), Alejandra Onieva (inolvidable), Inma Gamarra (luchadora, comprometida y muy trabajadora y de grandes aptitudes), aquella viejecita extra que entraba en el "Colmado" por lo del regaliz..... Fariba se une a ellas. Lo es todo. La gloria de los planos en los que interviene está en sus gestos, en el sentido que da a la narración, en la exquisita plasmación del dolor, en el sentido de la vida que da a la imagen cuando toma a un niño, cuando lo arrulla, le da su calidez y el pecho, con tanta maestría que llega a parecerse al proceso mismo de ir conociendo la tragedia misma de una persona misma en la vida real. personaje que muestra cada día más complejidad pero que la hace asequible, entendible y muy defendible. Me recuerda a aquellos protagonistas de los filmes de Sjöström y de Jean Vigo, de gran belleza personal y dolor inmensamente humano desde historias pequeñas y conocidas, habituales. Con ese perfil de una chica nueva en la profesión que da intensidad y de todo a la narración.


De ella dije el 7 de octubre en: "LA PRINCESA CISNE"

Toda Fariba ha rezumado encanto, con un cierto leve acento vasco que le ha dado exotismo y ternura, exhala esperanza, amor por unos instantes abrazada  a "Bosco", todo el jardín para ellos, todo aquello que era muy bien acogido en el cine de finales del siglo pasado, desde mediados de los 80, y que hoy parece repeler al personal. Alma y belleza en Fariba, con su amor verdadero en un baile de cuento de hadas; chispa, complicidad  y sagacidad franca en Marta Tomasa.
Me ha maravillado este momento de ilusiones desbordantes en una sencilla chica enamorada, excelentemente llevada a la pantalla por Fariba, de ensueño amoroso e ingenuidad de las que ya no quedan, que nos retrotaen a aquellos dobles de filmes que veían nuestros padres en los cines de San Sebastián, filmes como "Simbad y la princesa, "El ladrón de Bagdad", "La princesa de Cleves" o "La princesa y el pirata", rememoran a actrices como Marina Vlady, Olivia de Havilland, Kathryn Grant, Virginia Mayo o a la inolvidable June Duprez, con aquella preciosas voces de los doblajes de Leonor Fábregas, Carmen Morando, Helia Romero, doña Elsa Fábregas, Elvira Jofre o la donostiarra Ana María Saizar, las mejores actrices de doblaje del mundo.
Filmes con vestidos luminosos para momentos fugaces, besos de amor por unos instantes, todo un jardín para los mayores enamorados del mundo, lámparas mágicas en las islas del confín de los mares, cine fantástico de antaño, relleno de pura magia y mayor fantasía, de aventuras exóticas, de amores más allá del tiempo con el encanto de las viejas fantasías que ya no se usan, obras maestras irrepetibles. PV esta tarde, nos trasladó a aquel mundo de "Cenicienta" y su principe, con una referencia en Fariba esta tarde en aquella Mary Pickford en la "Cinderella" de Kirkwood.



5 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo contigo, es una delicia ver a Fariba. Al principio no me convencia, la veia un poco sobreactuada y me ponia nerviosa con esos gestos de enseñar los dientes pero cada vez la veo mejor. Realmente las actrices de Puente Viejo son de lo mejorcito, sin desmetece a los chicos. Por ciero, vuelve Mario Martin, nuestro amada Pater.

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  2. Siii!!!! Mario que tanto le quiero. En marzo le veré. tengo ganas. Besos Cris!!!!

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  3. Precioso articulo y ademas destacas lo bueno. Comoprendoq ue haya gente que no te comprenda ya que España es un pais de gente poco preparada. leo cosas malas sobre esta serie y creo es modélica. Animo y sigue asi.

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    1. Me gustaría saber cuál es tu nacionalidad y tu preparació para ser tan prepotente. De entrada, tómate nota: has escrito una redundancia "comprendo que haya gente que no te comprenda".
      En fin...

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    2. karmentxu, no te creas que tú demuestras mejor educación,al cuestionar las raíces de una persona que solamente se deshace en alabanzas hacia alguien, y al rectificaar la forma de hablar o escribir de una persona....

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